Cadáver Andante

Correr

Que lo disfruten...

Tsunade y Jiraiya levantaron la vista sorprendidos cuando Sasuke irrumpió por las puertas de su oficina. En realidad, había usado las puertas esta vez ya que el agujero que había hecho varios días antes ahora estaba tapiado. Tsunade estaba sentada detrás de su escritorio haciendo caso omiso de las pilas de papeles esparcidos sobre ella y Jiraiya estaba recostada cómodamente en la silla frente al escritorio.
"¿El está bien?" Sasuke le preguntó al Sannin.

Tsunade parpadeó antes de responder. "Está bien, Sasuke, pero-"

"¿Puedo verlo?"

"Sasuke", dijo Tsunade, mordiéndose el labio inferior. "Él no está aquí."

"¿Dónde está él? ¿En el hospital?" Preguntó Sasuke.

"No, Sasuke, se fue. No está en Konoha".

No podían ver su rostro debajo de su máscara Anbu, pero su cuerpo rígido de repente les dijo que las noticias no estaban siendo bien recibidas.

"¿Cuando el se fue?" preguntó en voz baja.

"Hace un par de horas", le informó Tsunade.

Sasuke se giró, preparándose para seguirlo.

"Sasuke, él estaba con Gama Bunta", le dijo Jiraiya. "Nunca los atraparás".

Sasuke se volvió hacia ellos y Tsunade se dio cuenta distraídamente de que, aunque la expresión de la máscara de madera nunca cambiaba, era sorprendente cómo, cuando el usuario estaba enojado, la cara de zorro parecía de alguna manera más amenazante.

"¿Por qué lo dejaste ir?"

"Yo tampoco quería que se fuera", dijo. "Pero no puedo obligarlo a quedarse, especialmente ahora que sabemos que Orochimaru no puede poseerlo. Quería irse".

Sasuke podía sentir su pecho apretarse cuando la partida de Naruto realmente se hundió. Se había ido otra vez. Él se había ido.

La soledad consumidora que Sasuke había vivido con toda su vida, la soledad que lentamente había comenzado a disminuir con la repentina presencia de Naruto, de repente lo golpeó con una fuerza que casi lo dejó sin aliento.

Hubo un 'pop' y Sasuke miró el escritorio de Tsunade para ver una gran rana naranja sentada cómodamente en su papeleo.

"Pop dijo que te dijera que el niño está bien", le dijo a Jiraiya.

"¿Donde esta el?" Preguntó Sasuke, moviéndose rápidamente hacia el escritorio.

"Se me ha prohibido decir", dijo la rana, con la boca curvada en la versión de una sonrisa de un anfibio.

Sasuke se quitó bruscamente la máscara y le lanzó una mirada penetrante. La rana no parecía afectada.

"Te hablaré más tarde, pervertido", dijo con un gesto.

"Has pasado demasiado tiempo con ese mocoso, Gamakichi", murmuró Jiraiya, recordando con cariño un momento en que todas las ranas (excepto Gama Bunta) solían tratarlo con respeto.

"¡Espere!" Exclamó Sasuke mientras la rana se preparaba para irse. Se arrodilló frente al escritorio de Tsunade para estar cara a cara con Gamakichi.

Los Sannin lo miraron fijamente, pero él los ignoró.

"¿Al menos puedes llevarle un mensaje?" Preguntó Sasuke.

Gamakichi lo estudió por un momento antes de asentir con su consentimiento.

"Dile que pensé que Uzumaki Naruto nunca se escapó. Es solo un cobarde que habla en grande, pero no lo cumple".