Prólogo

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-¿A quién espiamos kagami? -extrañada mirándola-

-Luka Counffaine .. -suspiro enamorada mente -

El amor que sentía por aquél guitarrista era tan notable.

Marinette y kagami decidieron en ir a pasear por la ciudad toda la tarde, ya que era una muy buena recomendación de la franco-china.

Podría encontrarse con algo muy entretenido, y si que era muy entretenido espiar a un chico sentado en la fuente tocando la guitarra de manera romántica y sex..

-¡No puede ser! -asustada se escondió detrás de su amiga- está caminando hacía nosotras..

Marinette sonrío burlona y miró al chico con una sonrisa.

-¿Por qué kagami se esconde, marinette? -pregunto luka sin entender lo que pasaba-

-Pregúntale tú, de seguro ella te lo dirá. -se cruzó de brazos haciéndose a un lado dejando en visto a la japonesa-.

Kagami reclamaba la cabeza de su amiga mentalmente. Luka al verla, sonrío con esa gran sonrisa que enamoraba a cualquiera chica en parís.

Y marinette.. pues ella prestaba atención muy emocionada la escena mientras comía palomitas de maíz que compro de un puesto de pochoclos.

Y aquí es donde uno de los protagonistas tenían que revelar uno de sus más grandes secretos, es lo que pensó mari.

-H-hola luka ¿C-cómo estás? -pregunto sonrojada y tartamudeando la japonesa-

¡Díos! ¡¿Pero que le estaba pasando?! ¡Era la primera vez que tartamudeaba frente a alguien!

-Supongo que muy bien.. gracias por preguntar. -sonrío amablemente luka-

¿¡Qué se suponía que debía de hacer!? ¡No podía confesarse ahora!

Marinette que seguía viendo la escena en silencio, le recordó a ella y sus intentos fallidos en invitar a adrien al cine mucho más antes en el pasado.

Que hermosos recuerdos nostálgicos.. e injustos y dolorosos también.

Mientras tanto luka, él chico estaba sumamente perdido. Ni entendía lo que estaba pasando, ¿tan ciego era?

Genial, ahora las cosas son al revés.

-Bueno, bueno. Ya no la molestes luka, kagami y yo tenemos cosas muy importantes que hacer. -sonrío la azabache mientras alejaba a la japonesa del nombrado-

-¿Cosas de chicas eh? Está bien, nos vemos hasta la próxima. -luka se despidió de ellas y se fué-

La japonesa miró con cara de asesina a su amiga por lo que hizo, ¡Está vez no la dejará escapar!

-¿¡Pero qué hiciste!? -furiosa gritándole- ¡era mi oportunidad para confesarme al amor de mi vida!

-Si.. pero se notaba que aún no estás del todo preparada -sonrío marinette- y necesitas ayuda amiga mía

-¿A sí, tú y cuánto más? -se cruzó de brazos molesta la japonesa-

(...)

-Debí quedarme callada..

-¡No, adrien y yo te ayudaremos! -la azabache abrazo enamorada mente a su novio nombrado-

El rubio miraba orgulloso a su novia.
Hizo muy bien en decirle sobre la situación.
Después de todo, kagami es también su amiga.

-¡Créeme que todo saldrá bien! -levanto felizmente el pulgar hacia arriba mientras sonreír-

-Yo creó que todo ésto se va a descontrolar.. -opinó desanimada mente la japonesa, tras el comentario de su amiga- Y otra cosa, siento que estoy viviendo en sus historias fallidas de enamorar.

Un gran silencio se forma en aquél parque.. ¿Y ahora? ¿Quién los podrá ayuda?

Pensándolo bien, creó que la japonesa no quería ayuda de nadie porque lo podía hacer ella misma por su cuenta.

¿Verdad?

Continuará...

¡Nos vemos a la próxima! 💕

Ayudando al Enemigo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora