Nankurunaisa [Baekyeol/Chanbaek]

Capítulo 6

En ese momento, ambos estaban de pie frente a la tumba de su hermano.

Las ansias y la desesperación se apoderaron de Baekhyun en un segundo –Pensándolo mejor, esperaré en el auto –intentó alejarse de allí.

Pero Chanyeol tomó su mano y lo retuvo –Espera, Baekhyun. Nunca hemos venido juntos después de lo que pasó, ¿cierto? –soltó su mano y se puso en cuclillas a hurgar en el bolso, sacando los inciensos y las flores –Parece que tu tía y los demás no han venido recientemente.

Baekhyun miraba al mayor desde arriba. No puedo mover mis piernas. ¿Por qué tan de repente?… Mucho menos juntos. Yo… me sentía tan aterrado, que no podía venir aquí.

—Baekhyun y yo no pudimos continuar con nuestras vidas desde ese día –con una rodilla apoyada en la tierra, Chanyeol hablaba con la mirada fija en la lápida –Siento como si hubiésemos venido aquí hoy para aceptar tu muerte apropiadamente –acarició los relieves de las letras que rezaban el nombre de Taehyun –A partir de ahora, me aseguraré de aceptarla. Quiero seguir adelante. Así que, ¿lo harás conmigo?, Baekhyun –preguntó volteándose a ver al mayor de los gemelos.

La garganta de Baekhyun ardía y sus ojos estaban inundados de lágrimas —…Sí –respondió en tono ahogado.

No es eso. No es porque no pudiese aceptar su muerte. Todavía puedo recordar claramente el momento en el que la vida de Taehyun fue arrebatada. Ambos juntaron las palmas de sus manos y ofrecieron sus respetos en silencio. No tengo el derecho de poner mis manos juntas así.

El camino de regreso a casa era silencioso.

¿Cómo podré compensarlo de ahora en adelante?... Me pregunto si podré estar al lado de Chanyeol. Quiero estar a su lado… o algo. No estoy diciendo que deberíamos olvidar a Taehyun, pero…

—¿Escucharás lo que tengo que decir? –el hilo de sus pensamientos fue interrumpido por las suaves palabras de Chanyeol. El menor se giró a verlo, indicando en forma tácita que tenía toda su atención –Ese día… ya que no podía aceptar la muerte de Taehyun… me aferré a tus palabras. Llené el vacío que Taehyun dejó en mí… con tu amabilidad. Y al final, incluso hice que fingieras ser Taehyun –Chanyeol lucía lamentable –Hice algo realmente horrible… lo siento –se disculpó sincero.

—¿Eh…? –Baekhyun balbuceó una breve respuesta.

—…Es justo porque estabas ahí a mi lado, que pude llegar tan lejos. Es todo gracias a ti –sonrió levemente al decir esto –Esta podría ser una historia conveniente, pero… antes de que me diera cuenta… me enamoré de ti, de los momentos juntos. No como el reemplazo de Taehyun. Me gustas, Baekhyun.

El menor permaneció mudo ante esta confesión, y Chanyeol tampoco buscaba una respuesta al decir aquello. El resto del viaje se sumió en silencio nuevamente.

Ambos llegaron a casa, y el mayor dejó las llaves sobre la mesada de la entrada. Se colocó las pantuflas y entró a la casa.

—Voy a preparar la cena, así que vete a tomar una ducha y descansa –habló resuelto, dirigiéndose hacia la cocina.

Baekhyun, que en todo el viaje no había dicho una palabra, parecía ausente.

Esas son las palabras que llevaba queriendo escuchar desde hace mucho tiempo.

—¿Baekhyun? –lo llamó el alto, percatándose de su extraña actitud.

Por un momento me sentí feliz. Soy de lo peor. Hice que Chanyeol se disculpara… solo para convencerme de que soy amado.

—…No tengo derecho a ser amado. ¡Él murió por mi culpa! –rompió en llanto dejando escapar la certeza que lo atosigaba día a día, tras la muerte de su preciado hermanito.

—¿Eh…?

El rostro de desconcierto de Chanyeol dolió como un puñal en el pecho.

Ahh, luego de escuchar esto, me pregunto si seré odiado por él.

—…Ese día… discutí con Taehyun. Solo quería alejarlo. Así que lo empujé… lejos.

Sería mejor que me odiara. No dolería tanto en comparación a cuando es amable conmigo… o algo como eso. Creo que realmente estoy siendo injusto, no puedo ser feliz a costa de la vida de mi hermano.

—…Eso no era amabilidad. Si sonreías otra vez tras habértelo quitado... pensé que tal vez mis pecados serían expiados. No lo hice por ti, lo hice por mí mismo, soy tan egoísta. Lo siento, lo siento tanto, soy de lo peor –hipaba intentando en vano enjugar sus lágrimas.

Se merecía un insulto, esperaba incluso un golpe, pero los brazos de Chanyeol lo envolvieron con fuerza, hasta sofocar el frenético llanto contra su pecho.

—¿Así que has tenido que lidiar con esa carga por ti mismo todo este tiempo? –los labios de Chanyeol se movían contra su sien, y su mano descansaba en su nuca, evitando que se alejara –Siento no haberme dado cuenta…

—… ¡¿Por qué te sigues disculpando?! –chilló empujándolo hasta tenerlo de frente –¡Me llevé a Taehyun lejos de ti! Si no hubiese intentado distanciarlo de mí, ustedes dos todavía seguirían siendo felices juntos. ¡Deberías odiarme! Soy la razón de que siempre estuvieras sufriendo cuando estaba a tu lado. Por estos tres años…

—… ¡Es suficiente! –Chanyeol tomó las manos de Baekhyun entre las suyas, intentando calmarlo –Baekhyun, ¿qué puedo hacer para hacerte sentir mejor? ¿Qué es lo que realmente quieres? ¿Cómo hago que dejes de sufrir? –insistió buscando sus ojos, llamando a la razón del menor, extinta en ese mar de autodesprecio y remordimiento.

Baekhyun vislumbró la tristeza y la culpa en los ojos de Chanyeol, y sacudió la cabeza en negativa —…No estaba solo sufriendo. Pienso que también era feliz estando contigo… y también, a partir de ahora, quiero estar contigo —confesó con las lágrimas rodando por sus mejillas –Aunque debería ser el reemplazo de Taehyun… Aunque debería sufrir… Aunque no me merezco querer esto… quiero ser amado por ti.

—...Baekhyun –Chanyeol tomó su rostro con ambas manos, animándolo a levantar la vista, en una caricia –No importa la razón por la que decidiste estar conmigo… o el hecho de que me salvaste –intentaba en vano borrar el camino de lágrimas con sus pulgares  —Mírame, por favor. A partir de ahora... —aseveró, mientras elegía las palabras que mejor expresaran lo que su corazón dictaba — ...quiero estar contigo, vivir, pero de verdad, no solo pretender que lo hacemos. Ser el Chanyeol queriendo compartir los días con el Baekhyun real. Mis sentimientos por ti no cambiarán. Déjame hacer lo que pueda para hacerte sonreír… lentamente. ¿Empezamos de nuevo?... juntos.

Baekhyun asintió una y otra vez, incapaz de articular una palabra. Chanyeol sonrió en respuesta, uniendo sus frentes.

Al cabo de unos minutos de permanecer abrazados, una respuesta se dejó oír, amortiguada por el pecho del mayor –Gracias…

***

Desde entonces, paulatinamente, Baekhyun empezaría a ser capaz de expresar sus verdaderos sentimientos. Por ejemplo, lo que quisiera comer, la ropa que quisiera usar, a dónde quisiera ir… Y todas las mañanas, despertaría e iría hasta el altar de la sala.

—Buenos días, Taehyun –saludó Baekhyun antes de cambiar el agua de las flores.

—Baekhyun –saludó Chanyeol, vestido con ropa de oficina.

—Chanyeol, está torcida otra vez –lo amonestó yendo a acomodarlo –Eres malo atando corbatas –comentó concentrado en su tarea.

—Lo siento por eso… —se disculpó el alto, embelesado en las expresiones del menor.

—Está bien –Chanyeol advirtió los ojos de Baekhyun iluminarse – ...porque realmente me gusta arreglar tu corbata –le sonrió, sincero –¿Tienes tu bento?

—Lo tengo –devolvió la sonrisa el mayor, esperando a que se acomodara la mochila al hombro para luego entrelazar sus dedos y encaminarse a la salida.

Las cosas que quiero… incluso ahora… aún me cuesta decirlas. Hay veces en las que la culpa vuelve a abrumarme. No puedo borrar el pasado. Pero aun así… con Chanyeol a mi lado... juntos… quiero sentirme verdaderamente feliz.

FIN