Diez

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N. Omnisciente.

Este capítulo se conecta con la parte 6 solamente que se narra desde otra perspectiva.

4 chicas estaban desayunando tranquilamente en la mesa del comedor, Soyeon había hecho el desayuno ya que Soojin no se había despertado aún.
El hecho de que la coreana no se encontraba despierta a esa hora de la mañana desconcertó un poco a las chicas pero decidieron dejarlo pasar, tal vez no pasó una buena noche.

Al paso de unos minutos Soojin bajó al comedor en busca de alimento para su amada Maknae.

- Buenos días. - Dijo para después bostezar un poco.

Todas las presentes dijeron lo mismo.

- ¿Quién hizo el desayuno? - Preguntó mientras buscaba dos platos y dos vasos para ella y para Shuhua.

- Yo lo hice. Si te esperábamos nos íbamos a morir de hambre. - Bromeó un poco y a los segundos se escucharon pequeñas risas.

- Perdón, me quedé dormida. - Se disculpó y después puso en una mesita sus desayunos.

- ¿No comerás con nosotras? - Habló Miyeon viendo la acción de la chica, las demás guardaron silencio mientras la veían tambien.

- Eh, si. Shuhua no se ha despertado y le llevaré el desayuno hasta la cama. - Sonrió y comenzó a caminar hacia su habitación.

- ¿No creen que esas dos se traen algo? - Insinuó Miyeon cuando la menor se había ido completamente.

- Es verdad. - Le siguió Minnie.

- ¿No será qué...? - Dudaba en terminar Miyeon, eso era algo que no se pensaba hasta ahora.

- A cómo son ellas yo no lo creo. - Dijo algo desinteresada la líder.

- Pero últimamente ellas están muy pegadas y cariñosas. - Acotaba la china algo confundida.

- ¿Qué tal si salimos hoy? Así podemos preguntarles qué pasa. - proponía la más baja de todas con media sonrisa.

- No suena tan mala idea, además así podemos pasar tiempo a fuera. - secundaba la mayor sonriendo.

Todas concordaron con aquel plan menos la tailandesa quien no se veía con ánimos para salir.

- Iré a comentarle a Soojin, creo que está en su habitación. - Decía la mayor parándose de su asiento y dirigiéndose al lavabo para lavar sus platos.

- Yo iré a decirle a Shuhua. - Avisó la tailandesa haciendo la misma acción.

Minnie fue directamente al cuarto de Shuhua mientras que Miyeon hacia el de Soojin.

-Soosoo, ¿Estás ocupada? - Tocó la puerta.

- No, para nada. Adelante. - Dio el permiso para que su amiga pasara al cuarto y conversaran.

-¿Qué se te ofrece? - Volvió a hablar la menor.

- Quería saber si querías acompañarnos, iremos a cualquier lugar que nos distraiga. - Dijo Miyeon sentándose en el borde de la cama.

- Me parece buena idea, ¿Shuhua vendrá con nosotras? - Preguntó con mucha curiosidad haciendo que a la mayor le dieran ganas de molestarla un poco.

- No lo sé, escuché que ella ya tenía otros planes. - Mintió ocultando las grandes ganas de reírse.

- ¿Ella tiene planes? ¿Con quién? - Alzó ligeramente la voz pero mantenía la misma curiosidad que iba creciendo poco a poco.

- Creo que escuché que con un chico. - Sonrió maliciosamente viendo a Soojin.

- ¿Un chico? ¿Con mi Shuhua? - Exclamó sorprendiendo a la mayor pero a la vez dándole ternura.

No se contuvo más y soltó una carcajada.

- Es broma. No sé si irá pero tú deberías de arreglarte. - Siguió riendo pero de forma suave para al final darle una linda sonrisa.

- Soojin unnie, ayúdame con mi maquillaje por favooor. - Decía la de rizos entrando a la habitación sin previo aviso o invitación.

- Ven aquí, ya mismo te ayudo. - Le dijo riendo un poco por haberse delatado segundos antes.

En eso entró Minnie avisando que ellas no iban a poder acompañarlas.
Soojin se sintió algo desanimada pero no podía hacer nada al respecto si Shuhua no tenía ganas de ir.

Todas terminaron de arreglarse y estaban a punto de irse hasta que a una se le "olvidó" cierto objeto.
La coreana fue hasta la habitación donde se encontraban las extranjeras y se dirigió a la parte donde Shuhua reposaba para darle un beso que sin querer casi le da en los labios.

Las chicas se la pasaron recorriendo las extensas calles de Seúl viendo cada tienda que les interesaba hasta que les comenzó a dar hambre.
Buscaron un buen lugar para poder calmar su apetito durante algunos minutos hasta que entraron al que más les interesó.
Buscaron una mesa la cual fue la última y al fondo, realmente tuvieron suerte.

Ordenaron sus platillos y comenzaron a charlar entre ellas sobre sus días, el lugar, las cosas que comprarían la próxima vez, su nuevo álbum y sus relaciones amorosas.

- Hey, Soojin. - La llamó Yuqi. - ¿Cómo vas con Shuhua?

Ese comentario sorprendió un poco a las presentes, fue tan directo que ambas chicas pensaron en golpear a la menor.

- ¿Por qué preguntas eso? - Desvío la mirada algo avergonzada.

- Es muy obvio que ustedes dos se traen algo. - Respondió la china.

- ¿Ustedes están saliendo? No las juzgaremos si se trata de eso. - Persuadía un poco la líder.

- Nosotras... Aún no..estamos saliendo. - Lo último lo dijo en un murmuro mirando hacia abajo, se sentía demasiado tímida y apenada acerca de eso.

- ¡¿Aún no?! Why?! - Exclamó la menor.

- Yuqi, no exageres. - Reía un poco Miyeon por el comportamiento de su amiga.

- Oh, perdón unnie. ¿Por qué todavía no están saliendo? - Repitió su duda y las demás miraron a la interrogada.

- No creo que eso vaya a pasar. - Seguía sin despegar su mirada del piso pero esta vez con un sentimiento triste.

- ¿Qué te hace pensar eso? Se ve a kilómetros que Shuhua babea por ti. - Bromeaba con algo de verdad la china.

- Yuqi tiene razón. ¿Por qué no te atreves? - Habló Soyeon poniéndola un poco incómoda.

- Saben que no soy ese tipo de persona... - Decía en lo bajo tratando de mirarlas.

- En ese caso nosotras te ayudaremos. - Propuso la líder con entusiasmo y las otras chicas secundaron la idea.

- ¿Cómo? - Preguntó con un poco de emoción. Quería decirle a Shuhua lo tanto que la amaba y deseaba estar con ella pero no sabía cómo.

- Ideemos un plan en este momento, a fin de cuentas, tenemos todo el día. - Respondió la mayor con la misma cantidad de emoción que tenían las otras chicas.

Esa tarde tuvieron una lluvia de ideas para organizar la cita que tendría con la taiwanesa. Todo se había planeado perfectamente y tenían planes B y C por sí algo pasaba, nada podría salir mal.

Ahora sólo quedaba comentarle a la menor y poder comenzar con el plan.

Nada podría salir mal.

¿Cierto?

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;)

Aprovecho a decir que estoy escribiendo otra historia Sooshu y que cuando la historia llegue a 2k la publicaré:).

Pd: Gracias por las vistas:D

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