La Melancolía Del Chacal

Ojos de Tigre

Si todo esto se tratara de cuanto dinero tienes y cuanto puedes gastar, yo estaría más que derrotado, no tengo grandes lujos, o un auto y vivo en un sencillo departamento que comparto con mi hermano, de hecho él y su empresa de comida hacen mas dinero que yo en sus mejores temporadas. Sin embargo Hinata Shouyou, el cuervo ninja de mi equipo, resulta que tiene un felino bastante peculiar a su acecho...

Hasta que alcancé el sueño me vine preguntando por que el amigo de Shouyou-kun accedería a que yo ingrese en su casa, eso además de ver toda una extensa colección de fotos de sus gatos, enviada por el cuervo. Así que esta vez me tocará ser un intruso en la cita del pequeño ninja con el amigo que exige su presencia... kenma Kozume, su nombre me suena conocido, quizás pertenencía a algún equipo en el pasado y no puedo recordarlo bien.

Al día siguiente me encuentro frente a una elegante casa de estilo tradicional en medio de un jardín bien cuidado, en la entrada se encuentran recostados un par de gatos que reconozco de las fotos, uno negro con el estomago blanco y el otro mas pequeño de pelaje anaranjado, ambos al sentir la presencia del cuervo parecen reconocerlo y se acercan a él, el negro se estruja de costado contra su pierna y el anaranjado intenta trepar con las garras por su ropa.

-¡Hola chicos!- Exclama Shouyo-kun despegando de su chaqueta al gato naranja y sosteniéndolo a la altura de su rostro -¡Travieso! ¡Los extrañe mucho! ¿Me extrañaron?

La imagen de Shouyou-kun con el pequeño gato que tiene un color de cabello similar al suyo entre sus manos mientras este le lame su pequeña nariz haciendo reír al cuervo hace que mi corazón se agite, la definición de ternura esta frente a mis ojos.

-Se ven tan felices de verte- Le digo sonriente, me hace feliz ver al cuervo tan animado.

-No me dejan tener mascotas en mi departamento, por eso me encanta visitar a Kenma y jugar con sus gatos ¡Ven aquí negro!- dice mientras se inclina para acariciar al gato negro que ya estaba recostado sobre su pié.

A Shouyou-kun le faltan manos para acariciar a los gatos en cuanto aparece un tercero, uno blanco con manchas rubias y castañas, es de mayor tamaño que los anteriores y con apariencia de mas edad, es gracioso como con una mano acaricia al negro y al multicolor y con la otra mano juega con el gato naranja que lo tiene atrapado con las cuatro patas. Los gatos de pronto voltean la mirada atentos hacia la puerta principal de la casa, sospecho que su amo debe estar acercándose.

En cuanto se abre la puerta siento siento una brisa fresca salir del interior del hogar y un olor suave a lavanda se aproxima a mi olfato, nos recibe en el umbral quien tras verlo reconozco como el ex armador de Nekoma, con cabellos largos hasta por los hombros que va de color negro hasta un rubio en las puntas, recogidos en una media cola y vestido totalmente de negro, con una mirada felina fija en mi como si Shouyou-kun hubiera traído un perro justo a la guarida secreta de un gato.

-¡Kenma!- Saluda el ninja volviendo a erguirse, los gatos negro y multicolor pasan directo hacia el interior de la casa y el anaranjado se queda a los pies de su joven amo.

-Ha pasado tiempo, Shouyou- Le dice con un rostro serio y una sonrisa apenas visible, pero en seguida su rostro cambia a sorpresa al tener al pequeño cuervo abrazándolo en un segundo.

-¡Él es de quien te hablé! ¡Miya-san! Jugaremos en el mismo equipo de ahora en adelante, él es... mi armador- El pequeño cuervo se despega de su amigo y me introduce con entusiasmo aunque vacila en esas últimas palabras -Y él es Kenma, es uno de mis mejores amigos ¡Es mi sponsor oficial y exclusivo!