Nuestra Querida Casera (Final Fantasy/Kingdom Hearts) (NSFW/Lemon)

Capítulo 2

"Vaya noche ¿Viste la mirada en la cara de Xemnas?" Axel sonrió mientras abría una lata de café.

"Si, nuestra casera puede dar mucho miedo a veces" Roxas respondió, mirando hacia arriba, hacia el cielo "Hey, Axel?"

"Mmm?"

"Hemos estado aquí por unas cuantas semanas pero nuestra casera no nos ha dicho su nombre, verdad?"

Axel dejó la lata y se limpió los restos de café que había en sus labios con su pulgar "Nah, nunca le ha revelado su nombre a nadie"

"Entonces, ¿cómo la llamamos?

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"Disculpa" Se quejó ásperamente una voz cuando la chica se movió hacia adelante para dejar espacio al hombre que pasaba por atrás.

"Oh, lo siento!" Se dió vuelta para darle una disculpa mientras sonreía, y sus ojos miraron hacia la imponente figura que tenía delante.

Él la miró gentilmente, en su boca y su barbilla se asomaba una barba, que sólo contribuía a su ya corpulento aspecto. Sus cálidos ojos color miel estaban enmarcados por unas cejas gruesas y unas largas pestañas que se movían cada vez que pestañeaba.

"Sólo necesitaba esto" Dijo mientras alcanzaba una botella de aspirina que estaba por encima de ella. Sus brazos estaban tatuados con algo que parecía alas. Tomó la botella y la examinó de cerca, le dio un meneo y asintió cuando el contenido dentro de ella se movió.

"¿Aspirina? ¿Puedo preguntar para qué?" Miró arriba, hacia la botella en sus manos.

"Resaca, y antes de que preguntes, no, no para mi"

"Mmmh.. esa marca no es lo suficientemente potente para una resaca. Puedo sugerir- "Le quitó la botella de su mano y la reemplazo por otra, de distinta marca" -Esta, es más adecuada para resacas."

"Oh?" El hombre volvió a sonreir.

"Mmm, que no se te olvide llevar jugo de naranja o café para ayudar a recuperarse más rapido. Toma, puedes tomar el mio. Justamente estaba ayudando a alguien más con sus resacas. ¡Además tengo un cupón de descuento para eso!"

"Agradezco su ayuda, señorita....? -Se detuvo, levantando ambas cejas esperando su respuesta.

"Puedes llamarme Lady "Se giró para alcanzar una botella de medicación y dejarla en su canasta de compras.

"¿Lady?"

"Es una especie de broma, pero proviene de lo que hago. Soy una casera (Landlady, en inglés)" Caminó hacia los bebestibles para tomar una lata de café."¿Y cuál es tu nombre?"

"Gladiolus, a tu servicio "Le dio un pequeño guiño" ¿Y si te ayudo a llevar tus compras en forma de agradecimiento?"

Lady se detuvo, miró a Gladiolus y lo evaluó. El hombre era alto, capas de músculos cubrían su cuerpo así como muchos tatuajes. Exudaba poder escondido detrás de su suave actitud. Pero incluso así no parecía una amenaza, sus intenciones parecían buenas.

"No te preocupes, no muerdo "Le sonrió mientras le quitaba la canasta de sus manos y se acercó a un cajero.

Ambos pagaron sus compras, salieron de la tienda con el sol golpeandolos en la cara. Lady tapó sus ojos usando su mano a la altura de las cejas cuando sintió que le quitaban la bolsa de compras de la mano.

"Asi que, ¿dónde vives?" Lanzó las bolsas sobre sus hombros, flexionando sus brazos mientras las sostenía ahí.

"No muy lejos, ¿Estás seguro de que no quieres que las lleve?"

Negó con su cabeza, indicándole que empezace a caminar.

"Así que, una casera, ¿eh? Usualmente las caseras son un poco más..."

"¿Viejas? te entiendo, la gente se sorprende cuando les digo que soy la dueña del local y no una inquilina"

"Estaría sorprendido de ver una mujer joven y hermosa romper los estereotipos de una casera" Gladiolus rió "Sorprendido, pero no decepcionado"

Lady sonrió, sus ojos miraron a sus pies mientras daban contra el asfalto" ¿Y tú qué haces?"

"Mh, soy una especie de guardaespaldas" Palpó las bolsas con su otra mano "Esto es para un idiota que estoy protegiendo en estos momentos"

Ella dejó de caminar cuando vió las grandes puertas de su hogar. "Aquí estamos, estos son mis departamentos, El Alstroemeria"

"Que lindo lugar, así como la dueña" Silvó mirando a la estructura.

"Tu coqueteo no conoce limites, Gladiolus?

"Llamame Gladio "Volvió a gueñirle mientras abría las grandes puertas permitiéndolos adentrarse, los dos fueron recibidos por una agradable brisa de aromas florales debido a la gran cantidad de flores que cubrían el césped en patrones intrincados de diferentes matices.

"Puedo llevar mis bolsas desde aquí, y estoy segura de que tus amigos quieren su medicina también "Le quitó la bolsa de los dedos "Pero antes de que me vaya..."

Lady se acercó a un grupo de flores que tenia lirios de color ambar que crecian en un tallo alto verde, Rompió uno de los tallos y le llevó la flor a Gladio.

"Esta flor se llama gladiolo, se le conoce como "lirio de espada". Parece ridículo pero tómala como agradecimiento por llevar mis bolsas" Lady le acercó la flor. "Tiene el mismo color de tus ojos asi que te queda bien!" Exclamó cuando Gladio metió la flor en el bolsillo delantero en su pecho.

"Gracias, Lady. La cuidaré. Eh, deberia volver antes de que el principe encantador se vomite encima de nuevo. "Acomodó la flor para que no se aplastara "Fue un placer conocerla, señorita. Espero que nos volvamos a ver"

Lady asintió mientras lo llevaba de vuelta a la salida "Ya lo veremos"

Gladiolus la despidió con la mano cuando desaparecía por la calle hasta la vuelta de la esquina, dejando a la casera cerrar las puertas y caminar hasta el interior.

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"Axel" Lady le llamó, abriendo las puertas de su departamento "Tengo tu medicina."

"Dame un segundo!" Le escuchó gritar por detrás y segundos después Axel salió del baño lleno de vapor, cubriendose la mitad inferior con una toalla. Dejando su torso desnudo para que todos lo vieran.

Tragando, Lady apartó la vista inmediatamente "No tienes una camisa?"

"No te veo quejando por estar semi desnudo, asi que no hay problema. ¿Es mi medicina?"

"De echo, si"

Axel caminó hasta ella, metiendo su mano a la bolsa lentamente mientras su brazo y su torso desnudo chocaban contra ella. Murmuró lo que parecía ser una disculpa antes de retroceder y abrir su boca para echar dentro dos pastillas con el café en su otra mano, abrió la tapa con el dedo indice y bebió.

Lady aclaró su garganta y lo miró, con una mano en su cintura "Quería preguntar ¿Quienes eran esos hombres de anoche? Te querían, y a Roxas también ¿Debería estar preocupada?

El pelirrojo no respondió, tomando otro sorbo de café antes de dejarlo en el suelo.

La muchacha se le acercó lo suficiente para sentir las olas de calor que expedía su cuerpo.

"Axel."

Ante la llamada, sus verdes ojos la miraron y ella podía jurar que se oscurecieron ante la preocupación que mostró durante una mínima fracción de segundo antes de volver a su brillo original.

"Mirate, toda seria. Lady, esos tipos no eran nada. No son un problema, créeme" Le dirigió una sonrisa tranquilizadora, pero poco hizo respecto a su preocupación. Después de unos segundos mirandose, ella suspiró y retrocedió. El vapor se acumuló al rededor de Axel mientras la miraba, provocando que el calor formara una pequeña capa de sudor en su piel.

"Si insistes...No quisiera que tú o alguien más sufriera daños"

"No te preocupes, no querríamos preocupar a nuestra querida casera" Sonrió, sus ojos verdes brillaban con picardía "Esos tipos de anoche no nos volverán a molestar"