babies for minnie [hyunmin]

Cap XV

—Mi-ierda — murmuró Hyunjin entrecortadamente.

Él estaba sentado en la cama sin pantalones, mientras que Seungmin sentado sobre sus piernas en el suelo, besando las caderas del primero mencionado.

Seungmin metió una mano por la camisa de Hyunjin, acariciando su fornido pecho, sintiendo su acelerada respiración. Hace poco más de un mes que no hacían algo así, el doctor de Seungmin les había comentado que tenían que tener cuidado al tener relaciones ya que 1) es un embarazo múltiple, y 2) Seungmin era primerizo.

El castaño siguió con su trabajo de besar a lo largo las caderas de su novio. Su mano libre viajo hasta la base del miembro de Hyunjin, tentándolo. Fue haciendo un camino de besos hasta donde se encontraba su mano, dio un beso ahí y sintió al otro temblar.

Hyunjin se agacho, tomando el cabello de Seungmin entre sus dedos para así, poder alzarle el rostro y besarlo ruda y húmedamente, el menor gimió en tono dulce al sentir sus labios atacados toscamente. Su pequeña mano trabajaba a lo largo del pene de Hyunjin, lo movía lentamente provocándole gruñidos a su novio, Seungmin rio al sentir la frustración de Hyunjin en sus gruñidos.

Dejo de besarlo y siguiendo con su mano en el cabello de Seungmin lo guio más abajo, Seungmin lo entendió. Con la mano que mantenía en el pecho de Hyunjin, Seungmin lo empujo para que él quedara acostado en la cama. Soltó el pene del mayor y este golpeo directamente en su estómago, el menor rio, le gustaba saber que él lo ponía así de duro.

Se inclinó un poco más adelante, y con el miembro de Hyunjin descansando en sus abdominales, lo beso a lo largo, apoyándose de sus muslos para no caer.

Volvió a la posición inicial, saco la lengua, trazando un camino desde los testículos hasta la punta del pene de Hyunjin, la cual se encontraba bastante roja – casi morada – y húmeda con rastro de líquido pre-seminal. Con su delicada mano, Seungmin lo agarro, metiéndoselo de golpe todo, casi tocando el final de su garganta. Hyunjin tapo su boca con una mano y la mordió.

No podía gritar o gemir fuertemente, Soyeon se encontraba a unos escasos metros en a habitación de enfrente.

Lo saco de su boca provocando un ruido casi obsceno, cosa que causo más excitación en Hyunjin. Repitió la acción unas veces más de meter y sacar duramente el miembro del alto en su boca. Con la lengua trazo la cabeza de este, lo mordió suavemente, la ultima/primera vez que lo hizo, su novio le había dicho que le encantaba que lo hiciera, hoy era la segunda vez que lo hiciera. Utilizando la lengua nuevamente, la paso por la hendidura de la cabeza, eso volvía loco a Hyunjin, quien se estaba jalando los cabellos de la cabeza, frustrado d no poder gemir por las acciones de su novio, usando su fuerza en jalar o apretar las pulcras sábanas blancas de la cama matrimonial.

Seungmin lo tomó lentamente esta vez, al sacarlo succiono el glande, ahuecando las mejillas fuertemente.

—Otra vez — pidió el pelinegro.

Riendo, Seungmin obedeció. Hyunjin no iba a aguantar más, la frente le sudaba a chorros, parecía que le habían tirado un balde lleno de agua o que acababa de salir de una piscina. Tomo las mejillas de Seungmin para besarlo castamente, con su mano sostuvo su propio miembro, lo metió en la boca del chico sentado en el suelo y él lo acepto gustoso, degustando el sabor que desprendía. Agarro fuertemente el cabello castaño de la nuca del otro, asustándolo, siempre era así, a la hora del sexo Hyunjin se ponía algo bruto.

Tiro de su cabeza – la de Seungmin – hacia atrás y adelante, viendo como su pene se perdía dentro de la boca de su novio, siseo por la vista tan hermosa, según él.

Le gustaba que el castaño fuera tan sumiso con él. Hizo lo mismo por un rato, de pronto, con un movimiento fuerte, causo que todo quedara dentro de Seungmin, rozándole la punta en la garganta, cerró los ojos fuertemente por tal intromisión, de estos salían pequeñas lágrimas y gimió demasiado agudo para su propio gusto, eso basto para que Hyunjin se corriera furiosamente en su garganta.

Se recostó en la cama, cansado, mientras que Seungmin se encargaba de tragar y limpiar el falo flácido por completo, subió a la cama, quedando a un lado de Hyunjin, este o beso nuevamente, con su lengua dentro del otro probando su propia esencia.

—Eres el mejor — declaró Hyunjin, dulcemente, rozando su nariz con la de Seungmin y él rio roncamente por su garganta un poco afectada.