La Marca De La Muerte (Harry Potter y Tú) [C A N C E L A D A]

Segunda temporada: La Madriguera

Narradora 🤗:

La oscuridad reinaba en el lugar y lo único que se escuchaba era su respiración calmada. La luz de la luna se filtraba por entremedio de los barrotes de la ventana iluminando su perfecto rostro, que a pesar de los años allí encerrada no se demacraba. Su piel pálida estaba tan suave como el primer día que puso pie en ese horrible lugar; sus ojos grandes y tan azules como el océano perdieron su brillo, y su cabello dorado cual rayos de sol caía como cascadas en su espalda encorvada. Abrazando sus rodillas se balanceaba de un lado a otro tratando de recordar las únicas memorias felices que le quedaban. Ese era su castigo, el castigo por buscar el poder y no escuchar las advertencias. 40 largos años allí encerrada, sin amigos, sin familia, siendo su única compañera la soledad y los dementores que al menos una vez al día venían a llevarse sus recuerdos felices, dejándola con las memorias de todo el mal que hizo, cosas de las cuales se arrepentía de haber hecho.

Cayó sin fuerzas al concreto, su vista poco a poco iba tornándose borrosa y sintió la marca quemarle el pecho. Ella llegó para llevársela; el miedo recorrió sus venas y solo atinó a gritar al ver a la criatura a los pies de su colchón en esa celda, quiso levantarse pero su cuerpo no respondía. Ella se acercó lentamente ,flotando a solo unos centímetros del suelo, hacia la bruja y extendió su mano huesuda y grisácea al pecho de la mujer. Empujó hacia abajo con su dedo largo el cuello de la bata a rayas de la bruja, dejando a la vista la marca de una línea vertical en su pecho.

No lo lograste... Pero volverás a intentar, volverás a este mundo a conseguir lo que nos pertenece. Busca las reliquias y estaremos juntas de nuevo.

- soy Raven... mi nombre es Raven... Raven Grindelwald- murmuró la rubia antes de dar su último respiro.

______ despertó de golpe sobre su cama. Su cuerpo sudaba frío y sus diente titiritaban, se dió cuenta que su ventana estaba abierta, dejando entrar el sol de la mañana y por ende el viento. Se levantó con pereza y cerró la ventana para luego encender una vela para dar iluminación a la habitación.

Pudo ver a su cuervo Midnight posado sobre el escritorio. Se acercó al ave y le acarició con suavidad el plumaje dándose cuenta de la carta que tenía amarrada en una de sus patas. ______ le quitó el amarre y desdobló la carta para empezar a leerla. Era de Harry.