Te fallé, Storge. Parte uno: no lo estoy logrando

179 11 1
                                    

Anotando sucesos de la sección "Te fallé, Storge" hasta el 20 de Julio.



Si mis tormentas huracanadas pudieran transmitir mi martirio en un mundo de insensibilidad normalizada, les pediría explicaciones sin lugar a dudas, sin tiempo a que buscasen una salida por no encontrar respuesta alguna.

Esa indiferencia me hiere en el alma y es lo único que uso de sostén para no caerme. Ni mis brazos tienen la fuerza para sostenerme cuando suceden esas tormentas.

"Gracias por entender/gracias por entenderme", sentir su gratitud al invertir mi tiempo en ayudar me debería llenar tanto como lo digo. Se convierte en una lástima cuando no puede ser lo que profeso y se vuelve parte del espectáculo de estar presente, ayudar y sentir reciprocidad muriéndose en la palma de mi mano.

Es una mariposa en una crisálida que no late; no abre ni cierra nada y fallece, fallece por falta de atención y cariño, fallece porque se merece la tempestad que le fue impuesta al recibir indiferencia a cambio de un hombro en el cual ellos puedan apoyarse en la inestabilidad de la sociedad.

"Tus intenciones son benevolentes y se aprecia una mano a los que no logran encontrarla", recitándose en prosas que suenan a restituciones para mi corazón maltrecho. Mi gratitud es expresada en cada sílaba y todavía siento que se vuelve una correspondencia falsificada.

Mi corazón sufrió por sus maltrechos, sin embargo no emite opinión a la posible causa de que todavía se deteriore por palabras como esas. Su veracidad tiene fuentes distintas con diversos rostros que veo como sombras y almas pidiendo auxilio en lo más insondable de sus ojos. Noto su dolor, hermanos. Porque somos hermanos. El color es un privilegio en este mundo, y que la singularidad de sus colores difieran en sus tonalidades tampoco les hace notar sobre su diferencia; para ellos todos somos "blancos", "negros", "indígenas", "híbridos"; somos clases sociales o colores de piel. Que vos, hermano, seas diferente, no te deja de parecer a mí. Seas blanco y yo negra, seas negro y yo blanca, seamos mezclas y juguemos con sus significados para evadir la incertidumbre.

Sos mi hermano incluso si no compartimos lazos sanguíneos porque todos somos una misma especie. Estemos más o menos desarrollados que otros no nos hacen superiores o inferiores, mejores o peores.

Noto su dolencia y pido piedad porque su martirio continúa. Noto que la esclavitud ahora se le llama seguir las leyes, noto que su color pierde pigmentación y todos quedamos blancos del miedo a decir nuestros pensamientos en voz alta, noto que se escasean las respuestas a preguntas existenciales que un estado actual reitera con abundancia.

No están enfermos por pensar diferente. Lo que pasa es que nadie tolera la contradicción o discrepancia en su hipocresía, pero ustedes no están mal. Sigan siendo buenos. Lo valen.

"Sí me importás", es un dilema que no muchos expresan hacia otros. Entiendan que mis zapatos están desgastados y ando descalza, por eso nadie puede ponerse en ellos. Y las personas que me han repetido esa frase insistentemente se alejaban de mis lamentos despreciables y autodestructivos, oscuros de lo lúgubre que sonaban y pálidos de la fúnebre sensación de cometerlos. Por favor, que se comprenda mi incertidumbre y desconfianza ante tal valor en esa frase.

"Vos podés", ¿yo puedo? ¿Realmente puedo o solo estoy siguiendo un libreto para dar el ejemplo y favorecer a otros en sus condiciones? No me malentiendas, no falsifico ningún consejo, todo sale de la experiencia y la empatía. Sin embargo, a veces siento que debo decirlo para no romperme,

y es ahí

donde me rompo.

No lo estoy logrando, Storge. Te estoy fallando descaradamente con tal de que no noten mi dolor por miedo al rechazo que ya me han condenado en la desconfianza ínfima.

Necesito dormir.

Necesito dejarlo ir.

¿Pero cómo hacerlo cuando me está azotando la realidad de no salir nunca más del pozo en el que me metí yo por culpa de la buena actitud y haber ignorado mis deseos?

¿Cómo hacerlo cuando soy más esclava de los que se hacen llamar mis amistades que de mis propias palabras?

Despierto y respiro. ¿O solo estaba aguantando el aire en mis sueños?

¿Por qué abrí los ojos?



© Storge, 05/06/2020.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 05, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Poemario Interestelar | BlogDonde viven las historias. Descúbrelo ahora