En definitiva, hombre,
Haz tenido la razón...
No me niego más.
Yo, no te conozco.
Pero miré tus ojos,
Y, permiteme contarte...
Que he visto, más de lo que sabes ya de ti.Haz vivido a destiempo,
Observando más allá de lo inmediato...
Salvando recuerdos vacíos,
Y siempre sensible al tacto.Pareces tan feliz, iridiscente.
¿Quien te ha robado melancolía?
Me compadezco, y me aflije...
Sin tristeza tampoco alegría.Sin suspiros te he visto,
Pensando siempre, por qué...
Y cada palabra que dices...
Con seducción y poder.No haz podido serenarte,
Y en tus sueños todavía le ves.
No le temas, acércate y habla...
Lo deseas más que ayer.Fueron segundos efímeros,
Y se sintió como una vida entera,
Te vi dichoso, y alicaído,
No esperabas que se fuera;Busqué, por aquello que quería.
Añoraba encontrarme en tu pensamiento,
Escudriñé entre amores de tu vida...
Ni un sólo rastro de aquel encuentro.[Ámate tanto como hasta ahora,
Y duerme sobre las nubes,
Cielo mío, lo mereces.]Escucho un suspiro y otro más, que se esfumen tus memorias, no deseo verte llorar.

ESTÁS LEYENDO
Encuéntrame, corazón.
PoesíaUn suspiro arrinconado que clama mi nombre, lejano aún. Un recuerdo repentino, y una vida de distancia...