DIECIOCHO

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Jungkook
°

Estabamos sentados en la mesa del restaurante, cara a cara, Sana parecía sumergida en su celular, pues no ponía atención a nuestra gran pelea de miradas, yo estaba muy furioso si quiera para pensar, sólo daba grandes y ruidosos sorbos a mi bebida.

—Voy a atender una llamada, ahorita regreso. —avisó Sana antes de dirigirse hacia la salida.

Permanecimos unos segundos en silencio y hasta que ella finalmente estuvo afuera, puse mi refresco a un lado y aclaré mi garganta.

—¿Entonces dices que tienes ondas con Taemin? —pregunté reafirmando lo obvio, él asintió con la cabeza—. Bloquealo.

—¿Qué? —preguntó confundido.

—Te estoy pidiendo que lo bloquees, no tiene sentido que sigas hablando con él, sólo pídele que ya no te busque y lo bloqueas.

—No haré eso, es ridículo, —espetó—, él me ha ayudado, no lo voy a bloquear como si nada. Además olvidé decirte algo...

—¿Decirme algo? ¿Aún hay más por saber, Jimin?

Eché mi cabello hacia atrás frustrado, no íbamos a llegar a ningún lado así, di otro trago a mi refresco y permanecí en silencio permitiéndole hablar

—Él me pidió que saliéramos a distancia —dijo bajando el tono de su voz—, mi madre cada día está peor y yo... no quiero que se preocupe más por mí, ella espera que consiga una relación formal antes de que venga lo peor, por eso he decidido salir con Taemin.

Eso se había sentido como un fuerte golpe de agua fría, mordí mi labio inferior en un intento de calmar mi frustración y mis pies comenzaron a moverse nerviosos. Nada tenía sentido para ambos.

—¿Si te ha ayudado tanto por qué le mientes prometiendole la mejor relación? —pregunté con la voz quebrada, permanecimos en silencio unos segundos, no encontraba palabras para expresar mi molestia.

—Es lo mismo que estás haciendo con Sana, ¿no crees?

No tuve respuesta, al final se puso de pie dejando su rebanada de pizza a medias y salió del restaurante. Desde la ventana lo miré despedirse de Sana, en efecto, nada estaba bien.

Estuve reflexionando de mis acciones y en que estábamos perjudicando a gente inocente, pero mientras nada saliera a la luz no tenían por qué haber corazones heridos, era nuestro secreto que cada vez se hacía más grande.

En la tarde volvimos a encontrarnos, justo en nuestra vieja hora de reunión, ya podíamos ser un poco más abiertos aunque aún disimulando ser sólo amigos, fui a su casa y cuidamos a su madre un rato, la mujer realmente cada vez iba empeorando.

Del asunto con Taemin no se habló más, yo no quise seguir con ello y desafortunadamente el que calla otorga, no había mucho que pudiera exigir a pesar de que nuestras acciones estaban mal, solamente me tragué mi enojo y mis celos como él lo hizo alguna vez. Viví en su misma piel con la innovación.

"Namjoon"

•Hola, hace un tiempo no te escribía.•
17:05 hrs.

•Es que adivina con quién me encontré.•
17:06 hrs.

•Hola.•
17:14 hrs.

•¿A quién encontraste o qué?•
17:16 hrs.

°Foto°

•Creo que sigue flechado conmigo, jajajaja, es muy tonto, ¿no?•
17:18 hrs.

•En la noche hablamos y me cuentas cómo les fue.•
15:22 hrs.

Si las cosas antes iban mal ahora estaban peor, observé la foto, estaba con Seokjin en alguna calle de la ciudad. La historia entre ellos no era demasiado agradable, al parecer Seokjin no conocía totalmente las oscuras intenciones de Namjoon ni de su repentino desagrado y odio, pues claro, entre todos los mentirosos Namjoon era el más experto.

—¿Conseguiste nuevo trabajo? —le pregunté luego de un rato en el que nos sentamos en el sofá a ver un programa, faltaba poco para que me fuera y quería acabar con la tensión ya.

—Sí, seré lavaplatos en un buen restaurante y si me va bien tal vez pueda convertirme en mesero —contestó, una pequeña sonrisa asomó en su rostro, pero poco a poco comenzó a desaparecer—. El gerente es un primo de Namjoon... espero que no sea tan malo como él...

—Espero lo mismo. Verás, no estaba seguro sobre si contarte de esto, pero hoy Namjoon y Seokjin se encontraron.

—¿Es una broma? —la frustración se vio demasiado clara en el rostro de Jimin—. Tiene que haber un modo de advertirle a Jin o algo...

—Jimin, Jin no quiere vernos y mientras así sea sólo queda mantenernos alejados, ni siquiera para decirle a tu amigo Taehyung porque ese tonto también admira a Namjoon... Me pregunto qué hicimos mal en nuestra vida pasada como para sufrir todo esto.

—Oye, pero creo que puedo volver a acercarme a Seokjin, puedo conseguir su perdón si le digo que terminé contigo y estoy saliendo con Taemin.

La idea sonaba muy buena, pero a veces las mentiras crecen tanto al punto de volverse realidades y eso podía pasar, él podría irse para siempre.

—Sólo esperemos... —miré el reloj y me puse de pie—. Tengo que regresar a casa, mañana llevaré a Quesito a nuestro lugar.

—Hasta mañana.

Nos dimos un casto beso en los labios y al abandonar su casa regresé a mi cruel realidad, a ese mundo solitario sin él, el mundo era demasiado grande para ambos. Me sentí intimidado por nuestro futuro, por Sana y mis amigos.

—Llegas tarde, Jungkook.

—Sí, madre, nos tardamos con el proyecto —expliqué, caminé directo a mi habitación.

—Los padres de Sana vinieron y hablamos sobre el futuro de ambos.

Me detuve y giré a verla. Ni siquiera sabía que ellos estaban en contacto.

—Pensamos que sería buena idea que se casen a finales del año.

—¿Qué?

Ahora todo iba a peor.

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UNA HORA [KM] "PAUSADA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora