Hablando

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(Cambiamos a la perspectiva por Alex).

Después de encontrarme con aquel lobo, cerré la ventana que llevaba a mi pequeño balcón, al igual que cerré las largas y suaves cortinas ocultando mi habitación. Me había sonrojado demasiado al ver aquel chico, de pronto, alguien ha tocado mi puerta, estaba abierta, pero mis padres tienen la costumbre de tocar antes de hablar, mire atrás mío y era mi papá dragón.

– ¿Puedo pasar, hijo? – preguntó acompañado con una sonrisa.

Asentí aún con el rubor en mis mejillas. El dio una pequeña carcajada.

– ¿Por qué tan sonrojado mi muchacho? ¿Viste a una linda chica o pensaste en alguien? – dijo abrazándome y dando un coscorrón muy leve en mi cabeza, me soltó y negué con la cabeza.

– No, no es una chica... Es... ¿Prometes no decirle a papá tigre? – lo miré como un cachorro.

– Claro, cariño.

– Es... El lobo blanco de enfrente... N... Nuestro vecino... – dije rascándome la nuca.

– ¿Te gusta? – me miro con un rostro pícaro.

– ¡N... No! Es solo que tiene algo que cada vez que me mira fijamente mis mejillas arden... – dije mirando a otro lado algo apenado.

– Oh, entiendo chico, también fui así con tu padre tigre... Pero, no te preocupes, no te molestaré con eso, si te gusta bien por ti, si no... Bien por ti también, sabes que en esta familia nos apoyamos... Y siempre te queremos... – me dio un beso en la frente para levantarse e irse nuevamente.

Apague mis luces y procedí a dormirme...

A la mañana siguiente en la hora del receso me encontraba en el pequeño espacio de áreas verdes, es muy poco concurrido, algunos no pasan por aquí debido a que es detrás de la escuela. Estaba leyendo mi libro y a su vez mi almuerzo. Cuando derrepente el crujido de las hojas y ramas crujió a mi lado, dí un salto y mire, era aquel lobo blanco.

– ¡Hey! Hola... Eh... ¿Cómo te llamas? – dijo algo apenado sentándose a mi lado. Me sonroje al oir esa voz gruesa y dulce a su vez.

– A... A... Alex... E... Es un gusto... Uhm... – dije algo tartamudo.

El dio una risa encantadora.

– Me llamo Yahir... Es un gusto en conocerte, Alex, no es necesario que tartamudés, vengo a ser tu amigo... – dijo sonriendo y mirándome.

– C... Claro, me encantaría... Y... También es un gusto... – dije algo apenado, era uno de los pocos que se acercaba a hablarme...

Se que se ve que es alguien lindo... Alguien que todo chico o chica desearía, pero... Tengo un presentimiento... Algo que me dice que saldré lastimado... Nah... Deben ser pensamientos debido a mi inseguridad.

El chico del parque - [Furry yaoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora