Rincón de Angeles

Capítulo 5: "explicaciones"

Mientras los chicos estaban charlando en el cuarto, las chicas en el suyo conocían a sus nuevas compañeras.

- y yo soy Valeria - llegó a escuchar Malena mientras entraba por la puerta del baño.

- ¡Male! - dijo Pia mientras se corría para que su amiga pueda ver quien se estaba presentando - ellas son las chicas que van a dormir con nosotras.

- si, nosotras somos Melody - señalando a una rubia alta - Caridad - a una más bajita y morocha - Luna - a una morocha, más flaca que Malena - Kika - señalando a una chica con rulos y anteojos - y yo soy Valeria.

- un gusto chicas, mi nombre es Malena - digo mientras camino hasta ellas y las saludo.

- ¿sos la que te caiste a la pileta no gor? - dijo Melody.

- si, es ella, parecía un pato con olor a cloro, pero ahora ya se baño - dijo Estrella provocando la risa de todas.

- callate Estrella. No es gracioso

- bueeeno es un chiste - Estrella fue y la abrazó por la espalda chicas nosotras nos vamos a comer porque estamos muertas de hambre.

- si, me esperan porfavor así me cambio. No voy a salir en bata.

- tenes razón demasiado con que te hayan visto mojada - se burló Pia.

- shhh se callan - Malena se habia puesto de mal humor. - me cambio en cinco y vamos ¿nos acompañan? - dijo mientras miró a las demás que estaban en el cuarto

- gracias gata, pero nosotras ya comimos y ahora tenemos clase ¿ustedes?

- nosotras arrancamos mañana. Bueno ya estoy lista ¿vamos? - las tres amigas salieron dejando a las demás en el cuarto.

- que raras estas gauchas ¿no? - Caridad las miró extrañada.

- lo raro es que hacen acá - completó Kika.

A kilómetros del mandalay
J.C estaba esperando a que llegara Julián. El único hijo que él reconocía, el único que pudo criar y además utilizarlo para su plan.
- llegas diez minutos tarde

- perdón papá, estaba controlando que la guardia esté bien ¿por qué dijiste que nos retiráramos? - el tenía 17 y era el mejor guardia de su generación así que J.C lo nombró capitán. El controlaba los movimientos de los demás y tenía acceso directo con su papá.

- era necesario. No sabemos si no hay alguien que pueda desarrollar habilidades cuando entremos, por eso es peligroso. Necesito que entres y te infiltres con los nuevos, que te hagas amigo de ellos y que te cuenten todo, así podremos saber que pasa en esa casa.

- ¿qué?

- lo que te digo. Vas  a ir a inscribirte, sabés que no puedo ir, podría ser peligroso. Entras y averiguas. Es una orden.

- está bien - no tenía más remedio, no se podía negar.

- otra cosa, puede ser que te descubran, o sepan tu nombre, así que lo vamos a cambiar... - fue hasta el fondo de la casa, donde había una computadora, tecleo unas pocas veces, se dio vuelta y le dijo - ahora tu nombre va a ser Simón Arrechavaleta. Vas a ser un chico que viene de Londres, donde mataron a tus padres, ahora vivís con tus tíos, que te anotaron en el Mandalay ¿entendido?

- de acuerdo - se miró a un espejo un poco sucio y viejo y se dijo - Simón Arrechavaleta al Mandalay.

Mandalay:
Las chicas bajaron a desayunar a la cocina. Eran las diez de la mañana y la mayoría de chicos estaban en clases así que no había gente. Solo una señora con una peluca color celeste y un vestido con flores del mismo color.

- ¿necesitan algo borregas? - su voz les hizo mucha gracia, además de como pronunciaba la erre - ¿no tendrían que estar en clase ustedes?

- somos nuevas, eso pasa. Entonces mañana empezamos las clases - contestó Estrella. - ¿usted también trabajó en un circo?

- En realidad, Tina siempre usa pelucas divertida ¿no es cierto? - contestó Camilo mientras caminaba hacia ellas.

- si rrector - contestó - estas borregas ¿que hacen acá? Me resultan muy conocidas - le susurró mientras ellas comían un pedazo de torta.

- ya se van a enterar, ahora no les digas nada y seguí con tus actividades -.- Chicas, acá tienen sus horario, empiezan mañana a las siete de la mañana asi que ¡suerte!

- gracias - contestaron las tres.

Las chicas terminaron de comer el desayuno y se fueron a recorrer el Mandalay y se encontraron con el salón de baile...

- ¡que lindo! - exclamó Estrella - acá podríamos hacer coreos y canciones ¿y si cantan una?

- podríamos ¿no? Puedo ser...

- dale - le contestó Pia

Las chicas terminan su canción y se escuchan aplausos, no de Estrella, ella estaba gritando emocionada...

- muy lindo... como ustedes - exclamó el desconocido.