Una Uchiha en Kirigakure

🦋Capitulo 6🦋

- Sensei, a esa niña hay que hacerle exámenes completos, hay que revisar todo- algunas lágrimas se querían escapar y lograron caer- Lo siento mucho- se disculpó cuando no pudo soportar más el llanto

A pesar de que era una kunoichi, también era madre y el solo hecho de imaginar si a su hijo le pasará algo así, la destruía. Sentía que su corazón estaba apretado y a penas podía respirar.

- No es una amenaza, pero... creo que necesita mucha más vigilancia del lado médico, es sorprendentemente increíble que después de tantos años de abuso y tortuoso maltratos siga con vida- dijo secándose las lágrimas

- Ino, calma- pidió al ver qué se estaba alterando- Si no es una amenaza, dejemos que se relaje un poco y mañana ya le haremos todos los exámenes que hagan falta-

Ino no estaba nada conforme con esa respuesta, así que le susurró todo lo que vio. Había mucha gente y lo que menos quería era que la voz se corriera.

- Tsunade-sama, es importante actuar ahora, por lo que pude ver, fueron muy pocas veces las que vio un médico, por no decir que solo fueron dos veces en toda su vida- insistió

- Bien, el problema es que no podemos decirle nada al Uchiha o terminará matando a Sakura antes de los resultados, maldita sea- se mordía las uñas con preocupación

La mujer de ojos pardos entró al cuarto, había mandado a Ino a preparar las salas que necesitarían. Mientras tanto, ella se encargaría de la joven y sus padres.

- Youko-chan, por favor, necesito que vuelvas a colocarte el pijama- pidió amablemente, lo cual fue raro para la pelirrosa- Ino vio que hace poco recibiste una gran paliza, por lo que queremos asegurarnos que no tengas nada- explicó seriamente

La joven obedeció y luego la siguió. Su padre quería acompañarla pero él no podía enterarse de lo que pasaba o tendrían graves problemas. Sin oponerse, la joven las obedecía y seguía sus órdenes al pie de lo que decían.

Pasaron el resto de la madrugada haciendo exámenes de todo tipo, debían descartar todo.

Lo que les partió el alma fue ver las radiografías de Youko. Sus huesos tenían callos por todas partes, eso significaba que se habían roto muchas veces. Además, habían algunos huesos fisurados sin sanar completamente. 

Su cuerpo estaba repleto de cicatrices, podían ver todo lo que esa jovencita tuvo que vivir con solo mirar los análisis que hicieron. Solo tenía 15 años y sus huesos y músculos estaban tan marcados como si fuera un ninja experimentado de 37 años. Tsunade tuvo que utilizar mucho chakra para poder dejarla como nueva, sin astillas ni fisuras.

Cerca de las 9 AM terminaron con todo. Estaban viendo el último examen y luego le permitirían salir de allí junto a sus padres.

- Ino ¿Cómo salieron esos exámenes?- preguntó la mayor mientras terminaba de chequear unos exámenes distintos

- Afortunadamente, todo ha dado negativo- dijo con más calma

- Eso es muy bueno- suspiró aliviada junto a su alumna- Ya podemos relajarnos un poco... Recuerda que por más que Sasuke y Sakura sean los padres debemos mantener el secreto, sería una completa catástrofe que se supiera lo que pasó-

- Si, sensei, no diré nada- respondió con cansancio

-Vamos que la daremos de alta-

Ambas mujeres rubias regresaron al cuarto y les dieron las buenas noticias a los Uchiha. Youko podría irse a casa con su padre.

- Youko-chan, fue un gusto cuidar de ti, ya puedes irte con tus padres a casa- dijo Ino con una gran sonrisa

Sakura los llevó a su casa de mala gana, sabiendo que le tocaría el turno de noche. La aldea estaba muy alborotada, todos corrían comprando y vendiendo. Sasuke le había permitido a su hija esconderse dentro de su capa por el radiante sol que habían esa mañana y la llevaba por los hombros para no perderla entre la multitud. Luego se caminar unos minutos, llegaron a una casa de dos pisos, bastante espaciosa, con muchas ventanas y un gran jardín descuidado.

- Ya estoy en casa- anunció Sakura al entrar y quitarse los zapatos

- Buenos días- Saludó Sarada- Te estaba esperando para desayunar y después iba a ir a entrenar un poco- se estaba terminando de cepillar el cabello cuando notó a Sasuke- ¡Papá! ¿Te quedas a desayunar?- se dio la vuelta entusiasmada y vio que debajo de la capa del hombre salía una joven- ¿Quien es ella?-

- Creo que lo mejor es ir a desayunar y te contamos todo- respondió su madre seriamente y ella asintió

Sasuke vio que Youko estaba insegura y ansiosa, pero no era por entrar, sino por salir de ahí. Intentando calmarla la abrazó por los hombros y la guió.

- No se queden ahí- los regañó la azabache de cabello corto

Entraron y se sentaron a la mesa, esperando que Sakura terminase de preparar un rápido desayuno. La menor de las hermanas estaba celosa por las muestras de cariño y atenciones que su padre mostraba, las cuales no parecían causar nada en ella.

Sakura sirvió el desayuno para todos, a Youko le dio un vaso de jugo de naranja, avena con yogurt de vainilla y algunas frutas rosas.

Esperaron a que ella tomara asiento para poder soltar la bomba.

- Hija... Yuki se quedará a vivir con nosotros- dijo suavemente la mujer- ¿Recuerdas que hace unos meses nos preguntaste quién era Youko?- la de lentes asintió- Yuki es Youko, tu hermana mayor-

- ¿Mí hermana?- una sonrisa comenzó a aparecer en su rostro- ¿Y por qué no la buscaron antes? ¿Donde estaba?-

- Ella estuvo en la aldea de la niebla desde bebé, creímos que estaba muerta- respondió su padre, aún sintiendo furia contra Sakura

- ¡Si! ¡Tengo hermana!- Exclamó alegre, saltando de su silla dispuesta a abrazarla pero la mayor al ver que se acercaba demasiado rápido creó un muro delgado y transparente con pequeños picos para mantenerla alejada- ¿Eh?- estaba confundida al repentino rechazo

- Sarada, probablemente debas tener cuidado con ella- Advirtió su padre- No le gusta que la toquen mucho y tampoco entiende bien las muestras de afecto o las emociones... Hay muchas cosas a las que debe acostumbrarse aquí-

- Pero... Yo quería abrazarla- se quejó malhumorada- ¿Al menos habla?-

- Si, pero debes esperar a que ella decida hablarte- respondió serio el hombre y Sarada finalmente se alejó de Youko.