Llego el momento de salir a una fiesta. En esas épocas de secundaria se volvieron famosas los eventos para jóvenes de secundaria. Los organizadores de esos eventos eran dos tipos que habían terminado la secundaria un promedio de 20 a 24 años. Estos chicos se volvieron mis amigos, siempre me invitaban a sus eventos ya que me tenían un cariño como un hermano menor. Yo aprovechaba esa amistad para entrar gratis a las fiestas porque estos eventos tenían un costo de 10 soles. Pues 10 soles para un joven de secundaria era un gran costo. Ya que no ganábamos dinero y ahorrábamos de las propinas de nuestros papás. Yo fui un sábado a la fiesta de Litex y Zorillo, los apodos de estos chicos. Ellos eran los organizadores de eventos de fiestas para estudiantes de secundaria en Cedros de Villa. Estos tipos les gustaba meterse con colegialas, y tener relaciones sexuales con ellas. Ellos ganaban dinero con sus fiestas clandestinas y de pasó drogaban o emborrachaban chicas para después tener sexo con ellas. La verdad no me percate las personas asquerosas que eran, era muy inocente aún. Recuerdo que esa noche fui con mi mejor amigo Juan Francisco, nuestro amigo Oscar y un amigo más llamado Marius. Esa noche no fui muy divertida, la fiesta fue demasiado aburrida y solo logré bailar con una chica, pero no fue algo relevante. Pero lo importante de esa fiesta fue que conocí a cierta señorita de anteojos que llamó demasiado mi atención. Ya que veía como bailaba perreo con varios chicos y a mí me daba ganas de sacarla a bailar, pero siempre estaba ocupada bailando con alguien. La verdad me llamó la atención porque era delgada y nunca había besado a una chica con anteojos. Digamos que tenía un fetiche con las mujeres con anteojos y luego arme una lista de que chicas con ciertas características no había besado aún. (Como por ejemplo chicas morenas, chinas, altas, rubias, negras, con brackets,etc).Pasó unas semanas y de curioso encontré el Facebook de esta chica ,se llamaba Mayra Zavala. Le comencé a escribir por Facebook y luego empezamos a coquetear. Ella era una chica que besaba a cualquier chico que le interesaba no era alguien difícil de conquistar. Entonces un día salimos a conocernos, yo fui a verla a las espaldas de colegio "Maria Razier" que también se ubicaba en los "Cedros de Villa". Ella estaba parada en toda una esquina, pues yo me le acerque y empezamos a conversar. No fue una conversación muy larga ni interesante. Lo básico en realidad, un hola ¿qué tal? o ¿qué tal te fue hoy? Ella y yo sabíamos lo que queríamos y las palabras estaban de más. Así que empezamos a besarnos y yo empezaba a agarrarles las nalgas. Mientras la besaba la volteaba para que su trasero este rozando mis pantalones y así pueda puntearla mentras la abrazaba. Ella era igual de pervertida así que había entendido la idea, entonces también apretaba su trasero contra mí para que pueda sentir todo lo que tenía en la entrepierna. Luego de esa tarde, no nos vimos como en dos semanas porque yo le había perdido el interés. Simplemente no me gustaba solo la quería besar por un fetiche mío. Pues una noche que estaba en la casa de mi amigo Enrique viendo una película con él y mi amigo Miguel. Ella me escribe diciéndome que me quería ver justo en ese momento. Pues yo aproveche el permiso que tenia de estar fuera de mi casa y mis amigos estaba viendo "No se Aceptan Devoluciones" un largometraje que ya había visto con anterioridad. Por eso mismo aproveche la oportunidad de ir a verla. Le dije a mis amigos que tenía que irme porque mi mamá ya me había llamado y llame a mi mamá para decirle que me demoraría una hora más en llegar a mi casa. Luego fui donde la ubicación de Mayra para encontrarnos. Ella no estaba muy alejada de la casa de mi amigo así que fue fácil encontrarla. El lugar donde estábamos era una calle un poco oscura y desolada. Ella y yo empezamos a besarnos nuevamente con mucha pasión contra una pared de una casa abandonada y de pronto ella metió su mano dentro de mi pantalón y me la empezó a jalar mientras me besaba. Esa escena fue demasiado excitante, era la primera vez que una chica me hacía eso en pleno espacio público y el éxtasis de que me estén masturbando el miembro viril al mismo tiempo de estar en la calle era doblemente excitante y satisfactorio. Ella se volteaba y ponía su trasero contra mí y se movía suavemente para hacerme eyacular, pero nunca logro pasar lo segundo. Yo estaba en tanta excitación que no pensaba "venirme" en plena acción. Tuvimos que parar porque vecinos de la zona empezaron a frecuentar más y también porque se me hacia un poco tarde para irme a mi casa. Me despedí de ella con un beso y una mordida en los labios y corrí hacia mi hogar. No estaba enamorado de Mayra, pero si me gustaba como una especia de amante o amiga con derecho con la cual solo teníamos momentos de placer y lujuria sin ningún lazo romántico que nos una. En el salón de la escuela yo siempre le contaba todas mis anécdotas con chicas a mi amigo Juan Francisco y él hacia lo mismo. Juan Francisco se quedó tan fascinado con todo lo que hacía Mayra que me preguntó si podía salir con ella. Porque teníamos códigos de no interferir en las chicas del otro y que ninguna mujer rompería nuestra amistad. Aunque Juan Francisco también había agregado por Facebook a Mayra y también la coqueteaba, pero no salía con ella aún. Y menos porque sabía que yo estaba saliendo con ella. Pero Mayra no me gustaba y solo era algo sexual así que lo rete a Juan Francisco que salga con ella y cuánto tiempo se demoraba en agarrar (bese jerga peruana) con ella. Y así fue, a las dos semanas yo deje de ser tan comunicativo con Mayra y Juan Francisco la invitó a salir. Mi mejor amigo tuve excito, y fue casi la misma historia que la mía. Ella lo citó en el mismo colegio, en el mismo punto. Juan Francisco me conto todo lo que hicieron y fue casi parecido a mi primera cita con ella. Entonces ellos comenzaron a salir más e impresionantemente entablaron una relación de casi enamorados. Algo que nunca creí porque Juan Francisco era un mujeriego como yo y ella era una chica que también solo le gustaba pasarla bien con los chicos. Pero entre mujeriegos y bandidas se enamoran. Yo había dejado de frecuentar con Mayra y mi amistad con Juan Francisco no había cambiado. Él me contaba sus historias con ella y yo simplemente lo apoyaba con una sonrisa. No me importaba porque nunca me gustó y también estaba en coqueteos con otras chicas. Pasaron unas 2 semanas más, yo había vuelto hablar con Mayra. Fue un sábado en el cual ella me habla y me dice para encontrarnos un rato por la "Playa la Chira". Yo no entendía porque, pero algo me olía que se había peleado con Juan Francisco. Entonces fui para descubrir lo que sucedía y empezamos a caminar y conversar cerca a la arena de la playa. Era la primera vez que tenía una conversación larga con ella puesto que siempre era vernos y manosearnos. Nunca había una plática entre nosotros. En esa conversación yo le preguntaba sobre Juan Francisco y ella me decía que era un chico guapo y que besaba muy rico. Y yo por joderla le dije "y ¿yo que tan bien beso?". Al lanzar esa pregunta, nos vimos fijamente y empezamos a besarnos. Ustedes me dirán traicionaste a tu amigo, pero ella era una bandida, Juan Francisco era consciente del tipo de chica que era y yo pues no lose creo que quise disfrutar un agarre más con ella. Entonces empezamos a caminar por la playa a una zona donde había casas de playas exclusivas de "La Encantada de Villa" una urbanización pituca(adinerada) de Lima. Yo me apoyé en una pared pequeña de esas casas que apuntaban a la playa y ella se puso en la misma posición de la última noche que la vi. Pero esta vez me había bajado más los pantalones y empezó a masturbarme con fuerza y ponía todo su trasero en mi verga mientras se sacudía. Yo sentía toda la tela de jean que tocaba todo mi miembro viril, fue más excitante que la última vez. Fue mi primer faje (sexo con ropa) en plena zona pública. Nuevamente trataba de hacerme eyacular, pero no lo pudo lograr y me decía "vamos a tu casa" pero mis padres estaban ahí y no había un lugar caleta(privado,oculto) para los dos. Pero nuevamente los vecinos nos interrumpieron y tuvimos que parar de hacer nuestras perversiones. Término esa salida y a la semana siguiente le conté a Juan Francisco que había salido con ella y habíamos vuelto a agarrar. Él solo se río , ni siquiera se molestó. Me dijo que ella no le importaba tener una relación con él porque solo buscaba a muchos chicos para agarrárselos. Nos reímos y paso esa experiencia con ella. Era la primera vez que compartía una misma chica con un amigo. Pensé que sería la última vez que me enteraría de ella, pero Juan Francisco siguió saliendo con ella y esta vez sí se convirtieron en enamorados por un periodo. Ellos tenían una conexión un poco extraña la cual los volvía a unir. En esa relación solo era esperar a ver quién le sacaba la vuelta al otro y caía en sus bajos instintos de putería. Yo seguí con lo mío y tenía una nueva cita a mediados del mes de junio del 2014 en Parque Fatima, Huaylas, Chorrillos.
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Amor para idiotas
RomanceEsta historia está concentrada en la vida de Mckenzie Collantes que contara su vida amorosa unipersonalmente. Que al pasar de los años comenzó a experimentar su sexualidad,el amor y la amistad más nuevas cosas que se verán reflejadas en este libro...