─ ¿Hola? ─preguntó una voz firme y masculina al otro lado de la línea.
─ ¡Mark! ─exclamé aliviado.
Había llamado ya muchas veces a Bambam y no me contestó, por lo que hablé con Jinyoung seriamente para que pudiera darme el número de Mark, era muy probable que estuvieran juntos.
─ ¿Jaebeom? ─preguntó. Se notaba que estaba en un lugar cerrado por el ruido apabullante que se escuchaba.
─ Sí, soy yo ─afirmé sin tomarle importancia al asunto─ ¿Estás con Youngjae?
La línea se quedó en silencio unos segundos, los cuáles se me hicieron eternos. Llevé uno de mis dedos a mi boca para morder mis uñas, siempre lo hacía cuando estaba nervioso y hoy no era para menos.
─ ¿Él te lo dijo? ─preguntó dudoso y con la voz quebrada.
Nunca había escuchado a Mark llorar. A pesar de que no éramos tan cercanos, estábamos en el mismo grupo y él siempre había sido un chico muy introvertido y, por ende, callado. Escucharlo de esa manera tan mal, me hizo que el nudo que tenía en la garganta doliera como la mierda.
─ H-hablamos hace unos veinte minutos ─susurré con angustia.
─ Ya entró a preparaciones ─anunció con la voz más rasposa y frágil─ La operación comienza en media hora.
─ ¿Qué? ─pregunté atónito. Mi mente quedó en blanco y el teléfono cayó al piso de manera estrepitosa.
¿En media hora?, ¿treinta minutos?, ¿tan pronto? No puede ser cierto. Las lágrimas comenzaron una presurosa carrera por mis mejillas a la vez que mis piernas volvían a temblar. No puede ser tan pronto ¡No puede!
─ ¿Jaebeom? ─escuché a Mark decir a través del teléfono─ ¿Jaebeom, estás ahí?
Me arrodillé en el piso para volver a tomar el celular y ni me molesté en volver a levantarme.
─ Sí ─contesté en un murmullo que podía interpretarse más como un sollozo.─ ¿No te lo dijo? ─preguntó preocupado─ Dios, perdóname, pensé que lo sabías... No quería soltarlo así ─se disculpó.
─ N-No, Mark ─respondí con la voz temblorosa─ Yo sabía, sólo que ─sorbí por la nariz─ No sabía que sería ahora, no sabía que sería hoy...
─ Perdón ─se disculpó nuevamente.
Ambos volvimos a sumirnos en un silencio, sin saber qué decir, pero sin querer colgar tampoco. Ambos llorábamos, podía sentir el llanto de Mark, pero ninguno dijo nada.
─ M-Mark... ─escuché una tercera voz proveniente de la otra línea.
─ Bambie ─respondió.
Las palabras se hicieron un poco lejanas, mientras escuchaba como Bambam lloraba ruidosamente y Mark intentaba consolarlo lo mejor posible.
─ Ya no me dejan entrar a verlo ─sollozó el tailandés─ ¡Pero yo quiero verlo, Mark! ¡Es mi mejor amigo, tengo derecho! ─exclamó echándose a llorar otra vez.
─ Ya... tienes que estar tranquilo por Youngjae, tenemos que ser fuertes por él, ¿entiendes, bebé? Recuerda que él dijo que no quería que lloráramos por él.
Aunque Mark consolaba a Bambam, también lloraba.
─ ¿C-con quién hablabas? ─preguntó entonces, el menor de todos.
Mark demoró un poco en responder─ Hablaba con Jaebeom.
─ ¿Con Jaebeom? ─preguntó Bambam repentinamente interesado─ ¿Está ahí todavía? ¿Puedo hablar con él? ─habló rápido.
─ No lo sé ─murmuró Mark─ Jaebeom, ¿estás ahí?
Me sentí avergonzado por no haber colgado el teléfono y estar escuchando su conversación, pero Youngjae era más importante para mí en esos momentos que la privacidad de la pareja─ S-sí ─asentí débilmente.
─ ¡Jaebeom hyung! ─exclamó Bambam y pude escuchar cómo le quitaba el teléfono a Mark de las manos─ ¿Dónde estás?, ¿ya vienes para acá? ─preguntó con un toqué de esperanza en sus palabras.
¿Yo? ¿Ir? ¿Puedo?
─ ¿Yo...? ─pregunté inseguro─ Mmh, yo... ¿puedo? ─murmuré finalmente.
─ Tienes que venir, hyung...
─ Bambam, pero yo...
─ Tú nada, tienes que estar aquí, Jaebeom. Es lo que Youngjae querría ─dijo con amarga melancolía─ Debes estar aquí para él pase lo que pase. Estamos en el Hospital General de Busan, tercer piso, sala de espera cinco, aquí estamos Mark y yo.
─ Está bien ─asentí─ Llegaré en unos quince minutos ─dije, sin poder parar de llorar.
─ Te estaremos esperando.
Asentí de nuevo después a colgar, pero algo más pasó por mi mente─ ¡Bambam, espera!
─ ¿Qué pasa? ─preguntó entonces y suspiré.
─ Gracias ─murmuré apenado.
Desde que supe que Bambam sí conocía al chico de los mensajes, a mi mocoso, lo había tratado de una manera tal vez más hostil de la necesaria y aunque la mayoría fuera en broma, no teníamos la confianza suficiente para ese tipo de trato, así que entendería si yo no le simpatizaba, pero ahora él se portaba realmente amable conmigo.
─ Apresúrate, feo ─me contestó y sonreí muy levemente al oír su tono suave, aceptando "mis disculpas"
Corté la llamada finalmente y me levanté del piso.
Sólo espérame un poco más, Youngjae.
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[ғᴀɴғɪᴄ] ¡ 𝐁𝐮𝐞𝐧𝐨𝐬 𝐃𝐢𝐚𝐬 𝐉𝐚𝐞𝐛𝐞𝐨𝐦 𝐇𝐲𝐮𝐧𝐠! • 2ᴊᴀᴇ
Fanfiction" Tienes un nuevo mensaje de: " ➸ Adaptación. ➸ Historia original escrita por @nxmi_j ♡︎ ➸ Finalizada.