Un Año

Clausula

Zhan despertó con vomitos, corrió al baño tan rápido como pudo, sin notar que Yibo ya no estaba en la cama. Después de vomitar en el baño, salió, notando que Yibo había huido, como siempre, ni siquiera esto lo movía, suspiró cansado, se vistió y salió de la habitación, listo para un día solitario, más grande fue su sorpresa de ver a Yibo en la mesa, junto a su abogado.

Su corazón se despedazó, de verdad giraría el divorcio, su piernas temblaban mientras recorría el pasillo. Yibo vio a Zhan, se levantó para llamarlo, noto entonces lo pálido que estaba, alarmado corrió a ayudarlo, caminaba sostenido del muro, sostuvo a Zhan por la cintura, seguía delgado, ¿Cuánto pasaría para ver si vientre abultado?, Quería preguntar, más al girar su cara para verlo, Zhan se desplomó en sus brazos, alarmado sostuvo el cuerpo, lo cargo hasta el sillón de la sala, dejándolo un segundo mientras buscaba el número de emergencias.

-Yibo, Calama, dijiste que está embarazo, es normal, solo es otro síntoma, déjalo descansar, tiene ojeras... ¿Todo bien?-

-Algunas cosas no... Pero, ahora con el bebé, ya no puede dejarme, ¿Cierto?

-Bien, el contrato se anula, pero... Eso le da la libertad de irse ahora mismo si así lo quisiera, Yibo, ¿Que harás entonces?-

-Yo...- Zhan abrió los ojos, estaba un poco desorientado, más recordó todo al ver al abogado.

-Yibo...-

-Calma, escucha, el está aquí porque se habría la otra cláusula de nuestro contrato-

-¿Que cláusula?-

-En su contrato había u a pequeña cláusula sobre eventos imprevistos, el evento imprevisto en el trato es, su embarazo-

-¿Que significa eso?

-Eso significa que este contrato queda anulado, ya no es necesario pagar nada por la separación o terminar el año de convivencia.

Zhan se sentía herido, Yibo hacía esto para dejarlo, ¿Por que?, había hecho todo bien, había tratado de ser un buen esposo, su corazón dolía y las lágrimas fluían. Yibo se acercó, quería abrazarlo, más Zhan lo rechazó, mirándolo a los ojos, con una expresión tan devastada que Yibo quería matar al abogado.

-¿Me pediras el divorcio?

Yibo reaccionó, abrazo a Zhan con todas sus fuerzas, silenciando sus sollozos contra su pecho.

El abogado se sintió un poco fiera de lugar, rompiendo el trato salió de la casa, para que el matrimonio tuviera un poco de privacidad y tomar sus decisiones.

Zhan siguió llorando, hasta que su estómago protestó. No había comido nada, Yibo sonrió al escuchar el estómago de su esposo.

-Zhan... Vamos a comer...-

-contestame, ¿Nos vamos a divorciar?-

-Hablaremos de eso después, toma tus cosas, almorcemos fuera...-

Zhan solo tomo una chaqueta y siguió a Yibo. Llegaron a un pequeño restaurante, con un jardín bastante lindo, Zhan al fin se había calmado. Ordenaron su desayuno, Yibo sonrió al ver la gran cantidad de platillos frente a Zhan.

-Wow, mi hijo se levanta con mucha hambre...-

-me hace vomitar todo en la mañana, así que es normal... Debo reponerme...-

-¿Cuando debemos ir al hospital?

-¿Ir?

-si, ya sabes, debes tener un control, también debemos comprar todo para su habitación, ¿Será niño, niña o doncel?, Quiero que sea una niña...

Zhan no sabía que decir, Yibo de verdad parecía ilusionado con el bebé, pero rápidamente la tristeza volvió, era solo por el bebé, comía en silencio, Yibo trataba de hablarle, pero si lo hacía volvería a llorar, la comida se arruinaría.

De pronto un ramo de violetas apareció frente a sus ojos, alzo la vista, Seung Youn estaba ahí de pie, sabía que se había vuelto más famoso, por lo que dudaba verlo ahora,.si bien lo habían contratado para decorar su casa y estudio, eso fue ajeno al presente.

-Zhan, al fin te encuentro, toma, quiero pedirte perdón por todo lo que te hice, y saber, ¿Podrías darme una oportunidad?

Zhan no sabía que decir o hacer, el bocado de ensalada con pollo se atoro en su garganta.

-¿Quien te crees que eres idiota?-

Yibo estaba furioso, compartían un momento con su esposo y este hijo de... Aparecía dándole flores y pidiendo una oportunidad, bien, dejaría en claro quien era cada quien.

-Ho, sigues con este idiota, Zhan, ¿No es suficiente tu venganza?, Dejemos todo atrás y volvamos a empezar amor...-

Bien, Yibo había soportado suficiente, se puso de pie, tomado a Zhan de la mano, mostrando los anillos en sus dedos.

-Mira bien idiota, Zhan se comprometió conmigo, nos casamos y tendremos un bebé, Zhan no hizo esto por venganza, y yo no soy un idiota, yo sé bien cuanto vale mi esposo, y lo amo, así que alejate de él-

-Tu puedes decir lo que quieras, pero Zhan no siente nada por ti, estuvimos juntos desde niños, no hay lugar para ti...-

-Te equivocas... Si no amara a Yibo no me habría casado con el..., Tendré a su hijo, a todos los hijos que quiera tener...- Esas últimas palabras hicieron a Zhan sentir vergüenza, Yibo no dió oportunidad al otro de defender, tomo la mano de Zhan y salieron del lugar, ya luego vería la cuenta.

En todo el camino a su casa ninguno dijo palabra, apenas cruzar la puerta Yibo atrapó a Zhan, comenzó a besarlo, llevándolo entre tropezones a la sala, acomodandolo en el sofá, sin dejar de besar, comenzó a subir las ropas de su esposo.

-Ha, Yibo... No... Espera...-

No, no esperaré, se que te me amas, ya no debo esperar a que sea un día especial o que te embriagues para hacer el amor... Ya no...-

-ha... Solo...escucha...-

-No, justo ahora solo... Quiero ser uno contigo Zhan...-

-Dañaras al bebé-
Yibo se aparto, mirando a su esposo, Zhan estaba lgo avergonzado de decir esas palabras, usar a su hijo para algo de ese tipo. Pero debían hablar.

-Lo siento, ¿Que te dijo el médico?

-no mucho... Solo que estoy embarazado, hicimos una cita para la próxima semana, pero, Yibo, hablemos...-

-Zhan, antes que nada, escucha, de verdad te amo, no se cómo o cuando, pero te amo, no quiero que e vallas, no quiero dejarte o perderte... Zhan, te amo mucho, el contrato no existe más... Pero no quiero dejarte ir, no me dejes Zhan...-

-¿Es por el bebé?-

-¿No me escuchas?, Es por ti, te amo Zhan, no quiero vivir con alguien más que tú, no quiero dormir si no es contigo, no deseo a otra persona, solo a ti, contigo aquí no necesito a nadie más...

Yibo sibtío los suaves labios de Zhan besar los suyos, esa era la respuesta, Zhan también lo quería.