CAPÍTULO 7

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Pov.Taeyeon

Instantes antes...

Me encuentro en la habitación de gerentes, esperando a los faltantes, y mi molesto celular no deja de sonar.

Ni siquiera recuerdo en dónde lo dejé.

Me pregunto porqué me marcan tanto, si no tengo en estos momentos el molesto teléfono de la empresa.

Lo peor es que estoy renegando conmigo misma por un estúpido artefacto, el cual sigue sonando y siento que cada vez con más intensidad.

Después de mi espectacular y digna demostración de frustración, decido levantarme de mi cómoda silla, dispuesta a encontrar ese ruidoso y perturbador móvil que emite tan insoportable sonido.
Sé cuánto me molesta y cuanto de intolerante me pone, pero no comprendo porque carajos no lo pongo en silencio y lo peor, es que aún lo conservo con sonido de fábrica.

No hay nada más perturbador para el día de hoy, pensé.

A causa de mi gran desesperación pude encontrar el celular, camuflado con perfectos libros de poesía antigua, dignos de gran alabanza. Pues mientras estos me brindaban una amplia posibilidad de entendimiento y tranquilidad, mi estúpido celular no dejaba de causarme todo lo contrario.

_ ¿¡Quién me llama con tanta desesperación!? -termino explotando-

Reviso el número en llamadas recientes y me aparece como "número no agendado".

¿Debería molestarme? Sí, por supuesto que sí. Estos insolentes, solo gastan el tiempo de las personas ocupadas.

Vuelve a sonar, pero no consigo responder a la llamada, por lo que me llega un mensaje. Abro bandeja de entradas y efectivamente era del número que me ha estado perturbando la tarde.

"Lo he pensado mucho después de la última vez que nos vimos. Todavía quiero que estés cerca, olvida los papeles del divorcio. Te quiero ..."

Leer este mensaje solo me causa más molestias, estoy totalmente sofocada y empiezo a estresarme.

Mi abogado se reiría de mi en estos momentos, al parecer la señorita Susan Lee se retracta después de haber firmado los estúpidos papeles del divorcio.

_ ¡Imposible! -empiezo a reír-

Está mujer solo quiere volarme la cabeza.

Bobadas.

Por lo que a modo de molestia, empecé a redactar un pequeño párrafo sin sentido, en dónde le recordaba que fue ella la que me terminó y fue ella la que ya no me quería cerca. También mencionaba situaciones en donde decía que me amaba, pero que siempre me restregaba que solo era por mi dinero o por el simple hecho de que sabia satisfacerla en la cama.

Estaba escribiendo cosas tan estúpidas y sin sentido que recordé la promesa de alejarme de ella. Olvidar todo lo sucedido, en el momento que firmé los benditos papeles del divorcio.

Por lo que procedí a eliminar el mensaje.

Esa pelirroja de buen cuerpo ya no tiene espacio en mis sentimientos.

Es una pena que haya terminado así.

La amé tanto que me humillé sola por tantos años, por lo menos ahora tengo claro que nunca me valoro como su esposa y mucho menos como persona.

Y a pesar de todo eso, digo cansada.

No puedo ignorar lo mal que la pasó hace más de un mes. El estar internada después de su inesperado accidente, debió ser duro.

Indefinido [taeny]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora