¡Tú!

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Fue entrar en casa y encontrármelo allí parado. Eidan. Se veía igual que hace 1 año, no había cambiado nada. Nada más entre vi que también estaba mi madre, y le maldije por haberle abierto.

-¿Qué quieres? ¿Se puede saber que haces aquí? No ha sido bastante evidente con las denuncias y mi ausencia que no quiero saber nada de ti. Y tu mamá ya te vale- dije mirándola-

-Cariño, creo que necesitábais hablarlo, no podía negarlo más que te viera. Bueno yo os dejo a solas.

-Vaya que bien me recibes Lori. Sabes te veo más guapa, y ese jersey tuyo de Prada mojado te hace tan sexy-lo fulminé con la mirada-

-Ve al grano Eidan. Qué quieres de mi.

-No quiero nada de ti, solo que me perdones! Te pedí perdón un millón de veces en un millón de llamadas! Y ya ha pasado 1 año Lori, súperalo. Solo quiero que seamos amigos. Te echo de menos.

- Me hiciste lo que me hiciste ¿y tienes el descaro de venir y pedirme que seamos amigos? No tienes vergüenza alguna. Te recuerdo que me engañaste con otra el día antes de nuestra boda, me entregué a ti al completo-dije sollozando- y encima con la hermana de mi mejor amiga y..

-Me interrumpió- Estaba un poco borracho, y en un bar, estaba ella, me acuerdo del beso pero lo demás fue todo borroso, solo sé que pasó y..

-Lo interrumpí-Me da igual!- dije gritando y llorando- me engañaste y encima mi mejor amiga era tu amiga y ella su hermana. No no no, yo te amaba, lo eras todo para mi y ahora no eres NADA.

- Se acercó a mi, me agarró de la cintura y me acercó a el, mientras me acariciaba la mejilla- Sé que no tengo perdón , pero sabes que yo no me controlaba a veces y encima si empiezo no puedo parar, era un mujeriego hasta que te conocí y te hize eso pero te quería de verdad, te amaba, almenos déjame hacerte ver que he cambiado, ha pasado 1 año y las personas pueden cambiar.

- Lo aparté de mi- ¡No!No...necesito...necesito que te vayas! Ya!-le dije corriendo hacia mi cuarto, llorando descontroladamente-

Cuando pasaron 5 minutos vino mi madre para decirme que se había ido. Cogió y me abrazo.

-Oí los gritos desde mi cuarto hija.

-Ya mamá. Pero necesitaba soltarle lo que en 1 año estuve guardando.

-Te entiendo cariño, por eso creí que ya no podías aplazar esa charla más, antes lo entendí porque se te junto con lo de tu padre, pero ahora ya pasó tiempo.

-Lo sé mamá. Bueno me voy a cambiar y volver a la Universidad mamá que volví para cambiarme. Nos vemos esta noche, que por la tarde he quedado con Clara.

- Vale hija bien.

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Salí de la Universidad de una mañana muuuuy larga, tuve todas las materias más pesadas y encima había una persona que estaba en mi cabeza y no me dejaba concentrarme en las clases. Él.Odiaba sentirme así ya que, me provocó algo en mi a parte de furia, y eso no lo quería. Ni con el ni con nadie, todos eran iguales. Pero sobre todo con el.

Llegué a casa de Clara dispuesta a llevarla al sitio de cafés y dulces que a mi y ella nos encantaba. Cuando entramos en el coche, nos fundimos en un abrazo y me preguntó la pregunta que tanto me temía que se me notará.

-¿Te pasa algo verdad?- me dijo-Te lo noto en la cara.

- Es muy largo de contar Clar.

-Tenemos toda la tarde bonita.

Llegamos pedimos en la cafetería y le comencé a explicar todo. Conocía perfectamente todas sus caras, y la que tenia ahora era de completa furia. Ella estuvo allí cuando pasó eso, para apoyarme en todo y semanas más tarde también estuvo para lo de mi padre. A ella le molesto mucho lo que me hizo, y no solo le odió por ello, sino encima por ser con su hermana y por ser ellos amigos.

Sin ti, ya no.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora