ᵉᵈᵘᶜᵃᶜⁱᵒⁿ ˢᵉˣᵘᵃˡ ᶜᵒⁿ ᴮᵃᵏᵘᵍᵒᵘ |Kiribaku/Bakushima|

#3

Kirishima había perdido la cuenta de cuantas pajas se había clavado durante una semana. Su pene pedía piedad a esta altura, pero no podía parar, era tan placentero al tocarse y venirse.

Una y otra vez miraba distintos videos porno, su computadora también estaba harta de estar en la pestaña incógnito yendo al mismo lugar porno.

Kirishima también comenzó a como pajearse de una manera placentera, como por ejemplo jugar con sus bolas y apretar ligeramente la punta de su miembro para luego acabar en su mano.

—Aah...fresco como una lechuga— Dijo feliz para luego acostarse.

La alarma empezó a sonar anunciando la hora de levantarse y ir a las clases pendientes de ese día. Kirishima se había despertado antes por sus altas ganas de clavarse una paja.

Se levantó de la cama, se lavó los dientes, se puso su uniforme y tomó su mochila para luego ir al comedor a desayunar algo.

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—Buenos días Kiri— Saludó Mina a su amigo con un besó en la mejilla.

—¡Buenos días Mina!.

—Parece qué estás de buen humor hoy Kiri!.

—Si y mucho, buenos días Bakugou ¿Cómo estás?— Preguntó el pelirrojo acercándose al rubio que tenía apoyada su cabeza en sus brazos, Bakugou levantó la mirada despacio y cuando vio al pelirrojo sonriente lo agarró del cuello de la camisa del uniforme para acercarlo a él.

—Pequeña mierda, ayer no estabas nada discreto con tu paja de la madrugada. Me debes una maldita siesta.

—S-si Bakugou, lo siento mucho— Dijo nervioso por el aura matadora del rubio, éste lo soltó y volvió a su lugar.

—Después de almorzar, vamos a ir al patio..quiero dormir.

—Si si.

Después de esa mini conversación, Kirishima se fue a su asiento y a los minutos Aizawa-sensei llegó y dio por comenzadas las clases.

Luego de acabar las clases, llegó la hora del almuerzo, el Bakusquad se fueron a su mesa para empezar a comer y hablar sobre el presunto examen escrito qué tomaría Aizawa la próxima semana.

—Mierda, no entiendo nada...debería pedirle ayuda a Momo otra vez— Dijo cabizbajo Denki tomando un sorbo de su juguito de manzana.

—Si, yo también, ¿Y tú Kirishima?— Preguntó Sero al pelirrojo qué comía lo más rápido posible teniendo miedo de su amigo rubio qué lo miraba como si quisiera matarlo.

—Bakugou me ayudará, voy a ir a su habitación después de clases para qué me expliqué algunas cosas. Terminé, me tengo que ir chicos, nos vemos luego.

—Adios Kirishima— Dijieron todos.

Kirishima se levantó seguido por Bakugou y fueron al patio donde había bancas para almorzar, árboles con sombras y una fuente de agua.

Se sentaron abajo de uno de los árboles de cerezo, justo bajó la fresca sombra de ésta.

—Avísame cuando nos tengamos que ir— Dijo el rubio sacándose el sacó del uniforme para luego doblarlo para tenerlo como almohada.