Espejo De Oesed

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Lo primero que Harry sintió al despertar fue como su mejilla izquierda dolía por estar demasiado tiempo sobre una superficie muy dura y como por mucho que intentara fundirse consigo mismo para conseguir un poco de calor, sus intentos estaban resultando bastante inútiles. Decidió girarse, en algún otro intento mágico de conseguir un poco más de calor y comodidad para seguir con una de las pocas noches que no había tenido pesadillas, pero al hacerlo sintió como parte del dorso de su mano tocaba algo frío y suave, en cuanto percibio esa nueva sensación termino por abrir los ojos de una vez.

Desorientado por estar todavía medio dormido, no entendía dónde estaba o porque se había dormido con los lentes que ahora mismo estaban colgando casi que en el puente de su nariz, los tuvo que acomodar de nuevo a su lugar correspondiente antes que cayeran mientras bostezaba y se desperezaba comenzó a inspeccionar dónde se encontraba.

Fue cuando giro la cabeza y se volvió a encontrar con la suave mirada de su profesor que primero, se asustó y pego un grito del cual negaría completamente el que se haya escuchado más agudo de lo que debería haber sido y en su defensa a cualquiera le daría un mini paro cardíaco si lo primero que ve al despertar es a su profesor más temido con una expresión poco usual en él.

Ya cuando volvió a mirar bien es que se dió cuenta de lo que tenía en frente era el espejo, todos los recuerdos de la noche anterior regresaron a su mente haciendo que se  sintiera otra vez en la mierda. Sentía como en cualquier momento se volvería a quebrar, el escozor de las lágrimas luchando por salir, pero las reprimió. No era momento de volver a llorar. Una noche había sido suficiente, ya habría otro momento para sentirse miserable ahora tenía que salir de ahí y comprobar que todavía no era demasiado tarde para ir a clases.

Ya podía escuchar en su mente a Hermione regañandolo por su retraso. Con un suspiro de resignación realizó un Tempus y como todo Hogwarts ya
sabía su suerte era un asco. Solo faltaban 30 minutos para que empezará su primer clase: Pociones.

–Que raro.– Murmuró Harry con ironía mientras agarraba su capa y comenazaba a correr hacia la torre Gryffindor para cambiarse y agarrar sus libros.

Al menos con la capa se ahorraba la humillación de que lo vieran correr como un loco en pijama por esas horas de la mañana en medio de los pasillos, era ciertamente lo único que le faltaría al comienzo de su día, hacer el ridículo.

Luego de 10 minutos de correr sin descanzo y pasando de escaleras en escaleras pudo llegar a la torre y luego de decirle la contraseña al cuadro de la Dama Gorda seguir su rumbo hacia su habitación. Tenía 10 minutos para vestirse y otros diez para llegar al salón de pociones. Si no empezaba a vestirse ya estaba frito.

De alguna forma milagrosa logro cambiarse en menos de 5 minutos sin inconvenientes y como todos ya estarían saliendo a lo mucho del Gran Comedor (inclusive Ron) se pudo ahorrar el que lo atormentaran a preguntas de dónde estaba "Al menos por ahora" pensó.

Sin perder más tiempo y guardando su varita comenzó de nuevo a correr fuera de la torre. Después de correr tanto en tan poco rato y con tantas escaleras comenzó a pensar que quizás Oliver no los mataba tanto con sus entrenamientos.

No tanto.

De alguna forma u otra después de recorrer medio castillo llegó justo a tiempo a su clase. Cuando vio que ya no había necesidad de correr pues ya estaba llegando a la puerta del salón decidió aminorar la velocidad de su paso, pero al estar distraído intentando recuperar el aliento no se dió cuenta y choco contra una alta y robusta figura que había aparecido como por arte de magia prácticamente.

–Potter. – Hablo la figura con la que choco, la gruesa y familiar voz le causó escalofríos.

–Profesor. – respondió Harry con una calma que realmente no tenía, pues su interior era un revuelto de emociones que hacian que ni siquiera pudiera enfrentar la mirada del mayor, así que mantuvo si cabeza baja.

–Veo que hoy se levantó más ciego de lo normal Potter –volvio a hablar el mayor despectivamente –O es que su gran ego no le deja ver quién está delante suyo– termino diciendo con dejes de burla en su voz, voz que aunque las palabras dichas por ella seguían siendo dagas a su corazón, sus oídos en cambio no pudieron más que deleitarse. Harry se dió cuenta que enterarse de su realidad con respecto al profesor hizo que empezará a notar pequeños detalles que eran parte de lo que le hacían babear por el mayor. ¿Cómo sería que esa grave y un poco nasal voz le dijera otra clase de cosas en otras situaciones?

– Cinco puntos menos para Gryffindor por ignorar a un profesor–

Para su desgracia no era el momento para quedarse pensando en esa clase de cosas.

–Lo siento profesor– Murmuró con la cara levemente roja, mientras de giraba para entrar a clases.

–Tambien tendrá detención conmigo al finalizar sus clases por su falta de respeto Sr. Potter–  Termino por decir Severus mientras los dos entraban al salón. Las risas y burlas de los Slytherin no se tardaron en escuchar, aunque no duraron mucho, porque aunque la sin duda el profesor de pociones les daba favoritismo no permitía que hubiera ruido en su clase.

Harry de igual forma no les había prestado atención, estaba de vuelta metido en sus pensamientos mientras se dirigía al lugar libre que le habían guardado sus amigos.

–Las instrucciones de la poción de hoy están en el pizarrón ¡Comiencen! Saben dónde están los ingredientes.– dijo Severus a la clase mientras ondeaba su capa al sentarse en su escritorio.

"Creo que por una vez no sabría decir si ir a detención es bueno o malo" pensaba Harry mirando de reojo al profesor mientras le alcanzaba a Hermione lo que le pedía para la poción.

To be continued...

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Nuevo cap y nueva portada

Bye✨