31: Ángel y Demonio ll

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Su instinto lo obligaba a querer saber más, investigar, interiorizarse. No se conformaba con sólo saber que era un demonio y ya. 

- lo dices en serio?- su amigo quedó atónito mientras es ojiazul asentía serio.

- si, se supone que nos encontraremos aquí en cualquier momento- miró alrededor y no había rastros del castaño- será difícil

- pues si Niall es un demonio, todo lo que tenga que ver con uno es difícil

- confirmo- a ambos ángeles se les erizó la piel cuando oyeron una voz detrás de sus nucas. Se voltearon rápidamente y allí estaba, el castaño con su ropa gris y cabello largo.

- lo sient- con un gesto el castaño hizo callar a Niall. Su amigo sólo desvió la vista sin decir nada, si un demonio no era tu compañero no tenías permitido hacer contacto visual. El rubio miró a Niall y se fue sin decir más, dejando solos al ángel con el demonio- él es... un poco prejuicioso

- no se supone que es un ángel?- Niall se encogió de hombros- de igual forma no me importa, haremos lo que tenemos que hacer y ya

- bien- pasó gran parte del día pensando en si preguntar o no, es que no era como los demonios que había conocido. Harry era atento, considerado y muy serio con lo que hacía, por lo general los demonios eran codiciosos, torpes, inquietos y él era todo lo contrario, lo único en lo que se parecía a uno es que era muy observador.

- vas a dejar de mirarme así o seguirás con eso todo el día?- mierda, lo notó. Tragó saliva- eres muy obvio Niall

- claro que no- se hizo el despreocupado. Harry sólo rodó los ojos, no tenía tiempo para andar con juegos de un tonto ángel entrometido. Quién se creía que es? Se pasó todo el día mirándolo como si quisiese que notara que lo estaba haciendo. No tenía por qué dar explicaciones, mucho menos a un malcriado ángel- crees que terminemos pronto?

- deseo que sí- supo que ese comentario quizá pudo ofender a Niall, pero es que ya lo tenía harto- quiero decir, creo- el ojiazul decidió no decir nada y seguir con lo suyo. Cielos que estaba aburrido.

- cuéntame de ti- decidió romper el hielo.

- disculpa?- el ojiverde frunció el ceño, éste tenía que estar de broma.

- ya sabes... háblame de ti para conocernos- se encogió de hombros.

- y qué quieres saber específicamente?

- pues... por qué eres tan frío?- preguntó en broma pero el ojiverde no la recibió como una.

- no es asunto tuyo

- era una brom

- esas cosas son personales, no te lo enseñaron pobre angelito? Hay cosas que no le preguntas a alguien que acabas de conocer- supo que Niall no diría nada- da igual, es como hablar con una pared

- no es necesaria tanta crueldad... sabes?

- créeme que me sé de memoria los códigos de convivencia, así que no me vengas con eso

- seguro que lo sabes? desde que te conocí sólo me has tratado mal y yo no te he hecho nada

- tu no pero todos los ángeles son iguales

- y tú como sabes?- Niall ya se estaba hartando, sí era un ángel y tenía paciencia de sobra pero no iba a dejar que alguien lo pisotee.

- porque antes fui uno- hubo un silencio sepulcral entre ambos. El ojiazul abrió los ojos como plato, su respiración se cortó unos segundos. Al notar lo que había dicho se alejó unos pasos del ángel y negando se giró para irse; no necesitaba esto, no tenía por qué dar explicaciones ni mucho menos contar su pasado.

One Shots NARRY STORAN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora