Parte I

24.2K 1.5K 395
                                    


Holaaa! Esta es mi primer fanfic que hago publica, espero que disfruten leerla así como yo escribirla :3 . 

Tal vez no sea una gran trama en esta historia, pero se me ha ocurrido y no ha podido simplemente quedar en mi cabeza. Me ha llegado la inspiración de una canción llamada como el mismo título de la historia.

De antemano disculpen, es mi primera vez escribiendo un fanfic chicoxchico , así que sorry si hay mala redacción y también por el intento de smut :'v jajajaj.

Cualquier critica o comentario positivo es bienvenido:)

~~~

—Aaah...—

Los jadeos y gemidos de un joven matrimonio se escuchaban en la habitación. El peliverde era fuertemente embestido por su esposo, su espalda pegada con el trabajado pecho del otro, quien con uno de sus brazos abrazaba fuertemente su cintura y con su otra mano lo ayudaba a flexionar su pierna sosteniéndolo fuertemente del muslo, buscando un mejor angulo para darse mas placer así mismo y a su pareja.

—Mi..mierda— gimió el rubio. Continuaba sus movimientos con fuerza y precisión, lamiendo la nuca de su pareja, chupando y besando. Sentía al otro tensarse poco a poco. Ambos estaban cerca. Izuku se movió, buscando con desesperación los labios del otro.

—Kacchan...— gimió el nombre del otro, buscando su atención, de pronto esos ojos rubíes que tanto amaba lo miraron, Katsuki entendió lo que quería, se inclino acortando la poca distancia que los separaba. Devorando los labios del otro con tanta devoción, ambas lenguas en una lucha interna que parecía no acabar, el rubio cenizo se separo mordiendo con poca fuerza los labios del peliverde.

Solo faltaron unas estocadas más para que Izuku se corriera manchando su propio abdomen y un poco en las sabanas que, bueno, tendría que cambiar mas tarde. Katsuki no resistió mucho al sentir como su esposo se contraía por su reciente orgasmo, se sentía tan malditamente bien que termino corriéndose dentro de el, embistiendo unos segundos mas sobre estimulando su orgasmo para después aflojar su agarre saliendo de el y cayendo de espaldas en el suave colchón.  

Ambos jadeaban tratando de recuperar su respiración la cual se encontraba errática. El peliverde no tardo mucho en caer acostado a su lado.

-Ha sido un buen sexo- Pensó Izuku, quien había llegado al orgasmo sin tocarse. En realidad sabía que había sido un magnifico sexo.

Porque si, así era como se sentía últimamente, porque cada vez las caricias y los mimos llenos de amor se sentían menos. Izuku no sabia que pasaba, y sinceramente tenia miedo de preguntar o hablar de la situación, creía que eran estupideces que a veces se le ocurrían. Desde hace casi tres semanas ha querido aferrarse a la idea de que todo eso no era mas que por el cansancio por su trabajo como héroes, tal vez su esposo solo estaba cansado y quería sentirlo de esa manera carnal, no era fácil que ambos fueran héroes tan importantes, con el siendo el símbolo de la paz y su rubio esposo como el 2do mejor héroe, solo era el estrés...¿no?

— Hoy no fuiste tan ruidoso...— escucho hablar de repente a Katsuki con un tono mas tranquilo respirando ya de forma normal.—¿Es que no lo has disfrutado?— lo miraba casi por el rabillo del ojo.

—No, no, nada de eso, fue increíble Kacchan— le dijo sonriendo un poco, después de unos segundos de silencio-los cuales parecieron eternos-Izuku decidió levantarse—I-iré a limpiarme—

—Tsk—

No hizo mucho caso al gesto del rubio y se adentro al baño, se miro al espejo, notando en su cuello pequeñas marcas que fueron hechas hace unos pocos minutos, y algunas gotas de sudor, suspiro pesadamente viendo su reflejo.




Del otro lado de la puerta se encontraba Katsuki poniéndose solo un pantalón de pijama holgado para dormir. Suspiro pensando en su pecoso, claro que el también sentía las cosas raras pero no sabia como manejar la situación, maldita sea llevan años casados y es la primera vez que se siente así. Acomodo las almohadas que apenas hace un rato habían caído de la cama. Miro el reloj que colgaba en una de las paredes, era casi media noche. Agradeció mentalmente que al siguiente día lo tuvieran libre.  

 Salio de la habitación que compartía con el peliverde caminando lentamente y sin hacer mucho ruido hasta la siguiente, abrió la puerta con sigilo y se adentro en ella. La habitación era iluminada pobremente por la luz de la noche, se acerco a la pequeña cama para ver a su primogénito de 4 años recién cumplidos hace mas de un mes.

El pequeño dormía tranquilamente de lado, abrazando un peluche bastante curioso del héroe Deku. 

-Traidor- Pensó el rubio, sin embargo una sonrisa genuina se plasmo en su rostro. Acaricio su rubio cenizo pero ondulados cabellos. Tratando de ser cuidadoso en no despertar a su hijo, bastante había costado lograr que se durmiera sin hacer mucho berrinche y caras de cachorrito para ver las caricaturas un poco mas de tiempo.

—¿Papá?— se removió un poco su hijo queriendo abrir sus ojos. El rubio se tensó pero siguió dándole mimos al más pequeño.

—Duerme mocoso— le hablo bajito, logrando que no se moviera mas. Salió de esa habitación y fue a la que estaba a un lado.

De nuevo abrió despacio la puerta, en esa habitación se encontraba la mas pequeña de la familia con apenas 8 meses. Se acerco a la cuna color blanca y miro a su hija dormir, respiraba en de una forma tan tranquila, con su pequeño ceño fruncido y una mueca, acaricio una de sus regordetas mejillas haciendo que la bebé cambiara sus facciones a una mas relajadas y con una pequeña sonrisa. Abandono la habitación dándole un beso en la frente a su hija.

Cuando regreso a la habitación se encontró con su esposo medio dormido, rodeo la cama y se acostó en su lado.

—¿Duermen bien?—pregunto, refiriéndose a sus pequeños retoños.

—Todo bien—contesto sin mas. 

Se acomodo dándole la espalda al peliverde, este al darse cuenta sintió algo retorcerse en su estomago, ahí estaba otra vez esa maldita actitud cortante, los últimos días era el quien se atrevía a rodear al rubio cenizo en un abrazo, pero esta vez se sintió tan mal con el mismo que sus ojos no tardaron en humedecerse, se dio la vuelta decidido a dormir y dejar eso pasar.

Izuku se enojo consigo mismo por ser tan débil con eso, pero... el solo se había acostumbrado a sentir los fuertes brazos del otro abrazándolo para dormir, repartiendo besos en sus hombros y rostro, haciéndolo sentir tan amado, es por eso que ahora resentía mucho esa falta de muestra de cariño, es por eso que las lagrimas se resbalaban por su mejilla, y lo peor es que no era la primera vez. Pronto el cansancio mental y físico -ya sea por su turno de patrullaje de la tarde o por la sesión de sexo- cayo dormido a los pocos minutos.

Katsuki permaneció despierto un poco mas, era obvio que había sentido un poco los espasmos del otro al tratar de callar su llanto, pero simplemente se quedo quieto, ni el mismo sabia porque no había tratado de consolar a su pequeño pecoso, simplemente se quedo quieto sintiendo la tristeza del otro para minutos después caer dormido también.




~~~

Espero que les haya gustado esta primera parte o lo que funcionaria como un prólogo. Estoy segura que esta pequeña historia se desarrollara aun mas en los próximos capítulos, así que espero les guste...


-E :)

Let's Hurt Tonight - [KatsuDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora