落下 (Sasuke Uchiha)

𝗡𝗮𝗰𝗶𝗱𝗮 𝗲𝗻 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗮𝘃𝗲𝗿𝗮

Sasuke salió temprano de casa aquel día, tenía algunas cosas pendientes que hacer según le había dicho a la pelinegra; Quien ese día despertó alegre, era 20 de marzo por ende un nuevo comienzo de la primavera y a su vez se cumplía un año más desde su llegada al mundo.

Hace días que no iba a entrenar pero no le importaba mucho, unos descansos no le harían mal, después de todo había entrenado sin descanso por mucho tiempo. Se levantó con cuidado de la cama del pelinegro, sentía todo su cuerpo tenso a causa de el combate de el día de ayer, con mucha suerte podía caminar sin hacer muecas por el dolor en sus músculos.

Preparó un desayuno rápido que la llenaría hasta la hora del almuerzo en la cual estaría con el trío proveniente de la aldea de la arena, le encantaría estar en su aldea y como todos los años en el día de su cumpleaños ir a visitar la tumba de su madre y la de Akane, pensando en como sería si ellas estuvieran vivas.

" La adolescente miraba ambas tumbas mientras que en sus manos mantenía una flor para cada una de ellas, se cumplían 16 años desde que su madre dejaba el mundo para abrirle paso a ella y las dudas llegaban a su mente.

¿Cómo sería si ella estuviese viva?¿tendría un pastel de cumpleaños o una fiesta? pero la respuesta siempre era la misma, si su madre estuviese viva ella no estaría cumpliendo 16.

—¡Hoy nació la primavera!—oyó una voz alegre a su espalda, Haruko limpió la solitaria lágrima en su mejilla y se volteó para ver a los tres hermanos.

—Feliz cumpleaños, florecilla— Agregó Kankuro con una sonrisa mientras envolvía a la pequeña chica entre sus brazos a lo que ella sonrió con debilidad.

No esperaba palabras de Gaara, le bastaba con el pequeño abrazo que le regaló una vez Kankuro la liberó.

—Te preparamos algo, pero debemos ir a casa—dijo Temari mientras sonreía en dirección a la pelinegra.

Ella no sonreía mucho, tampoco era alguien que hablaba hasta por los codos pero el brillo en sus ojos les hizo entender lo emocionada que se sentía."

Haruko suspiró ante el recuerdo, sentía la felicidad esfumándose de a poco, después de todo su cumpleaños no se sentía como un día feliz y la ausencia del Uchiha solo expandía su sentimiento de soledad.

—¿Para quien son las flores?—preguntó Ino mientras veía al pelinegro concentrado en escoger una flor lo suficientemente bonita para Haruko.

—Nadie que sea de tú interés—respondió sin quitar la vista de las delicadas flores, se estaba comenzando a rendir.

—mi labor acá es guiarte para que compres algo—dijo la rubia mientras se posaba a un lado de él—así que dime para quien es y te podré ayudar.

—La persona que me envió a comprarlas dijo que son para su futura novia—contestó el pelinegro con frialdad, si quería que su futura relación no estuviese tan expuesta desde el principio debía decir un par de mentiras.

—Las que estás mirando se llaman margaritas—indicó la chica mientras llevaba sus dos manos hacia su espalda—significan amor inocente, virginidad, inocencia.

Sasuke las eliminó automáticamente al oír la última segunda palabra, Haruko y él no tenían ninguna de esas características.

—Estas son las orquídeas—señaló unas delicadas flores de color rosa que se teñían de blanco en los bordes de sus pétalos—simbolizan la belleza, la lujuria y la perfección.

Esas le hacían un poco más de sentido que las anteriores. 

—Supongo que esas le gustarán—dijo el Uchiha mientras miraba las flores, eran bonitas.—¿qué significan esas?—preguntó apuntando hacia una flor de color blanco con varios pétalos que le pareció bonita a la vista.