10 things I hate about you

capitulo 12- Bonito trasero, Bunny

NOTA: Como pueden ver, la novela es totalmente narrada por la protagonista, pero eso no significa que la versión de Justin se quede fuera. Cada cierto capítulo tiene una versión narrada por Justin, como este. Serán capítulos extras donde se verá una situación que ya haya pasado pero desde el punto de vista de Justin.

Capítulo especial.

Oh, hombre. Pero que dolor de cabeza; dije esa mantra mientras me sentí mareado abriendo los ojos. Mala idea, la luz de la maldita ventana pegaba justo en mis ojos. Maldición, ayer fue algo... Explosivo.

Me pare con pereza y busque unos bóxers limpio, ni crean que duermo desnudo, eso solo pasa cuando tengo sexo borracho y me olvido de bañarme. Al menos no quedo el olor del perfume barato de la rubia impregnado.

Mire hacia el sofá donde estaba una rubia que conocí ayer en la fiesta por comienzo de clase. Ya se, ¿a quién mierda se le ocurre hacer una fiesta por regresar a la cárcel? Bueno, cuando estudias en un colegio de puros niños ricos las cosas son así; se busca cualquier excusa para hacer una fiesta.

Y vaya que fiesta la de ayer. Era totalmente explosiva y salvaje. Creo que fue incluso mejor que la fiesta por el día después de la excursión.

Ahora, quería sacar a la chica de mi departamento para poder irme a casa y así poder ir al maldito instituto y hacer que mis padres no le dejen todo el dinero a la princesa Jazzy.

¿Cómo era qué se llamaba? Mierda. Odiaba cuando eso pasaba, no es como sí me importara su nombre o algo, pero siempre quería evitar las demostraciones de indignación de esas chicas.

Uhm, creo que se llamaba Ally, Annie, Andy...

-¿Anna? -pregunte dudoso. Ella estaba despierta y acostada en el sofá mirándome intensamente.

-¿Quieres tener una mañana divertida? -preguntó tentativamente. Uff, al menos había acertado con el nombre.

-Lo que quiero es que te vayas -le dije serio. Iba al grano. No quería llevar tarde.

-¿disculpa? -preguntó pestañeando con sorpresa.

-Escucha Andy...

-Anna -me interrumpió mirándome ofendida.

-Si eso, Anna, tengo que irme. Así qué espero qué cuando vuelva de darme una ducha ya te hayas ido -aclare el punto. Ella alzo sus finas cejas pero se quedo callada.

Creo que entendió el punto.

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La chica seguía ahí cuando salí. La mire irritado, tampoco estaba tan buena para estar insistiendo. Tenía el cabello demasiado rubio, casi blanco y hombre, lo mío eran las morenas.

-Me voy a ir, tranquilo -sonrió divertida y se acercó de manera seductora- solo quería dejarte esto antes de irme -agarró mi mano y coloco un pedazo de papel ante de guiñarme un ojo. Luego salió del departamento.

Suspire y coloque el papel en la basura. Fuera lo que fuera no me interesaba.

A los 7 minutos luego fui en busca de mi moto para ir al estúpido instituto.

Como en 13 minutos ya estaba entrando en el estacionamiento. Iba a dirigirme a mi habitual puesto, lo había usado los últimos años de secundaria y preparatoria y todo el mundo sabía que sí no quería tener la mandíbula rota, no debía estacionarse ahí.

Pero un idiota que supuse era nuevo no sabía de las reglas. Iba en un lindo SUV negro e iba a agarrarse mi puesto. Sobre mi cadáver amigo.

Me metí con la intención de que se detuviera y así lo hizo, pero por lo que pude ver, de mala manera.