Fifty shades nanny

7. Gracie y la charla

ANA

El sábado fue uno de los días más largos de mi vida. No puedo creer que el Sr. Grey se haya presentado en la casa de sus padres y haya pasado tiempo con su hija. Quiero decir que sí, ella es suya, pero él siempre parecía un poco distante hacia ella. Casi me rompió cuando ella le dijo que todo lo que quería era a él. Ningún niño pequeño debe sentir que tiene que decirles a sus padres que todo lo que necesitaban eran ellos. Me mantuve firme por ella y me prometí a mí misma que si tuviera la oportunidad, me regañaría a él a lo grande.

"Ana", dice Gracie mientras se sube al SUV.

"¿Cómo estuvo la escuela?" Le pregunto agarrando su bolso para que ella pueda ponerse el cinturón de seguridad. Me sorprendió que ella estuviera lo suficientemente bien como para regresar a la escuela el lunes, pero el Sr. Grey fue muy firme en que, al menos que tuviera fiebre, iría, aún más cuando Gracie estaba feliz de ir. Me refiero a qué niño disfruta ir a la escuela.

"Fue divertido, aprendimos todo sobre el ciclo de la rana", dice mientras saca un contenedor de su bolsa con una rana verde viscosa.

"Gracie", le digo mientras ella solo me sonríe.

"Es la mascota de la clase. Puedo mantenerla durante la noche", dice riéndose. Podría pensar en varios lugares para poner esta rana, cada uno involucraba al Sr. Grey y su cama o ducha, tal vez incluso el lavabo, los lugares en mente son infinitos. Le doy una sonrisa.

"¿Tu padre lo sabe?" Le pregunto mientras ella niega con la cabeza y se ríe.

"¿Qué estás pensando?" Le pregunto mientras la ayudo a volver a poner el contenedor en su bolso.

"Señorita Steele estamos aquí", dice Sawyer mientras se estaciona en nuestro lugar habitual. Ayudo a Gracie a salir de la camioneta y observo mientras camina hacia el elevador. "Señorita Steele, si puedo hablar libremente", continúa.

"¿Qué tienes en mente, Sawyer?" Cuestiono.

"Debo decir que desde que subiste a bordo, esa niña parece más feliz y despreocupada que antes. Incluso escucha mejor. Quería agradecerte por decir 'sí'", dice cuando llegamos a Gracie. Nos mira a los dos y levanta una ceja, pero no dice nada.

"Qué", finalmente dije cuando subimos al ascensor. Ella me lleva a su nivel.

"¿Estás saliendo con Sawyer?" ella me pregunta en serio. Dejé escapar una risa. Ella me mira con un poco de ira en los ojos.

"No, Gracie", le digo tratando de no reírme más. Cuando el ascensor se detiene, ella sale de el y se encuentra con su padre.

"Disminuye la velocidad, Gracie, ¿qué te pasa?", Pregunta mientras ella se desliza de sus manos y corre a su habitación. Él mira desde su forma ya retirándose hacia nosotros dos. "¿Qué demonios?" él se enoja.

"Es un malentendido", le dije sin dar más detalles y caminando lejos de él a su habitación.

"¿Qué acaba de suceder?" El Sr. Grey le pregunta a Sawyer cuando me voy.

"No lo sé, señor", dice probablemente caminando hacia la oficina de seguridad. Abro la puerta de Gracie para encontrarla llorando en el asiento de la ventana mirando hacia Seattle. Me muevo hacia ella con cautela, insegura de cómo reaccionaría.

"Gracie, no me estaba riendo de ti. Pensé que tu pregunta era graciosa", le dije sacando sus libros de su bolso y colocándolos en su escritorio. Luego puse el recipiente con la rana en su escritorio también.