De todas formas no creo que él quisiera acercarse a mí después de lo que le hice, así que volví con mi equipo. Quedaban cinco grupos más pero justo cuando yo llegué anunciaron por megafonía que ahora solo quedaban cuatro.
"¿Se puede saber dónde te habías metido?" Preguntó poco más que furiosa la chica sanitaria.
"Se me escapó el chico de piernas de robot cuando vino el otro grupo" Expliqué mientras revisaba con normalidad la munición de mis armas, tenía bastante.
No le hicieron falta palabras, pues su mirada me dejó bien claro su opinión al respecto.
-Octane...- dijo sin mirarme.
-¿Mh? Ah sí, eso...Octane...- dije recordando todas y cada una de sus facciones antes de agitar la cabeza para que esa idea no me sonrojara más de lo que ya lo había hecho.
El otro compañero nos avisó de que fuéramos yendo al próximo anillo, así que simplemente corrí hacia su dirección.
El marcador se fue reduciendo, hasta quedar en tres grupos con un número indeterminado de leyendas.
Buscamos una posición agachados sobre un tejado, centrándonos cada uno en un flanco, izquierdo, frente, yo el derecho, y la montaña que amablemente nos cubría las espaldas.
¿Él seguía en el campo? Pensé por un segundo antes de que disparos en la lejanía me sacaran de mis pensamientos.
Apunté con mi arma, y aunque no recuerdo en ningún momento haber cogido una mira, ahí estaba.
Vi a alguien derrapando por el sendero, pero antes de avisar a nadie me di cuenta de que era Octane, y no pude evitar soltar una risilla cuándo vi mi capa atada a su cintura a modo de cinturón. No pensé que realmente fuera a usarla.[...]
La batalla terminó, parece ser que quedaba nuestro grupo, Octane y otro grupo de tres jugadores.
El tercer grupo nos embistió, y al parecer también acabó con él.Me desperté de nuevo en la nave, esta vez en mi cama como siempre que perdía. Y como siempre que perdía, un recuerdo del dolor azotó mi mente. Me habían matado antes, sí, pero a diferencia de la última vez, esta me dejaron desangrándome mientras acababan con mis compañeros. Y eso dolía bastante más que un tiro en la cabeza.
Miré hacia la ventana, pero no había rastro de luz que intentara colarse entre las persianas. Eso y un silencio sepulcral contribuían a hacerme pensar en altas horas de la noche.
Tanteé sobre la mesita de noche, mirando la hora en la pantalla del móvil. [04:47]"Las putas cinco de la madrugada..." Me quejé por lo bajo. Por si fuera poco mi estómago me recordaba con un hambre voraz que no eran horas de estar despierta.
Me levanté sentándome de nuevo al borde de la cama en el momento en que empecé a ver como la habitación daba vueltas.
Cuando por fin supe donde estaba el suelo y el techo abrí la puerta de la habitación. De nuevo y como siempre, me había despertado vestida con una camiseta de manga corta varias tallas grande y un pantalón hasta la rodilla, ambos de distintos tonos grises.Se suponía que los jugadores no podían ser menores de dieciocho años, y por lo general eran mayores de veinte. Aunque en ese momento aparentara veintiuno, ya que tenía que que ser así para poder participar, yo en realidad tenía quince, y la ropa no me sentaba precisamente como anillo al dedo de ninguna de las dos formas.
Me puse la mascara, o más bien el gran cráneo de dragón que usaba como tal, y eché un vistazo antes de salir. El pasillo, a penas iluminado por las tenues luces que permanecían encendidas al otro lado en el salón principal, volvían grandes e imponentes las puertas de las habitaciones, y todas y cada una de las sombras de la estancia.
Entrecerré la puerta al salir, acercándome a la de la habitación contigua por simple curiosidad. No vi, ni oí nada más que profundos ronquidos.
Me dirigí hacia el salón mirando bajo las puertas a mi paso, ni una luz, ni un sonido, nada. En el salón, el minibar con las luces bajas, los sillones contra los nítidos cristales de las ventanas, la mesa de billar, y una gran mesa contra la pared, con pantallas holográficas de los juegos conformaban la estancia.Antes las habitaciones estaban separadas por paredes con grandes cristaleras, pero como claramente eso empezó a ser un problema, remodelaron la nave para la séptima temporada. Al menos eso es lo que me dijeron.
Pasé tras la barra para beber un vaso de agua, apoyada en la misma con el vidrio en la mano me quedé pensando en qué hacer. Los juegos se realizaban salteados, dándonos un día para descansar entre cada batalla, por lo que no me preocupaba especialmente no dormir esa noche, al fin y al cabo mañana no tenía nada que hacer aparte de entrenar, lo cual no haría.
Dejé el vaso vacío y me dispuse a volver a la habitación para, no sé, mirar al techo hasta quedarme dormida de aburrimiento. Casualidad, oí mientras caminaba por el pasillo, cierto grito forzado a convertirse en un susurro; –¡Joder...! –.
Mi rostro esbozó una sonrisa involuntaria y me acerqué a la puerta con sigilo.
Dudé un momento antes de llamar. Toc, toc...toc.
-Perdón, perdón...-Dijo un poco más alto y casi sin arrepentimiento.
-...-
Toc, toc, toc...
-Voy, voy...-
Oí algunos ruidos antes de que se acercase a abrir, supongo que se estaría poniendo la máscara o algo.
-¿Quién er-...?- No acabó la pregunta, pues enmudeció al verme. -No me jodas...-
Esta frase la he sacado de una de las partidas que jugué hace tiempo, estábamos los tres en la mejor posición y con ventaja, y nos dejaron para el arrastre...
"-Buscamos una posición agachados sobre un tejado, centrándonos cada uno en un flanco, izquierdo, frente, yo el derecho, y la montaña que amablemente nos cubría las espaldas.-"
Hagámoslo un poquito más difícil esta vez, tres estrellas, tres votos y yo subiré el próximo capítulo.
Muchas gracias por cierto por el apoyo, tantos comentarios me abruman (nótese la ironía).
ESTÁS LEYENDO
Bestia|Beast (Octane x Reader)
FanfictionA new legend in the Apex Games is too young to be accepted by the yunkie she loves, also, who loves a monster? A hard rutting season, so, well...why not be satisfied? And also, where a best moment that during one of the games? Una nueva leyenda en l...