Not Again? (Larry Sylinson)

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Los labios de Louis se mueven bajando hacia su mandíbula y cuello, como siempre lo hacían. Las manos de Harry se mueven por la espalda del ojiazul, sus dedos apretando su piel, amando lo cálida y suave que era la piel de Louis. Pero los labios de Louis seguían bajando. Muerde las clavículas de Harry, baja el cuello de su remera y besa el centro de su pecho, sobre el tatuaje.

—  Remera afuera. — Louis murmura. Se separa, apoyando todo su cuerpo en Harry. — Sácala Harreh.

—  C-Claro. — Harry asiente y se inclina hacia adelante, tratando de quitarse la remera con manos temblorosas. Louis se impacienta y se la saca él mismo, una vez sacada Louis besa su pecho nuevamente, mandando ondas eléctricas con nada más que un suspiro en sus labios.

—  Mierda, Loueh.

Louis baja aún más, rozando sus dientes y lengua sobre la piel de Harry, como si no pudiese tener suficiente. Desabrocha el botón del jean de Harry, y lo saca de una fácilmente cuando Harry levanta sus caderas, y luego los dientes de Louis juegan por el hueso de su cadera, su mentón empujando el bóxer de Harry hacia abajo. El sentimiento pesado se acumula en su pecho, haciendo que sea difícil respirar, pero era una razón completamente diferente. Era porque Louis lo estaba mirando con sus ojos azules bien abiertos, un dedo enganchado en el elástico del bóxer de Harry, bajándolo, de a poco, lentamente, cada vez más.

—  Louis. — Harry dice con voz ronca.

Louis sonríe de lado mirándolo, sus labios dentro del muslo de Harry. — ¿Esto está bien?

Esa era la pregunta más estúpida del mundo, Harry piensa. — Si, está bien. — Responde de todas maneras.

Louis asiente, su barba de varios días quemando los muslos lechosos de Harry, lo que hace que su miembro reaccione. Quería agarrar el pelo de Louis en su puño, quería llevar a Louis al límite donde Harry lo necesite, pero estaba feliz por esperar. Feliz por cualquier cosa que Louis le dé a estas alturas.

Harry siempre pensó que los labios de Louis eran indecentes. Eran rosas y finos y aún más finos cuando sonreía. No se había tomado mucho tiempo en considerar como lucirían alrededor de su miembro, no estaba preparado para la vista cuando la lengua de Louis se asoma, suavemente lamiendo la punta antes de rodearlo por completo con su boca para mantenerlo quieto. Y era... abrumador, se había sonrojado, los ojos de Louis grandes pestañeando inocentemente hacia él, el calor de la humedad de la boca de Louis, esa lengua pecadora.

Harry no estaba seguro si tenía permitido tocar. ¿Podía tomar el pelo de Louis? ¿Acariciar con el pulgar su mejilla? ¿Delinear la forma de su boca? No lo sabía, así que hace puños en la sábana y trata de contenerse para no mover sus caderas hacia arriba en la boca de Louis.

Harry retira lo dicho sobre todo lo malo que dijo de Louis en su vida. El hombre era una bendición. Era brillante. Divino. Hace esa cosa donde sus labios se aprietan alrededor de la cabeza de su miembro y su lengua gira sobre éste mientras gime, y el cuerpo de Harry se derrite por completo, su boca abriéndose y cerrándose en silencio, un jadeo sin aliento.

—  ¿Qué hay de ti? — Harry pregunta, solo porque no es la forma en que quieren hacer las cosas.

Nunca la atención es en uno de ellos. Es siempre los dos, tratando de sacarse las ganas lo más rápido posible. Ahora mismo, era solo Louis, toda su atención en hacer sentir bien a Harry. Y lo estaba logrando.

La única respuesta que Harry consigue es que la boca de Louis baje más sobre su miembro hasta que la punta choca contra su garganta. Cuando sube, su mano se coloca donde estaba su boca antes, y la mueve junto a su lengua con su mano húmeda. Y Harry se rompe. Así es como se sentía. No era lo normal que sentía en su abdomen justo antes de correrse, y una onda de tensión acumulada aparece cuando se corre. Es como si Louis lo hubiese partido en miles de pedacitos. No tiene oportunidad de mover a Louis que se corre en su garganta, su vista se oscureció, su cabeza se movía.