A DOS METROS DE TI: Quererte sin condiciones

STELLA

Después de nuestro increíble reencuentro estuvimos hablando todo juntos durante horas hasta que los demás se tuvieron que ir y Will y yo nos quedamos completamente solos.

Veía a Will con una sonrisa en la cara, pero sentía que le pasaba algo que no me quería contar, así que decidí preguntarle a cerca de su tratamiento. No se le veía buena cara, parece que nada a cambiado y eso me preocupaba, y cuando le pregunté se le cambió la cara por completo, como si hubiese sacado su cara verdadera, y me dijo:

- Pues las cosas no han cambiado mucho...-suspiró-. 

-¿ Qué te han dicho?- le dije con cara de preocupación.

- Nada- dijo pensativo-.

-¿ Entonces?- pregunté confundida de lo que acaba de escuchar-.

-¿ No lo ves Stella? Ese es el problema, si los médicos no me dicen nada es porque algo anda mal- me dijo con cara de cansancio-. El tratamiento no me está haciendo efecto, yo no noto cambios y desde que me alejé de ti, me cuesta sonreír, pero me alegro de que tu estés bien- y me puso su sonrisa-.

En ese momento sentí que una parte de mi mundo se me caía por completo y sin querer una lágrima cayó sobre mi pómulo pero me la sequé lo antes posible para que no me notase decaída.

Me habló sobre el seguimiento de su tratamiento un rato, veía que lo llevaba todo perfecto a su hora y eso me preocupó más ya que no daba resultado. Después se ofreció a llevarme a casa y le dije:

- Es que vivo un poco lejos de aquí, necesitaría ir en autobús, además no pasa na...- y en ese momento me interrumpió y me me soltó:

- No te preocupes, he venido en moto.

- ¿ Qué? Pero...- dije muy confusa-.

- Es muy reciente, me saqué el carné hace un mes.-me dijo contento- Es lo único que puede hacerme sentir vivo, respirar profundo el aire que me viene de frente.

- ¿ Entonces a que estamos esperando?- Le dije segura y feliz