La manada Kim situada en Daegu, es liderada por Taehyung. Un alfa con muchos atributos.
Los omegas peleaban por el, siempre queriendo impresionarlo. Solo que el añfa ya tenia a un omega, su pequeño omega Yoongi.
Donde Min Yoongi es el omega del alfa...
Tomando la chaqueta del alfa pelirosa, acomodó la ligera ropa que usaba. Salió con cuidado de la habitación, JiMin le esperaba a fuera de la habitación para darle su privacidad de cambiarse.
Los ojos de Yoongi se enfocaron en el alfa al salir, este estaba con la enfermera que lo había atendido y dado de alta. Ambos parecían inmersos en su conversación que de un momento a otro la incomodidad surgió en él.
No deseaba interrumpir su conversación, pero tampoco quería estar parado en espera a que el alfa termine de hablar.
Se dirigió hacia ellos, llamando la atención de los dos presentes al instante. JiMin se despidió de la enfermera, corriendo hasta él para ayudarle a caminar. Rodeando con su brazo izquierdo la diminuta cintura del omega, salieron del hospital cuidadosamente por el estado débil del omega.
Tomaron el auto que esperaba fuera del hospital, un joven el cual parecía estar distraído se encontraba como piloto, Yoongi quiso huir en cuanto su mirada se enfoco en él, la sensación de ser mirado por esos ojos los cuales le juzgaban sin haber hecho nada.
Le fue imposible avanzar, de no ser por el suave empuje de JiMin sobre su cuerpo, avanzó. Entrando por los asientos traseros donde aun dentro de este el alfa parecía apegado a él, en búsqueda de su tranquilidad y comodidad. El miedo no le permitió aquello, muy por el contrario buscaba alguna forma de poder salir del auto y huir lejos de todo.
El traslado hasta la casa del alfa fue largo ante sus ojos, tal vez debido a su gran desesperación y temor que no le permiten estar en tranquilidad. Aun se sentia incomodo por la mirada que el conductor le daba, por lo que había podido detectar el piloto era un beta, pero su fuerte presencia le daba un toque de alfa que le intimidaba.
Visualizo frente a él como la casa grande, donde solía vivir el alfa de la manada, junto a su familia se hacía más claro.
El auto dejo de avanzar frenando delante de las puertas que daban paso al hogar del alfa. JiMin abrió la puerta saliendo del coche, Yoongi sabía que ahora él debía ir con el alfa, pero también las ganas de huir con la oportunidad que tenía aumentó.
Antes de hacer cualquier movimiento, estaba siendo tomado por los brazos del alfa pelirosa, lo llevó arrastra dentro de la gran casa, escuchando como voces de mujeres y hombres resonaban.
La mayoría perteneciente a la servidumbres, cuando fue enfocado por los demás, los murmullos sobre él no tardaron en escucharse. "un chico nuevo para la limpieza", "¿Es un omega?, que raro. Un hombre omega es un fenómeno", "tal vez es un chico para liberar el estrés del alfa".
Yoongi sintió sus piernas temblar. Sabía que su condición no era normal. Un hombre no debía ser omega, las mujeres eran las únicas que pertenecen a la categoría de omegas.
Sintió que sus mejillas se empezaban empapar, quería esconderse de todos y jamás ser vuelto a mirar. La calidez de unas manos secando sus lágrimas lo regresó a la realidad.
-Vamos bonito, no dejes que esos tontos te hagan llorar. Te sorprenderias de lo que el alfa piensa de ti- Diciendo aquello, sonrió al omega.
JiMin le había notado triste cuando los murmullos habían empezado a salir. Su instinto protector salió a luz en cuánto el aroma del omega se volvía triste. Además que el pequeño omega no era feo y raro, le parecía incluso un omega muy atractivo, que de no ser por TaeHyung tal vez podría haber intentado cortejarlo.
Siguieron el recorrido, llegando finalmente hasta uno de los últimos pasillos, donde la oficina del alfa Kim se hacía presente, expidiendo su aroma café con canela, el lobo del omega reaccionó al instante en que sus fosas nasales pudieron olfatear.
Sintió sus piernas temblar, sus ojos empezaron a dilatarse y la lubricación en su cuerpo comenzó. Fue entonces que el sonido de una puerta, junto a un gruñido de posesión resonó. Dejó de sentir su pesadez, siendo sostenido por los brazos fuertes de aquel alfa que expedía su aroma a café y canela.
-Por fín te tengo, mi omega- No escucho nada más de aquélla voz. Su vista se nublo, dejándose caer en brazos del alfa. Se sentía protegido, sentía que estaba seguro. Estaba en casa.
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¡He vuelto! Uffs
Se que tarde un poco más de lo peometido, pero me han pasado cositas.
Lamento la demora, estare más activa ahora que ya empiezo estar estable y que tengo tiempo ^^
Espero les haya gustado este capítulo. Solo debo avisar que la relación entre Tae y Yoon sera algo lentita, por cuestiones de que Yoongi creé que es un fenómeno.
También como siempre les pido, agradezco mucho si comentan y votan. Me gusta saber sus opiniones sobre si les gusta algo, si cometí algún error o si tienen dudas.
