Capítulo III

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"Un llamado"

—Novata —la voz de Zulema despertó inmediatamente a Roma

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—Novata —la voz de Zulema despertó inmediatamente a Roma.

Aquella se sentó en su cama y miraba a la pelinegra un poco perdida

—Me sorprendes, logras pegar un ojo en la primera noche —comentó mientras acariciaba a un pequeño escorpión.

—Buen día para ti también, guapa —respondió con una mezcla de sarcasmo y honestidad a la mora.

Zulema le regaló una sonrisa de lado, mientras devolvía el animal a la caja con agujeros.

—Es hora del almuerzo, ayer te perdiste la cena —recordó  la mora frente a la puerta de la habitación, dispuesta a salir.

Y así lo hizo, salió bajo la atenta mirada de la morena.

Aquella mujer le generaba cierta intriga, algo la incitaba a conocerla más.

—Mucho no te pierdes —habló Casper, quien no se atrevía abrir la boca frente a Zulema.

—Oh, hablas. Comenzaba a considerar que el apodo te definía completamente, fantasmita —respondió la morena con diversión.

Tras ese pequeño intercambio de palabras, la de pelo corto se quedó completamente en silencio.

Roma se alistó, se puso la remera blanca que se había sacado para dormir, junto a la camisa y las zapatillas de abrojo.

—Andando, Roma —entró Garrido a la habitación.

—Pensaba buscarte más tarde, pero ya que estás aquí —dijo la morena indicando a Garrido con su mirada a que Casper se retirara.

—Afuera —fue lo único que dijo y la otra salió sin protestar, dejando a ambas mujeres hablar con suma tranquilidad.

—¿Llevas boli? —preguntó Roma y la gobernanta la miró extrañada, pero aún así asintió y le ofreció la que llevaba—. Deme su mano.

Con la inseguridad carcomiendo Garrido hizo lo que la presa le pedía.

—Por tu seguridad ve allí, le entregarán el dinero junto a la entrega. Al terminar tu turno ellos te estarán esperando, y no temas, no te harán nada. 

 —¿Qué me asegura que no me matarán? —preguntó levantando el mentón Garrido.

—Un llamado —respondió con simpleza—. Debo hacer un llamado, y ya tienes tu vida en un cristal cubierto de hierro.

AMORE | Zulema Zahir |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora