Solo tú [Truten]

CAPÍTULO 8

¿Habré incomodado al pobre Goten? La verdad, no sé que me ha pasado; ese abrazo, tenerle tan cerca... Me era imposible resistirme. Cuando estoy junto a él es como si mi cuerpo y mente actuarán en sintonía y completamente ajenos a lo que debiera o no hacerse. Tengo ganas de llegar a esa fiesta, creo que será una buena forma de demostrar a Goten que no me importa en absoluto con lo que la gente piense, quiero que me vean con él, quiero que se sienta seguro y sepa que estoy por encima de esas cosas.

El sonido del motor de aquel deportivo hizo que todos los presentes se giraran, por fin habían llegado a casa de Ito.

- ¡Trunks! ¿Qué pasa, tío? Por fin te decides a venir a una de mis fiestas, hace siglos que no te veo de juerga – El anfitrión de ésta se encontraba recibiendo a algunos de sus invitados en el jardín delantero, cuando oyó el coche de su amigo y se acercó a saludar.

- Hola, Ito, ¿qué tal? – Trunks saludó al mencionado sin mucho entusiasmo.

- ¡Vamos, colega! Tengo que emborracharte, hoy no te libras... - dijo en tono burlón; sin embargo, algo hizo que cambiara su expresión - Oye... ¿qué hace este aquí? - preguntó entre susurros.

- Dijiste que podría traer a alguien y he traído a Goten. Es su primera fiesta y creí que era buena idea que me acompañase.

Al oír esto, Goten, se sintió algo confundido; por un lado, se sentía un poco mal por haber asistido a aquella estúpida fiesta, de ese estúpido Ito, sin embargo, también se sintió alguien importante, poderoso incluso, pues su nuevo amigo le presentaba sin ningún tipo de pudor haciéndole experimentar sensaciones completamente nuevas.

- Ah... Claro... Esperaba una tía buena como de costumbre, pero está bien, así podrá cubrirte si necesitas ir a por una chica, ¿eh? – concluyó Ito mientras acompañaba a los recién llegados dentro de la casa.

Sin embargo, Goten frunció el ceño al oír aquellas palabras - ¿"Como de costumbre"? Es que Briefs siempre está rodeado de chicas, o qué - pensó el menor.

- Siento no ser una "tía buena", aun así, ¿no crees que no deberías clasificar a la gente de esa manera? - dijo casi de manera inconsciente.

- No encasillo a nadie, tío, es solo que debes saber cómo es tu amiguito, seguramente acabes solo más de una vez en la noche – rio.

- Basta Ito, no es necesario que seas tan vulgar – Trunks dedicó una mirada fulminante a éste, quien entendió la señal y, disculpándose, se marchó a saludar a los invitados que seguían llegando.

No obstante, aquel joven ya se había percatado de que su amigo había cambiado desde que le emparejaron en aquel dichoso trabajo con Goten, no sabía de qué se trataba exactamente, pero aquellos dos parecían una pareja de enamorados y, a pesar de no gustarle ser un segundón, no quería que Trunks perdiera la reputación que le beneficiaba a él mismo.

- Lo siento, Goten, este tipo es un bocazas...

- No tienes que disculparte, Briefs... Tú eres como eres – Su voz sonó segura, pero por dentro no quería aceptar que el pelilila fuera así realmente.

- Bueno, las cosas cambian, Goten... Desde que empezamos a pasar más tiempo juntos yo... Yo sentí que todo lo que había sido hasta ese momento era un engaño y... - Trunks no pudo continuar pues otro de sus amigos fue a saludarle, repitiéndose más o menos la situación anterior.

Con algo de paciencia pudieron adentrarse en plena fiesta y el mayor se ofreció a cogerle una bebida al menor.

- ¿Qué vas a tomar? - dijo prácticamente a voces, pues la música que estaba sonando por toda la casa no dejaba comunicarse de otra manera.