Parte III: Violento.

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"now it's the last (thing left on my mind)
afraid of the dark (do you hear me whisper)
an empty heart (replaced with paranoia)"

Una semana había pasado de su desaparición, muy en el fondo tenía la esperanza de que alguien estaba buscándolo.

Esta vez Harry lo había dejado mirar por la ventana unos cinco o diez minutos, y en verdad que lo estaba aprovechando.

Ya sabía que él se llamaba Harry, más aún no sabía como era además de ojos verdes y rizos desordenados. Tenía curiosidad de verlo bien, sin estar en la oscuridad o con su pasamontañas, quería saber quien era.

-Solo quiero saber tu nombre, vamos -suplicó una vez más el de cabellos caramelo, en verdad que quería ese dato.

-¿Para qué? ¿Para que me denuncies a la policía o algo así? Paso, en serio -bramó furioso el tipo mientras estaba arriba para no ser descubierto.

Un pequeño bufido salió de los finos labios de la víctima, se estaba irritando por la actitud del rizado y no iba a aguantar demasiado. ¿Que le costaba solo decirle el nombre? Además, era sin apellido, así que lógicamente no podía denunciarlo.

-Solo el primer nombre, por favor.

Y el rizado se hartó de los berrinches que hacía el ojiazul, por lo que no tuvo de otra más que responder:

-Harry.

El cielo era gris, parecía demostrar sus sentimientos y parecía que estaba a punto de llover. Parecían ser las cuatro o cinco de la tarde, algo así, no se veía el sol en ningún lugar.

Soltó un suspiro, uno lastimero, y se hizo bolita justo en el marco de la ventana. No podía dejar de mirar, quería apreciar todo antes de que nuevamente lo encerrada en la habitación oscura y pasaría mucho tiempo para volver a ver el sol, o tan siquiera el exterior.

-Llevas veinte minutos ahí sentado, Louis -gruñó Harry viéndolo con cara de molestia. Estaba cruzado de brazos justo al lado de él.

-L-lo si-siento... Yo... Perdón... No-no me di cu-cuenta del ti-tiem-mpo -murmuró con un violento rubor cruzándole el rostro. Inmediatamente se puso de pie y caminó directo a las escaleras, pero una fría y grande mano lo jaló hacia atrás, deteniéndolo.

Pudo ver sus ojos, solo eso, y estos destellaban rabia. Sabía que estaba enojado, demasiado, y también sabía que era su culpa y probablemente iba a tener más hematomas durante varias semanas.

-¿Qué te pasa? -preguntó el de ojos verdes sin poder soltar el agarre en el brazo del castaño; en vez de eso, lo apretó-. Te excediste quince minutos. Nadie te dio permiso de eso.

Y sintió un golpe en el estómago, lo dejó sin aire y ocasionó que se doblara de dolor. Y uno después en las costillas, pero ese lo mandó directo al piso. Sofocado, pareciendo que moriría. Así se veía Louis en este momento después de tan solo dos golpes. La ira de Harry volvió a correr por sus pulmones y sin poder evitarlo golpeó el antebrazo izquierdo de la víctima, ocasionando un agudo y lastimero chillido de dolor, pero a él no le importó.

Claro que no.

En cambio, solo volvió a dar golpes al pecho y abdomen del castaño, igual de fuertes que el primero, igual de dolorosos. El golpeado pensaba que no podría ni con uno más, estaba tan adolorido que pensó que se desvanecería en ese mismo instante.

-Vuelves a llegar tarde y no sales vivo, idiota -bramó el de ojos verdes, pero no detuvo su masacre a la piel del lastimado.

Siguió golpeando con brutalidad mientras comenzaba a ver puntitos de sangre a través de la piel bronceada, y solo así paró. Se levantó de golpe y jaló de la mano de Louis poniéndolo de pie.

Otro quejido lastimero abandonó los fijos labios y eso enfureció un poco al pálido chico.

-En serio que has tenido suerte de que no te he matado ahora mismo -admitió aun enojado el dueño de la cabaña.

Lo jaló hasta su habitación y lo metió ahí cerrando rápido con llave. No cenaría hasta las 22hrs y apenas eran las 15hrs. Bajó las escaleras mientras se guardaba la llave en el bolsillo trasero de los skinny jeans y soltó un suspiro.

Sabía que no iba a pasar, pero en serio lo quería. Se estaba arrepintiendo.

Ya no quería ser violento.

Stockholm Syndrome. |Larry S. AU|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora