Capitulo 12

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Me sentía fatal, estaba engañando a Steve, el, pensando que yo estoy descansando en un retiro, cuando en realidad estoy en un hospital, recostada junto  a Drew, <<soy una horrible persona>> me levante zafando fácilmente el agarre de Drew, quien me tenia con sus brazos alrededor de mi cintura, recordaba cuando me recostaba con Steve, y me acurrucaba a su lado, el me cubría con sus brazos y depositabas suaves besos en mi hombro, el hormigueo que me producía era encantador, miraba sus ojos avellana y quedaba hipnotizada ¿Por qué hago esto? Yo amo a Steve, o ¿Amo a Drew? Decidí salir a pasear por el hospital, solo un momento, para despejar mi mente, estaba muy confundida, y sabia que este no era el momento adecuado para organizar mis pensamientos esto no es real, el beso con Drew no fue real, ¿o si? Seguí caminando y mis pies inconscientemente me llevaban hacia una pequeña cafetería, y recordé el hambre que tenia, moria de hambre, la cocinera estaba sola, asi que aproveche que no tenia clientes y ordene un pan con leche, para Drew y otro para mi, me comí el mio ahí, cuando termine, agradecí y regrese al cuarto con el pan, y una taza de leche en manos, para Drew, al dirigirme al cuarto, escuche risas y susurros, ¿que pasa ahí dentro? cuando me fui, no había nadie, solo Drew y yo, y el estaba dormido abrí la puerta con precaución y asome la cabeza, sentí un escalofrió que me recorría de pies a cabeza, luego sentía como mis mejillas ardían, no se si de ira o vergüenza, ya que me encontré a Drew, charlando y riendo con una enfermera, era alta y esbelta,muy joven con un cabello rubio-rojizo ondulado que caía delicadamente sobre sus hombros, tenia un manicure muy sofisticado y unos labios retocados con gloss transparente, parecía modelo, Drew parecía encantado con ella, mis mejillas seguían ardiendo, estaban al rojo vivo ¿Celos? No lo creo, carraspee al ver que no notaban mi presencia.

-Oh, Lo siento, solo venia a darle esto a Drew, espero no molestarlos, ya me iba- dije con los celos asomándose en cada palabra y movimiento que hacia.

Al dirigirme a la puerta Drew dijo:

-¿Alice, Estas bien? ¿Qué pasa?-

Lo fulmine con la mirada, mientras la enfermera se disculpaba y se retiraba, no sin dedicarle una sonrisa picara a Drew que me hizo arder aun mas, al notarlo, esta salió de prisa.

-¿Pero por qué se fue?- dije sarcástica- si la estaban pasando muy bien, deja le hablo para que continúen- fruncí el ceño y me dirigí a la puerta.

-Tranquila, solo es la enfermera-

-Una enfermera que parece modelo-dije cruzándome de brazos.

-No tienes porque estar celosa- me dijo riéndose

-¿Yo? ¿Celosa?- reí sarcásticamente, y me fui acercando a el-¿Por qué se reían?-dije poniéndome seria.

-Es que nos llevamos bien, y empezamos a reírnos por las cosas que nos pasaron y…-Se detuvo al verme ver al cielo-Pero no me interesa, solo hay lugar para ti en mi corazón- me sonrió con su contagiosa sonrisa y no pude evitar sonreír, nos abrazamos y él estaba a punto de besarme pero lo detuve y le dije:

-Me siento rara, porque tengo novio y lo amo, y…ya no se que hacer-

-Ayer por la noche me hiciste creer lo contrario, bajo la cabeza y se veía triste-Al parecer me equivoque, fui engañado-

-No Drew por favor no digas eso, si te amo ¡Juro que te amo!-lo bese en los labios suavemente, y continúe-pero también amo a Steve y no…-me interrumpió y me beso de nuevo.

-Entiendo que no puedas decidirte, yo te esperare y te demostrare mi amor, te lo aseguro-nos fundimos en un beso apasionado, donde nuestras lenguas se encontraban y jugaban.

Era verdad amaba a Drew, pero también a Steve ¿Qué hago? No puedo tener dos novios, ni tampoco soy tan…como para tener un novio y un ‘amante’, si tan solo tuviera una señal, porque, sin una señal, no se que hacer.

Con nuestras respiraciones entrecortadas, nos separamos, ya que escuchamos a alguien golpeando suavemente la puerta, era el doctor, quien ya daba de alta a Drew, pero tenia que usar muletas, ya que la herida en su rodilla era profunda, la de la frente solo era superficial y llevaba una gasa, agradecimos y salimos de ahí.

-¿Ahora cual es el plan?-le pregunte

-Seguiremos hacia el norte, y encontraremos un lugar seguro- luego se detuvo y pensó un poco-¿No has tenido visiones en sueños?-

-¿Cómo?-

-Si, sueños raros, que sean como visiones, ¿tu entiendes no?-

Solté una risita nerviosa-Si entiendo-luego recordé la que tuve de estar en medio del desierto, y que luego escuche unos gritos y vi como los mataban, en el desierto…-¡Ya recordé!- alarme y le conte la visión en sueños que tuve, el se rasco la barbilla y dijo:

-Interesante, ¿crees que la caja este en un desierto o en una montaña?-

Sin entender a que se referia lo cuestione-¿Montaña?-

-Si, tuve un sueño, aunque tal vez no signifique nada, de que iba escalando una montaña con un frasco de sangre, y como el código esta en tu sangre, tal vez este en una montaña-

-O en una montaña del desierto- le dije mientras sonreía

Fuimos a la biblioteca más cercana y nos pusimos a investigar sobre desiertos que tengan montañas, no buscábamos cualquier montaña, tenia que ser una muy peligrosa, difícil de escalar, una mortal.

Era una idea torpe, pues, nunca había oído hablar de una montaña peligrosa en el desierto, todas las mortales y peligrosas estaban rodeadas de nieve,  así que después de buscar y buscar, al fin nos rendimos.

-¡No hay nada!-exclame

-Pues tal vez no sea en el desierto-

-Si pero seria muy obvio que fuera en una famosa como la de los Alpes o Los Himalaya-

El rio, pero después se detuvo al hojear de nuevo un libro y de repente exclamo:

¡Esta se parece a la montaña de mis sueños!-señalo una montaña que en verdad se veía mortal, aunque parecía que no estaba en el desierto, pero tampoco estaba rodeada de nieve, parecía como en un bosque, algo de desierto y algo de nieve, podría ser.

-¿Hua-Shan? –pregunte al ver el raro nombre que se veía ahí

-Si, es de China, ¿muy lejos eh?-me dice

-Si-

Parecía un lugar famoso, pues había muchas capillas y construcciones, solo en zonas bajas, ya que decía que se referían a esa montaña como un lugar sagrado y lleno de magia, había una parte que decían que nadie podía pasar porque moriría, que estaba protegido con magia de sus antepasados, o algo así, al ver esa sección que parecía muy peligroso y fuera de alcance, intercambiamos miradas.

-Creo que hemos encontrado el escondite de la caja- dije sonriendo

El asintió y alquilamos el libro, compramos un mapa de la montaña e investigamos todo lo relacionado con la montaña, y como estaba en China, era mucha información, y muy complicado llegar hasta allá, y todavía no pensábamos en un medio de transporte ni de como llegaríamos hasta allá, seguíamos atentos a los posibles escondites y caminos secretos, lamentándonos  de que nunca podríamos cruzar eso y a la vez celebrando que al fin hubiéramos encontrado una posible ruta.

Sin darnos cuenta, ya eran las diez de la noche y estábamos exhaustos, pasamos la noche en la biblioteca, a escondidas del supervisor.

Era una noche muy fría y sentía que me congelaba. No paraba de temblar.

-¿Estas bien? ¿Tienes frio?-me pregunto a la vez que me daba su chaqueta, pero yo negué con la cabeza y se lo devolví.

-No quiero que tengas frio por mi culpa-

Sin decir palabra se acercó a mi y me abrazo, calentándome con la calidez de su cuerpo, ya no tenia frio, me sonroje ante su presencia y poco a poco me quede dormida, en verdad disfrutaba mucho de su presencia.

Sin SalidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora