Un viaje poco convencional.

Cap. 4

2018.

Vos sentís que estas enamorada de alguien cuando todo lo vez perfecto, cuando el pibe que te gusta no le encuentras defectos, lo vez como un ángel. Pero pasa el tiempo y todo cambia, esa persona cambia, y ese pibe del que estabas enamorada se aburre de vos y te cambia por una mina. Pero a veces no es así.

Aunque en mi caso, si me cambiaron por una mina.

Era mi último semestre de preparatoria y creí que todo estaría joya este último pero no fue así. 

Eduardo, quien era mi novio se comportaba de una manera muy extraña, casi no lo reconocía, era muy distante conmigo, muy cortante y nada que me aburrió y lo deje. Nos dimos un tiempo, al mes me pidió que regresara con el y yo como aún lo extrañaba y lo quería pues regrese con el.

Era Marzo, para ese entonces fue su  cumpleaños y yo le regale una remera color amarillo mostaza, la pasamos bien ese día, en la mañana fui a su casa a felicitarlo y a darle su regalo; como eso de las 9:00  de la mañana nos regresamos a nuestra primera clase en la prepa, pero yo note algo extraño, cuando nos dirigíamos a nuestro salón, unas minas pasaron justo a un lado de nosotros y una de ellas se le quedo mirando, si ustedes pudiesen  ver la cara que puso la mina al ver a Eduardo, también la querrían golpear. La verdad que no le vi caso discutir con el de eso, así que lo deje pasar.

Un mes después el me terminó y una semana después me entere que el ya tenia novia. ¿Adivinan quien es? La mina de la vez pasada. 

La verdad eso me afecto mucho, estaba muy triste, de verdad que no sabia como superar todo eso, tuve problemas conmigo misma, Eduardo me dejo con muchas inseguridades y en ese momento yo ya no quería saber nada.

Hasta que decidí tomar clases de ballet. Cuando fui a mi primer clase todas ahí se me quedaron viendo, pero paso el tiempo e hice muy buenas amistades, la verdad que me hacia falta ese cambio. Pasaban los meses y Eduardo y su nueva novia se paseaban por toda la escuela, me dolía verlos, pero sabia que estaba mejor sin el,  hasta que un día el me buscó.

No se porque lo hacia, ya no tenia caso, la graduación estaba a dos semanas, así que le puse fin a sus llamadas por las noches, sus mensajes de te extraño, le puse fin a todo, le dije que no me buscara que no era plato de segunda mesa y fue entonces cuando el me dejo en paz. 

En vacaciones tome cursos de natación, iba tres veces por semana a las 7:00 de la noche. Un miércoles que me toco ir a ballet, eran casi las 6:00,  me puse mis zapatillas y fui a la ventana que estaba en el salón, desde esa ventana se podía ver la pileta de natación. Comencé a observar como los niños nadaban y de pronto vi a un chavo, no logre ver su cara y mientras enfocaba mis ojos para poder verle, la maestra me distrajo así que no pude verlo. 

Al día siguiente me tocaba clase de natación, cuando entre vi a alguien que se estaba enjuagando en la regadera justo a un lado del sanitario, era un pibe alto, bronceado, y cuando se dio la vuelta quedé anonadada por el.

Termino de enjuagarse, tomo la toalla, se seco su cabello y en ese momento el me vio.