Capitulo VI

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El Buitre





— ¿Vieron al sujeto que traje hoy? —Jale se acercó a Amy, Robin y Rosa y se sentó en su escritorio, frente al de Amy— ¿El traficante? Tenía ochenta y un años

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— ¿Vieron al sujeto que traje hoy? —Jale se acercó a Amy, Robin y Rosa y se sentó en su escritorio, frente al de Amy— ¿El traficante? Tenía ochenta y un años. Es la persona más anciana que he detenido en toda mi carrera.

— Yo una vez —Amy comenzó su relato y Robin volteó a verla— arresté a un exhibicionista de noventa y seis años. —Robin se sentó en el escritorio de Jake, quien le sonrió al verla— Estaba aterrada de que se muriera en el asiento de atrás o que se desnudara. —Robin soltó una risa al ver la mueca del rubio.

— Mi detenido de más años tenia setenta y ocho —Scully se acercó a ellos— pero el PCP hacia qué luchara como si tuviera veinte.

— ¿Qué hay de un par de gemelos de cincuenta? ¿Cuenta como uno de cien? —todos negaron.

— ¿Qué hay de ti, morena? —le preguntó Jake— Dime que tienes algo interesante —sonrió emocionado.

— Para tu suerte, si niño bonito. Tenía ochenta y nueve. —todos voltearon a verla— Había robado un banco. —Robin soltó una pequeña risa al recordar ese momento— Fue muy gracioso, solo dire que una banana era su arma y que no hay que correr con el suelo encerado.

— ¿Hablan de gente vieja? —Charles llegó al presunto y dejó sus cosas en su escritorio— Sesenta y ocho.

— No es tan viejo —negó Amy.

— Si, pero yo sólo tenía veinte —se defendió.

— ¿Veinte? —preguntó incrédulo Jake— ¿Ya eras policía entonces? —Jake posó su mirada en Robin— Tú ya estabas en el FBI, ¿no? —la detective asintió.

— No. —negó— Fue antes de entrar a la academia —sonrió orgulloso.

— Charle no habla de su detenido más viejo. —comentó Rosa y todos, al darse cuenta, hicieron muecas de asco.

— No, no —comenzó a negar— si era el detenido con más años, sesenta y ocho como dije.

— ¡Dios! —exclamó el castaño— ¿Tuviste sexo con una mujer de sesenta y ocho cuánto tú tenías veinte?

— Sabes como es, cuando tienes la posibilidad de acostarte con una mujer madura... —Robin lo interrumpió asqueada.

— No, no era una mujer madura, ¡era una anciana! ¡Era la abuela de alguien!

DETECTIVE MORNINGSTAR | Jake PeraltaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora