Capítulo 6

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A pesar de haber arriesgado su vida por aquel reino, Yoongi ahora era el hombre más buscado en la manda, su hermano le había puesto un precio muy alto a su cabeza, pero, aun así, necesitaba solucionar todo esto, buscar a Jimin y los niños y darle final a su hermano, por lo que sin importarle nada robo ropa de algún pobre campesino que sólo quería que eta secase al sol, incluso un sombrero y así salió al pueblo, tratando de no llamar mucho la atención.

Necesitaba ayuda, necesitaba poder ingresar al reino, por lo que buscar a Hoseok era la solución, su amigo solía pasar mucho tiempo en un bar, nunca comprendió el porqué de ello, si no era un buen lugar, pero según este así se mantenía informado de cosas, y en parte le ayudaba a él como rey tener un sirviente unido al pueblo, pero ya no era más el rey.

El lugar lucía oscuro y tenebroso, Yoongi busco con la mirada a quien necesitaba, pero no lo encontró, por lo que se acercó al hombre que servía los trago.

— ¿Qué va a tomar? —. Yoongi negó ante la pregunta sin levantar mucho su rostro.

— Estoy buscando alguien, es un trabajador del reino, Jung Hoseok —. Su voz no había sido alta, aun así, toda la cantina se puso en silencio.

— ¿Hoseok? —. Pregunto el hombre mientras limpiaba uno de los vasos en el que los tragos se ofrecían. —¿Acaso no se ha enterado? —.

— No—. Respondió sincero, pues recientemente llega de nuevo a la manada.

— Ha muerto—. Escucho aquello tan alejado, sintiendo que era una mala broma.

— ¡Le asesinaron! —. Escucho ahora el grito.

— ¿Qué? —. Yoongi no lo comprendía.

¿Acaso su hermano se había atrevido a tanto?

— ¡Oh! ¡Es min Yoongi! —. A Yoongi poco le importo cuando fue descubierto, pues necesitaba sentarse.

— ¡El desertor marica! —. Dijo uno de los hombres con gran nariz y cabello despeinado, el cual fue golpeado por otro mucho más grande que él.

— ¡Cállate Chong! —. Escucho Yoongi, mientras vio como el regañado observaba a su corpulento amigo de mala forma.

— ¿Cómo que asesinado? —. Pregunto Yoongi centrándose de nuevo en el tabernero.

— Su hermano, se corre el rumor de que fue él, los empelado les escucharon pelear de una extraña forma y luego el salió de su habitación con sangre, tiempo después se le encontró muerto —. Explico uno de los hombres en la barra.

— ¿Manera extraña? —.

El hombre de los tragaos rio un poco con su voz un tanto oscura. —Creo que es de familia el gusto por el pecado —. No, Yoongi no entendió. —Parecía ser una pelea de pareja —. Fue más claro.

— Agust ha enloquecido —. Aseguro Yoongi sobando un poco sus cienes.

— Por supuesto que lo ha hecho, no ha leído el mural del pueblo —. Si, el lugar en donde los eventos importantes se les comunicaban al pueblo.

— Dice que ha dado pena de muerte a dos niños —. Explico el tal Chong.

— ¡Idiota! Claro que lo sabe, si uno es su hijo—. Dijo ese mismo sujeto corpulento y calvo a su lado, pero no, ambos vieron que se equivocaban.

— Creo que no lo sabía—. Le susurro otro hombre, con una barba insipiente.

— Acabo de llegar, mi hermano me hizo esto —. Dijo Yoongi para quitarse el sobrero y señalar su herida. — Se vendió a los malos y lo peor es que uno de ustedes lo es también —.

— No—. Respondió el dueño del lugar. —A Kim lo arrestaron y lo ejecutaron después de que usted fuera declarado muerto, su hermano quedo como un héroe que encontró el espía —.

— Mis hombres me han dado la espalda, mi familia está encerrada y no tengo la manera de atacar —. Los hombres se vieron entre ellos por uno segundo, Yoongi se veía pensativo, tal vez tratando de armar un plan y allí no le vieron como un príncipe, solo como alguien que quería a su familia de vuelta.

— ¿Necesita armas? —. Aquel hombre lleno de músculos hablo. —Se de quien tiene buenas espadas —.

— Si necesita entrar al reino, puedo ayudarle —. Se unió otro sujeto de aspecto vil y aterrador.

— Y si necesita más ayuda, lo hago, igual, me rechazaron como soldado y no tengo nada mejor que hacer hoy —. Hablo el único sujeto a que Yoongi le conocía el nombre, Chong, bebiéndose el trago de un solo sorbo.

Yoongi vio un brillo de esperanza en aquel lugar sombrío y repleto de ebrios. —¿Por qué quiere ayudarme? La mayoría de ustedes son... —.

— Ladrones—. Completo la frase Chong.

— Arpías —. Dijo el gran sujeto.

— Malhechores—. Fue el cantinero quien hablo esta vez y Yoongi asintió a cada uno de estos.

— No hay nada mejor que hacer —. Explico el mismo sacando aquel arco y flechas de aquel separador de madera entre el cliente y él.

— Y así pueda robarme algunas flores del jardín real, se verían tan bien decorando el lugar ¿Cierto Lolo? —. Bien ahora Yoongi también conocía el nombre del gran sujeto calvo y musculoso. 

Di mi nombre (Historia corta) [YOONMIN] OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora