– ¿No te parece maravilloso?
– ¿El qué?
Park Ji-Min y Park Jung-Kook se encontraban sentados en la azotea de su hogar mientras observaban el cielo estrellado.
– Lo que hay allí arriba –dijo Ji-Min mientras señalaba con su dedo índice derecho hacia el cielo.
– Creo que sí... es bastante curioso con sólo verlo desde aquí abajo –el azabache sonrío.
– Quisiera saber que misterios esconde –Ji-Min se posicionó frente a su hermano –. Hace poco soñé que viajaba al espacio junto a alguien que me tomaba de la mano y prometía mostrarme todo lo que en este hay y, ¿sabes? –el chico sonrió y tomó de repente las mejillas de su pequeño.
– Di-dime, pero suelta mis mejillas –decía el menor mientras tenía sus mejillas aplastadas y sus labios en un puchero.
– También decía que yo había sido su Andrómeda ya que tarde o temprano teníamos que chocar y hacer un estallido espectacular de galaxias que sólo pueden ser vistas una vez en la vida –el chico soltó las mejillas de su menor para así abrir sus manos y caer sobre el cemento quedando boca arriba mientras observaba maravillado el cielo oscuro.
– Sueñas cosas muy extrañas, chimchim –el azabache se hizo tras su hermano y tomó la cabeza de esta para posicionarla en sus piernas y así acariciar su cabello –. Dentro de poco la super Luna se asomará, ¿deseas verla?
– ¿La super Luna? –los ojos de Ji-Min formaron ese bonito eye smile que le caracterizaba – ¡Por supuesto! Ni siquiera recordaba que entraríamos en esa temporada... las clases realmente me consumen y no puedo disfrutar de lo que realmente me gusta –hizo un leve puchero.
– Te llevaré a verla. Lo prometo –Kook estiró un poco su mano derecha dejando ver sólo su dedo meñique.
– Sí sabes que el mejor lugar para verla es Seoul, ¿no?
– Lo sé y te lo estoy prometiendo con el meñique así que une el tuyo con el mío que me estoy enfadando, Park Ji-Min.
Ji-Min sonrío y antes de unir su meñique con el de su hermano, golpeó la cabeza de este – Soy el mayor –río –, no tú –unió su meñique con el de su hermano.
– Lo sé, pero no lo pareces –el azabache sacó su lengua para luego abalanzarse sobre su hermano y hacerle cosquillas.
Las risas resonaban por todo el barrio donde residían aquellos dos. Las estrellas parecían iluminar cada vez más cada que la risa del mayor de los Park aumentaba gracias a lo experto que era su hermano menor en las cosquillas.
Si Park Ji-Min sonreía, las estrellas parecían hacerlo también. Su risa era la más dulce y encantadora todas al igual que su voz.
Las estrellas parecían disfrutar de la existencia de su chico favorito; desde que era tan sólo un niño, se habían dedicado estas a aparecer todas las noches e iluminar más y más el cielo cada que su chico sonreía o reía. Si su chico se sentía mal, era increíble como las estrellas desaparecían, nadie se lo preguntaba ya que pensaban que era algo normal, pero Park Ji-Min sí lo había notado y sentía que de cierta manera, se había hecho mejor amigo de estos hermosos luceros. Todas las noches subía a la azotea y les hablaba para así no perder contacto alguno hasta que su hermano también decidió acompañarle.
Se había interesado mucho en el tema de las luciérnagas del cielo, pero su horario escolar le impedía entrar más a fondo en este así que esperaba poder dedicar todo su tiempo a estas algún día. También, deseaba que alguien amante a ellas le guiara, pero no había tenido suerte hasta que aquella vez sus mejores amigos le habían llamado para darle a conocer que había alguien amante a la astrología.
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"El Susurro del Universo" (NamMin/MiniMoni)
Fanfiction¿Imaginas que el Universo sea el cómplice de tu unión con la de aquella galaxia que te complementa? Aquí fue posible. Va dedicada a @bl-ackbangtan ❤~