Moving On ~Yoonmin~

4. Seguiremos adelante.

"... mi novio"

Las palabras del menor resonaban en su cabeza mientras estrechaba la mano de aquel tipo.

—Min Yoongi —dijo con el semblante serio.

—Un gusto conocerte... Jimin me habló de ti —respondió el violinista con una sonrisa.

—Cosas malas, espero... —trató de bromear para no denotar el mal sabor de boca que le dejó el ver al Adonis frente a él, sosteniendo de la cintura al bonito pelirrojo de abultados labios.

—De hecho dijo que eres un excelente músico y pude comprobarlo al escucharte tocar hace un rato. Sublime.

Yoongi se sintió incómodo ante el halago; Silvain era pura cortesía y él estaba completamente celoso, controlando el deseo de ser un completo cretino con él y arrebatar al pequeño bailarín de sus brazos, pero...

¿Con qué derecho podía hacer eso?

—Gracias— se limitó a responder, pasando saliva y el nudo en su garganta.

La tensión era tan evidente que casi se podía cortar con tijeras.

Los miserables tres segundos sin habla se sintieron eternos, especialmente para Jimin. Hasta que una delicada voz hizo aparición, recordándole a Yoongi que no iba solo esa noche...

—Cariño, ¿Nos vamos?. Mi madre se siente cansada y mañana tenemos la cita con la planeadora —La bella mujer se acercó a ellos, tomando la mano del rubio —Oh, perdón por interrumpir, no ví que hablabas con alguien. ¿Jimin-ssi?¡Por fin te conozco apropiadamente! Hyunie estaba muy emocionado cuando confirmaste que vendrías.

Jimin le sonrió amigablemente a la chica. Era más bonita de cerca, a decir verdad...

—También me alegra conocerle, dio un bello discurso— le dijo inclinándose levemente en forma de saludo.

—Gracias, el tuyo fue muy tierno... Jamás me imaginé a Hyunie como fanático de Batman, siempre lo ví como alguien más de Superman— dijo sonriendo —El tiempo pasa volando ¿No crees? No puedo creer que mi pequeña Yeji ya está casada. Ah... Sueno como una anciana —Los tres hombres rieron simpáticamente por el comentario de Sohee.

La chica era muy amigable y parlanchina...

Ahora entendía por qué Yoongi estaba con ella.

—No es así, Sohee-ssi... La culpa es de nuestros donsaengs por casarse tan jóvenes— agregó el menor, con una sonrisa cortés.

Sonrisa que no duró mucho.

—No tienes que ser tan formal conmigo, Jimin... Ya somos familia. Considérame una hermana para ti— dijo la mujer tomando la mano del menor, dejando ver la sortija con un llamativo diamante que llevaba en el dedo anular izquierdo.

Sintió un pinchazo en su corazón y buscó inmediatamente la mirada del pianista. Reteniendo las casi incontrolables ganas de ponerse a llorar. Compuso su voz lo mejor que pudo para hacer la pregunta, de la que realmente no creía soportar respuesta...

—¿Se van a casar?

—¡Sí! Yoon me lo propuso hace casi un año. Llevamos comprometidos más tiempo de lo que le tomó casarse a nuestros hermanos. Sólo que mi Yoon quería que todo fuese perfecto y ha tenido muy poco tiempo por el trabajo... Pero nos casaremos dentro de unos meses. ¿Verdad, amor?

La ex-pareja no había dejado de mirarse a los ojos durante la animada charla de la mujer, quién siguió hablando respecto a la próxima boda tan emocionada que no notaba que el único escuchando era Silvain.