Someone Else |Vmin|

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—Podrías quedarte si quieres.

—No es correcto, además mi chófer... podría llamarle, el vendría de inmediato.

Tomando las manos de Jimin ambos se levantaron de la alfombra, el castaño aún y con sus manos entrelazadas lo acompañó hasta la puerta.

Cuando estuvo del otro lado del marco de la puerta, Taehyung se recargó en el marco de la puerta y le dedicó una mirada significativa, casi nostálgica, le sonrió levemente.

—Feliz navidad cariño. —dijo después de un suspiro.

El corazón de Jimin se detuvo, solo así se dió cuenta de que Taehyung se iría, ahora que sabía que tenía novio probablemente no volvería jamás y entonces ... entonces solo se conformaría con verlo en carteles y revistas, no volvería a verlo. Era el adiós final.

Cuando Taehyung notó que Jimin no respondería, le dedicó una sonrisa y caminó hasta el ascensor, sintiéndose un poco decepcionado se dijo así mismo que estaba bien, que podrían vivir sus vidas sin necesidad de estar juntos, Taehyung siempre había soñado con qué el castaño fuera felíz, hoy, en navidad, lo único que quería era qué su exnovio estuviera bien.

Cuando las puertas se abrieron, Taehyung entró y se dió la vuelta para poder ver a Jimin aún de pie frente a él, con la mirada perdida sobre su rostro. El sonido que emitió el elevador indicó que las puertas se cerrarían, el rubio sé permitió suspirar profundamente, mañana volvería y seguiría siendo el mismo Taehyung de hace 7 años, lo cual no era malo, su vida no era mala, sin embargo Jimin siempre le haría falta.

Nadie volvería a tener su corazón, por algo siempre dicen que el primer amor es el que más duele por ser la primera experiencia, con la que vas descubriendo tus sentimientos más a fondo.

Salió de su trance cuando el sonido de advertencia del elevador pitó tan fuerte que sus oídos dolieron. Fijó su vista en la persona frente a él que detenía las puertas con las palmas de sus manos.

—Yo... no quiero que te vayas. —dijo Jimin con las mejillas rojas y la mirada fija en él.

Taehyung sonrió levemente y caminó hasta Jimin abrazándolo de la cintura, haciéndolo dar unos pasos hacía atrás logrando que las puertas se cerrarán antes de que se activará la alarma.

Con una leve sonrisa juntaron sus frentes y seguido de aquello sus labios, el castaño sintió sus rodillas debilitarse cuando sus labios se tocaron nuevamente, sintió como todo dentro de su estómago floreciera.
Sus manos subieron hasta los cabellos rubios de Taehyung, estirando suavemente de ellos, como aprobación escuchó el suave ronroneo de su ex.

Jimin se quejo cuando sé separó de los labios del rubio con un leve chasquido y subió sus ojos hasta la altura de los de Taehyung, sus bonitos ojos grises que ahora lo miraban como si fuera lo más hermoso del mundo.

—Vamos adentro. —susurro tan bajo que apenas y su cerebro registró lo que había dicho, sin embargo, eso era lo que exactamente quería, llevarlo adentro y desnudarlo.

Jimin jadeó ante la invasión del miembro del rubio, la fina capa de sudor que vestía su cuerpo solo era un toque para verse aún más sensual.

Los ojos del castaño se volvieron llorosos cuando el glande se empujó con suavidad en su cavidad, sus paredes abriéndose y abrazando la carne caliente de la polla de Taehyung.

—Oh... —gimió pegando completamente la espalda al pecho del rubio.

Sintió los labios de Taehyung en su hombro, formando un camino de besos húmedos hacía su mentón, cuando el rubio fijó sus labios en el punto sensible ya conocido debajo de su oreja, chupo con fuerza hasta dejar una marca morada.