Capítulo 1 : Aves que vuelan libremente.

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Me encuentro de pie mirando mi reflejo ante el espejo, el sol se asoma lentamente por mi ventana, ¿cómo es qué no he conseguido dormir nada?

«Beep, beep» el sonido infernal de mi alarma me avisa que es hora de arreglarme, ¿acaso existe sonido más molesto qué este?

Entro en la ducha con la esperanza de que el agua caliente y la espuma se lleven mis preocupaciones, noto como me relajo al instante.

Me visto con el uniforme del instituto, mientras cepillo mi cabello rubio pienso: ¿debería dejarlo crecer? Si debería.

Cuando termino de maquillarme casi ni parece que he pasado la noche en vela, me veo genial.

Mientras bajo por las escaleras el aroma a maple invade mis fosas nasales y ahí está mi madre preparando pancakes.

— Hola— saludo a mis padres.

—Buenos días, ¿Has dormido bien?— pregunta mi madre ofreciéndome su mejor sonrisa.

— Buenos días, no he dormido nada.

—Irá bien, pequeña— dice mi padre con esa voz ronca que usualmente tiene por las mañanas. Me encanta su manera de llamarme "pequeña"me hace sentir segura de alguna manera.

— Eso espero.

—Toma asiento, no querrás que se te haga tarde.

No tengo apetito pero tampoco creo que le haga gracia que la deje con el desayuno en la mesa.

— Ellen, quiero que conduzcas con cuidado— me advierte mi madre.

—Lo haré, mamá.

— Lo digo en serio— insiste.

—Nos vemos en la tarde— me dirijo de prisa a la puerta antes de que diga algo mas.

De camino al instituto mis nervios no hacen más que aumentar ¿qué pasará si no consigo hacer amigos? No soy muy sociable. Trato de relajarme poniendo algo de música, al cabo de unos minutos estoy cantando a todo pulmón junto con the fray, es el mejor grupo que pueda existir, la letra de su música es tan acertada y es justo lo que no podemos decir. Estaciono mi viejo Toyota Corolla lo más cerca posible del edificio,es tan grande que me resulta intimidante.

—¿Eres de primer curso?— pregunta una chica de cabello marrón.

—Hola, si, ¿y tú?

—También, no consigo encontrar el salón veintidós.

—También me toco el veintidós, podríamos buscarlo juntas— propongo.

— Soy Jane— me da un beso en la mejilla.

— Soy Ellen— sonrío.

Caminos hacía al gran edificio.

— Quiero presentarte a mis amigas— dice mientras entramos a un salón. 
                                  
Me presenta Grace, Julie, y Mara.

Son un grupo bastante agradable y el día transcurre muy rápido al lado de las chicas que acabo de conocer.
Todos los maestros me caen de maravilla, excepto uno, da igual que sea guapo y extremadamente joven para ser un maestro. Tiene algo en la mirada que no me inspira confianza y tal vez esté  exagerando.

Después de lidiar con el molesto profesor "Roger" almuerzo con las chicas, que me cuentan un poco sobre su vida. Continuó con el resto de las clases,y cuando menos lo imagino es hora de ir a casa.

—Ahí está— dice Julie cuando salimos del edificio.

— ¿Quién?— la curiosidad me puede.

Mi vista sigue la suya, a un par de metros se encuentra un chico alto, de tes blanca,y cabello oscuro. 

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