🍂 4. Pensamientos

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—Gracias por preferirnos —dijo Hoseok mientras un par de clientes salían de la cafetería.

A lo largo de la semana había trabajado un par de horas extra con el objetivo de compensar  las del pasado viernes, día en el que había faltado y en el que Hoseok se prometió no volver a ingerir más alcohol en un buen tiempo después de lo terrible que lo había pasado con la resaca.

La campana sonó nuevamente y Hoseok dio la bienvenida a los nuevos clientes.

—Un Latte y un Moca —informó poco después a su Hyung que estaba en la cocina.

—A la orden, capitán —respondió el pelirosa.

Hoseok rió suavemente y luego le pidió a uno de sus compañeros que le ayudara a limpiar las mesas.

Había pasado la hora pico por lo que había un montón de cosas que lavar. Mientras trabajaba, Hoseok notó que una vez más empezaba a divagar. Últimamente le costaba concentrarse. No sólo en su trabajo, también en sus clases. Jimin le había estado pasando la mayoría de apuntes ya que él no alcanzaba a copiar nada. Su cabeza estaba siempre pensando en una persona. En su amigo y roommate, Min Yoongi.

Después de que fueron juntos a la fiesta que había organizado un compañero de Yoongi, las cosas se habían tornado un tanto extrañas entre los dos. Para empezar, Hoseok había despertado en la habitación de Yoongi, en su cama, tan sólo en camiseta y bóxers. Y cuando Yoongi había entrado en la habitación, con una toalla rodeando su cintura, se había acercado a él con una sonrisa tierna. Y aquella mirada que le había dedicado, seguía haciéndole pensar demasiado.

¿Qué había significado esa mirada? ¿Qué significaba aquellas tiernas caricias en sus mejillas? ¿Qué había sucedido la noche anterior para que Yoongi se comportara así? ¿O qué había olvidado que era tan importante como para lograr que su Hyung se alejara de él?

Porque a pesar de pedir explicaciones, el pálido se había limitado a decirle que nada había pasado. Los primeros días, Hoseok le creyó ¿por qué Yoongi le mentiría?, pero entonces su Hyung comenzó a comportarse más distante. Por lo general, acostumbraban a cenar juntos y charlar acerca de su día. Pero durante el transcurso de esa semana, en la que a Hoseok le tocaba preparar la cena, el pelinegro o bien se sentaba a comer con él en silencio, o como los dos últimos días, no llegaba a cenar y su plato quedaba intacto.

La situación ya era demasiado inquietante. Hoseok no quería que las cosas siguieran así. No le gustaba sentirse rechazado y evitado por su Hyung. Era demasiado doloroso.

Hoseok era más o menos consciente de que cuando estaba ebrio a veces era demasiado hablador y había llegado a la conclusión de que quizá, ese día le había confesado sus sentimientos a Yoongi. ¡Estando ebrio! Y quizá su mayor le había rechazado (de ahí su actitud esquiva), pero eso no explicaba las caricias y aquella mirada en la mañana...

¿Eso era lo que Hyung le ocultaba? ¿Se comportaba distante por eso? ¿O quizá estaba sobrepensando las cosas? ¿Exageraba? No, estaba seguro de que no exagerada.

Pero y si...

¿Había sucedido algo más esa noche? ¿Más que tan sólo palabras?
No sabía si aquellos recuerdos fugaces y borrosos que tenía eran sucesos reales o tan sólo sueños...

¡Cielos! ¡Se estaba volviendo loco!

Hoseok sacudió la cabeza. En un intento de despejar todos sus pensamientos. No quería pensar en nada y definitivamente aún no estaba preparado para enfrentar el rechazo de su mayor.

No podía hallar explicación, no en su memoria. Y no podía seguir así, tenía que hablar con Yoongi o terminaría perdiendo la cordura.

Hoseok tomó aire y dejó el resto de los trastes sucios en el fregadero y volvió al mostrador.

Lost Kisses [ Sope ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora