El Libro Debajo De Mi Cama

I

Hola, me llamo Sasha Marcell, tengo 16 años, vivo en Nueva York y mi vida parecía perfecta. Mis padres son importantes diplomáticos en no se que categoría. A mí me aficionaban esas costas de Instagram y YouTube. Mi madre quería que fuera reconocida. Literal, toda mi familia salía siempre en las noticias y los periódicos. Ya me había acostumbrado a ese estilo de vida. No tenía nada más que pedir. Vida llena de lujos, casa llena de lujos, todo a mi alrededor parecía perfecto. Hasta que...

-Sasha, ¡Levántate ya!
-¡Ya voy Mami!

Ese día parecía ser otro día normal, rodeado de la aburrida rutina diaria.

-Sasha, ¿Estas ahí?
-Mamá, me estoy bañando.
-¿Traes ahí tu uniforme?
-Si ma, aquí esta.
-Aver pásamelo.
-¿Pará qué? No le veo ninguna mancha, hoyo o arruga.
-Ya no lo necesitarás más.
-¿QUE?- Creo que ese grito se escucho a cuadras de distancia. - ¿Acaso ya no iré a la escuela?
-Claro que sí hija, todo normal, pero asistirá a otra escuela, cerca del diplomado de Nueva York.
-¿QUEE? ¿Porque me cambiarían la escuela? Estoy bien allí en el colegio. Además alli están todos mis amigos, y mi mejor amiga, y mía maestros, y mis...
-Bueno ya, no armes tanto alboroto cielo, solo es una escuela nueva, allí harás nuevos amigos.
-¡Pero en mi colegio soy popular! ¿Como conseguiré ese puesto ahí? Además, ¿Pará qu ene cambian?
-Hija comprendelo, ese colegio tuyo queda muy lejos, además ahí estudia tu hermano, en lo que consigues amigos nuevos te puedes pegar a él.
-!Claro que no! ¡El nunca me va a hacer caso! Mi hermano solo se irá con sus amigos raros, y me dejará sola! Además yo ya estoy acostumbrada a mi otro colegio. Solo dile a él chófer que me siga llevando, ¡Pero no me cambies! ¡Yo llevo ahí desde el preescolar! ¡Ahí están todos mis buenos amigos!
-Lo siento mucho cielo, pero la decisión ya esta tomada. Asistiras a esa escuela, además, ¡Tu solo te juntaba con Kimberly y Alexia! A los demás los tratabas como trapos.
-¡Pero mamá! ¿Que importa? Ellas son mis amigas. ¡No las dejaré!
-Lo siento mucho mi cielo, pero no podemos hacer nada. Yo se que debimos haber hablado contigo de esto desde antes, para que lo asimilaras. Yo se que la noticia te llegó de golpe, pero lo sentimos mucho. Son ordenes de la Corte.
-Mamá, ¡Ni siquiera me despedí de Kim y Ale!
-Te podrás despedir en la tarde. Ahora prepárate y baja a desayunar.

Y ese fue el comienzo de mi nueva vida. Tal vez traería problemas... Pero tal vez trae otra cosa.