Capítulo 17

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NARRA STAXX

Habían pasado un par de días desde que Alex marchó. No me dijo gran cosa, solo que marcharian todos por un tiempo y que fuese construyendo mi casa. También me dio comida para mí y para Jimmy. Empecé a construir mi casa y sinceramente no sabía si a Alex le gustaría que estuviese al lado de la suya.

Staxx: ¿Me pregunto cuánta gente sabrá de mi vuelta? Echo de menos a Willy, la última vez que nos vimos la cosa no acabó muy bien que digamos...-

Willy era mi mejor amigo, estábamos siempre juntos, pero nos peleamos fuertemente y estuvimos meses sin hablarnos, luego me marché. Si pudiera retroceder en el tiempo, sin duda no me iría, explicaría las cosas y así quizás me iría mejor.

Eso es lo que tuve que hacer desde un principio, explicar las cosas y no salir huyendo de ahí por patas. Me fui porque estaba agobiado, tenía problemas, pero eran problemas conmigo mismo. Es decir, no me sentía bien conmigo, quería y necesitaba estar solo. Así hice, me fui y estuve completamente solo y me encontré y pude reparar aquello que estaba roto, pero el amor por Alex y mis amistades no se repararon nunca, por eso volví.

Yo sentía que no merecía el perdón de estos, además, ellos tienen su vida hecha y seguramente no tendrán hueco para mí.

Staxx: En vez de huir tendría que haber pedido ayuda, coño!- No logré retener esa lágrima que tenía en el ojo.

Entré a casa de Alex y me hice algo de comer, llevaba dos días completamente solo, no soportaba más soledad.

Staxx: Ven ya pequeño...- Me tumbé en la cama, a pesar de ser mediodía, y me puse a llorar hasta quedarme dormido.

NARRA SAMUEL

No lo ví a tiempo, no le avisé a tiempo. Corrí y los maté a todos, cogí a Rubén y me metí en la tienda de campaña.

Samuel: Joder, joder Rubén, despierta. Perdoname, no tenía que haberte dejado salir.- Estaba allí, entre mis brazos manchados de sangre.

Le alcanzó una flecha en la espalda, no sé si está muy grave.

Samuel: Rubén despierta coño!- Empecé a llorar por los nervios pero supe actuar y lo puse bocabajo.- Te va a doler tontito mío, pero es necesario.- Cogí esa flecha con fuerza y la saqué de su espalda. Con unas vendas desinfecté la herida e hice un torniquete.- Ya está, ya estás curado...- Estaba todo bien, pero no despertaba.- Rubén... ¿estás ahí?...-

Estaba muy preocupado y solo, ese era el problema, estaba solo. Necesitaba ayuda, no podía dejar a Rubén en este estado así que se me ocurrió una idea. No era la mejor opción pero era la única.

Samuel: Venga, nos vamos.- Si, eran las 4 de la mañana pero iba a coger el cristal e irme rápidamente, no haría paradas ni nada.- Venga Rubius... Despierta mi amor...-

Hice ese último intento sin resultado, así que con las lágrimas cayendo por mi pálida cara, por el susto, lo cogí y lo monté en el caballo. Até nuestras cinturas y sus brazos los rodeé a mi cuerpo para evitar caídas. Fui a trote a todo momento. De vez en cuando le hablaba, sin éxito alguno, pero no perdía nada por intentarlo.

Ya estaba saliendo el sol cuando llegué a ese especie de templo, no quería dejar a Rubén solo en el caballo así que fui lo más rápido posible. No me paré a luchar con los enemigos, me limité a correr a por el cristal y salir tal cual. Así hice y cuando llegué con Rubén le volví a desinfectar la herida. Ahora por lo menos se le había cortado la sangre.

Terminé e hice igual, a galope fui hasta la fortaleza. No hice paradas para comer, no tenía nada de hambre, no quería nada, solo llorar porque no sabía que hacer. Sabía que si tuviese a alguien Rubén estaría bien, solo es una flecha, pero normalmente cuando te ocurre eso despiertas al rato y él no lo hacía, eso era lo que realmente me preocupaba.

Eres Tontito😌 [Rubegetta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora