Platónico ﾐ❀ Kookmin

015

—¿Puedo? —preguntó Taehyung señalando a la banca del piano.

—Puedes.

Ambos estaban sentados lado a lado, piernas estiradas hacía el frente. Su postura era incómoda y tensa, podías oír cualquier cosa, incluso el sonido una pequeña gotera que escurría del aire acondicionado.

Taehyung vestía el uniforme del colegio. Su cabello negro estaba rizado y podías notar la presencia de su múllete. Jimin pensó en Jungkook, jamás le había visto dejar crecer su múllete.

—Así que... ¿Eres un águila de nuevo? —preguntó Jimin. Su referencia se debía a que así llamaban a los alumnos de ese instituto, el águila era quien los representaba.

—Sí. Es mi último año ¿Sabías no? Mis padres pensaron que era buena idea que terminara donde había comenzado... Y la verdad es una forma de sentir que viviré esto de alguna manera con él. Como se supone que haríamos.

—La verdad es que no estaba seguro si cursarías último año o no. Ni siquiera sabías si habías seguido estudiando o te habías ido a por allí a no sé qué. ¿Y sabes por qué no lo sé? Porque te marchaste sin decirme nada al respecto Taehyung —Soltó Jimin de una vez. Había esperado mucho tiempo para reprocharle aquello, no esperaría más.

—Bien. Esto será de una vez... Bueno, al fin y al cabo vine a buscarte para hablar de ello. Jimin, no podía quedarme, sabes que no podía hacerlo.

—Y lo entiendo. No te reprochó el que te fueras. ¿Me dolió? Sí. Porque pensé que seriamos un apoyo para el otro en ese momento. Era Hobi por Dios, mi hermano, tu novio. Y tú y yo éramos amigos o al menos eso era lo que yo pensaba antes de que te fueras, porque luego me di cuenta de que no era así. Al menos para ti, ni siquiera fui tan importante como para que despidieras. Mi problema no es que te fueras, mi problema es que te hayas ido sin decirme.

—¿Acaso crees que a mí no me dolió ni un poco el alejarme de ti? Me dolió muchísimo Jimin, pero no me dolió más que estar aquí. Simplemente no podía, cada lugar que iba me recordaba a él, en cada lugar que estaba había estado con él, cada vez que entraba a una habitación todos me veían con lástima, personas que ni siquiera me hablaban antes o él se acercaban a mí y cada vez que lo hacían en mi mente se revivía el momento de esa madrugada en la que llegaste a mi casa a decirme que él estaba muerto. Además... —Taehyung se quedó callado, Jimin esperó que el otro chico continuara, pero no lo hizo.

—¿Además que? Te recuerdo que casi lo traicionas ¿No es así? —Jimin fijo la mirada en el suelo, sentía que iba a llorar a penas lo mirase, no quería eso. No quería verse débil frente a Taehyung.

—Sí.

—Podías haberme dicho eso y yo hubiese entendido, cualquier cosa hubiese sido mejor que nada, incluso esto.

—Era lo mejor para ambos. Lo mejor para ti.

Jimin rodó los ojos al escuchar aquello.

—¿Lo mejor para mí? ¿Por qué sería lo mejor para mí? Ilumina Taehyung, porque yo no le encuentro sentido.

—Porque sé que yo te gustaba Jimin y sé que el hecho de que tuvieras esos sentimientos te hacían sentir una culpa de mierda. Porque a mí me hacían sentirla. Y era más fácil romperte el corazón y que dejaras de sentir algo por mí a que sintieras esa culpa por siempre, porque sé que si me quedaba a tu lado en esas circunstancias, como tu apoyo y tú como el mío, sería inevitable que pasará algo entre nosotros y yo sé que si hubiera pasado la culpa nos consumiría incluso hasta ahora.

Jimin quedo congelado. Era cierto, durante mucho tiempo sintió que la muerte de su hermano era su Karma por haber tenido sentimientos por Taehyung. También era cierto que la manera en que el chico se marchó había roto un poco su corazón, haciendo que sus sentimientos románticos por él desapareciesen, dando paso a sentimientos un poco rencorosos. En ese momento todas las heridas que había creído sanadas volvieron a abrirse, dolía, sí que dolía. Jimin no supo que decir y su cuerpo solo pudo hacer una cosa. Llorar.