Receta para el desastre - Geraskier/ shortfic.

Prólogo

Viernes 27 de Enero, 10 am

Dos semanas después de la firma del divorcio, la nuevamente Yennefer de Vengerberg acomodaba las maletas rosas con brillantina en la puerta de su casa. Su pequeña hija de 11 años balanceaba sus piernas impaciente a la espera de su padre, pasarían juntos las vacaciones, como ambos habían arreglado ante el juez.

Abanicándose un poco a causa del calor tomó asiento en el porshe de la casa al lado de la pequeña en la espera del auto de su ex-esposo.

Las visitas serían flexibles, bastante equilibradas hacia Geralt por el poco tiempo que le quedaba a Yennefer gracias a su trabajo. Aún así habían conseguido llegar a un acuerdo para que Ciri los vea a ambos por igual, y que no le afectara de ninguna manera.

Claro que no esperó que Geralt lo trajera tan pronto.

La pelinegra sabía, sin embargo, la existencia de él. De Rivia le había adelantado que salía con alguien la última vez que se presentaron en el juzgado.

No esperó verlo tan pronto, ni descubrir cómo era él realmente.

El Lexus plateado se estacionó al frente, y la rubiecita saltó emocionada hacia los brazos de su padre. Luego se quedó quieta al observar que bajó una segunda persona.

Era castaño, ojos increíblemente claros y sonrisa deslumbrante. Juraba que tenía las pestañas más largas que ella misma usando rímel. Aquel extraño le sonrió con calidez y su niña de sol le devolvió la sonrisa.

-Yenn, Ciri- se dignó a hablar el idota de su ex marido- él es mi novio, Jaskier.

La pequeña abrió los ojos con sorpresa y se alejó del castaño unos pasos, lo que le hizo borrar la sonrisa y regresar al auto son decir nada.
Yennefer fulminó con la mirada al peliplata.

-Ciri, amor ¿Me traes mi abrigo? Hace frío y lo olvidé dentro- La niña asintió y salió corriendo, una vez estuvieron frente a frente el antiguo matrimonio De Rivia comenzaron los gritos.

-¿Por qué no usaste la única neurona que te queda y preveiste esta situación? No puedes dejar que venga a perturbar la paz de nuestra hija.

-Estás hablando de Jaskier como alguna clase de villano, nosotros nos separamos mucho antes de que empezáramos a salir, y sólo quería conocer a Ciri. Ahora vivimos juntos, lo sabría tarde o temprano.

La de ojos violetas se enfureció.

-¿Por qué no piensas en ella? ¿Sabes cómo se va a sentir o si se va acostumbrar? Además, ¿cuantos años tiene ese gigoló ¿18? parece que va a secundaria, como sabes que no va solo tras tu dinero, estás casi en tus 40 Geralt.

-¿Te quieres calmar un poco? Primero, soy feliz con él, deberías alegrarte por mí. Segundo, no voy a permitir que te expreses así, está por terminar su carrera y es muy bueno en lo que hace, tuve mucha suerte de que siquiera se fijara en mi. Guárda tus opiniones para cuándo hagamos la audiencia mensual, hasta entonces Yenn, limítate a tu propia vida- avanzó para tomar las maletas de su hija al ver que ya estaba de regreso. Metió todo en su auto y luego se alejó. Suspiró y miró a su chico por el retrovisor.

Le sonrió, y su día mejoró considerablemente.

Este fue el procipio de todo.

Lo que Ciri descubrió en esas vacaciones es que se puede querer a alguien con la que no tienes lazos de sangre, tanto como se quiere a los padres.

Jaskier era divertido, cariñoso, cocinaba unos ricos postres de los que le dejaba comer tanto como quisiera, que era responsable y paciencioso cuando le explicaba temas matemáticos.

Y su padre tenía una rutina natural con él que no le había visto con nadie además de su madre. Incluso mucho más feliz.

Por mucho que le jodiera a Yennefer.

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La historia es mejor que el estilo pero tengo sueño xd