Mi sangre es para mí. [V]

8.3K 836 104
                                    

Sustos.
Esos que le dabas a tu madre cuando eras pequeño mientras la pobre mujer bajaba tranquilamente de las escaleras. O esos que le das intencionalmente a tus abuelos escondiéndote y simulando haberte perdido.

Claro, los sustos eran algo en ocasiones divertido y estimulante... El de ahora era un susto de auténtico terror.

Las meras intenciones del Omega para ese día era solamente prepararse algún snack y volver a su cama para refugiarse feo invierno... Algo que definitivamente no esperaba era ser atacado por una inmensa pantera negra... ¿¡QUE HACÍA UNA PANTERA EN EL BOSQUE!?

— ¡No! ¡Alejate, maldita bestia!

Un desesperado JiMin se encontraba acorralado contra una de las esquinas de su sala, sintiéndose cazado por el gatote frente a él.

Claro, por la desesperación solo pudo tomar un triste tenedor para defenderse de los prominentes colmillos y las garras que con un rocé rasgaban tu carne.

— No me comas, porfavor.

El Omega era un lío de lágrimas, era muy joven para morir y aunque su vida ya fuera miserable y ya hubiera considerado varias veces acabar con su vida, no quería terminar en el estómago de un gatote.

Mientras tanto, la pantera se debatía en que hacer. Era una pantera en celo, había encontrado un rastro de un aroma delicioso mientras vagaba por su no hábitat, siguiendo aquel rastro encontró una cabaña donde debía seguir el bosque, mirando la luz que asomaba de las ventanas de la casa, algo captó su atención, algo rosa que pasaba de lado a otro, al acercarse más detallo a un humano de cabellera rosa... Su piel más blanca que la más fina porcelana, semejante al blanco de un clavel, sus pestañas doradas brillando con la luz del interior, sus prominentes labios rosados y su nariz rojita por el frío que aún se sentía dentro de esa cómoda y calentita casa vista por fuera.

Quizás había exagerado un poco con su entrada, caminando directo al Omega que ahora estaba más pálido, estaba en celo... No podía controlarse bien y era un bruto por naturaleza.

Su animal le controlaba, simplemente se abalanzó contra el pequeño cuerpo, enterrando sus colmillos, dirigidos a su cuello, en el brazo del chico, el cual movió como acto de defensa. Él no se quedó atrás, se ganó que los picos del tenedor fueran encajados en su costado, el Omega aterrado y sin sentir el dolor debido a la adrenalina, sacó y volvió a apuñalar al gato, queriendo protegerse de alguna forma desesperada.

Cuando la parte racional del gato reaccionó debido al dolor constante, ya era muy tarde, el que se supone debía proteger, había sido herido por el mismo. Sin poder hacer nada debido al pánico, huyó. Su orgullo siendo herido al verse tan poco alfa, lastimando a un Omega indefenso y huyendo sin ayudarlo.

Mientras tanto, el pelirosa no podía dejar de derramar lágrimas, su manita aún empuñando el tenedor, estando está manchada de sangre ajena, mientras que la propia deslizaba por todo su brazo hasta gotear por sus dedos. La sangre se veía más debido a lo blanca que era su piel, creando un contraste mucho más llamativo.

Mientras esto sucedía, una tierna ardillita observaba desde un árbol, todo lo sucedido.

WTF? ¿Dos capítulos en un día?
bueno, son 530 palabras, es más de lo que he escrito en esta basura, tenganme paciencia porfa.
T

engo ganas de ponerme al corriente con esta vaina pero es que AH.
Si es que no me quedo dormida en un rato, seguiré actualizando, quizás por la noche siga hasta acabar con esta (o acercarme) y seguir con la siguiente.

Por cierrrto.
He publicado el primer capítulo de una nueva historia, de mi total autoría, comenzará oficialmente a principios de agosto.
¿Por qué tanto?
POR QUE NECESITO ACABAR DE PASAR ESTA VAINA Y SEGUIRLE CON LA SIGUIENTE TEMPORADA Y ESTOY A NADA DE TIRARME DE UN PUENTE.


Denle amor o me mato.

¹°MineೃJiMin harem.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora