¿Y tú, crees en el amor?

CAPITULO 14

Loreny.

Luego del encuentro con el idiota del profesor mi día transcurrió con normalidad.

Después de la escuela Dahi se fue a su casa y yo a la mía, me pasé el resto del día en el cuarto leyendo y haciendo tareas ya que no me gusta hacerla los fines de semana.

Me encuentro Acostada escuchando música algo melancólica y empiezo a cantar la canción "Tengo todo pero no te tengo a ti, tengo todo pero no me tengo a mí hice un álbum de momentos que quería vivir pero no llegan y estoy apunto de huir, lujos, carro, fama, louisvu, todo me vale si no estas aquí al lado de mí" es una de mis canciones favoritas me recuerda a mí padre y la actitud que he adaptado de chica mala malcriada pero lo material no me importa el dinero no me devolverá a mí padre, se que es imposible que vuelva, ¿que curioso no? parezco una chica super fuerte pero no todo es un farsa.

Mis pensamientos son interrumpidos por la voz de mi madre.

—Ya está la cena, baja necesito hablar contigo —Dice y con esto cierra la puerta y se va.

Apago la música y bajo a cenar.

—Hola Sus —Digo entrando a la cocina.

—Hola mi niña, su madre está en el comedor la cena ya está servida.

—Gracias —Le digo y con esto me dirijo al comedor.

—¿Que quieres hablar conmigo madre? —Pregunto tomando asiento.

—Cenemos primero —contesta.

Platicamos durante varios minutos de como estuvo nuestro día, ya impaciente por saber de qué quiere hablar pregunto.

—Pues bien madre ¿de qué querías hablar?

—Ah hija quería decirte que mañana tengo un viaje de negocio y regreso pasado mañana.

—Esta bien madre ¿solo querías decirme eso? —Pregunto.

—No, también que no podrás salir hasta que regrese a menos que sea donde Dahi y si lo vas hacer llámame primero.

—Es enserio madre, no soy una niña voy a cumplir 18 años.

—Eso lose pero mientras vivas en mi casa se hace lo que yo diga y mas te vale cumplir lo que te digo, te recuerdo que no quedaras sola, estarás con Sus, Michael y Julián y con las demás personas —Dice.

—Como digas madre —Digo levantándome de la mesa y dirigiéndome a mí cuarto enojada.

Cuando llego a éste me acuesto en la cama y mis ojos comienzan a picar, En serio ahora que casi soy adulta empieza a restringirme cosas y cuando era necesario no lo hizo, pero claro como ella creía que con objetos y permitiéndome salir de fiestas se iría el dolor de la pérdida de mi padre, pero no ni el dinero, ni las fiestas quitaron el dolor la necesitaba a ella, y ella nunca tuvo para mí se encerró en trabajo y más trabajo.

Mis ojos comienzan a hacerse pesados y a cerrarse poco a poco.