1

4K 245 88
                                    

Odio estar en casa.

—¡niña de mierda! ¡¿qué te hace creer es puedes responderme?!— decía mi papá tomándome del cabello.

—¡lo lo siento mu-mucho!— trate de tomarlo de la mano que tomaba mi cabello para que no doliera tanto, pero siempre fue inútil.

-—¡ya dejala, no quiso hacer eso!— dijo mi mamá tomando su brazo para detenerlo.

Me solto pero rebote contra la pared y después vi de nuevo como le hacía una lluvia de golpes, nunca podía hacer nada, pero tampoco quería que mamá sufriera todo eso.

—¡VETE, T/N!— grito mi mamá.

Estaba paralizada, pero mi única alternativa era correr a mi habitación y encerrarme allí hasta que papá se vaya de la casa. Y eso hice, pero no llegué a mi habitación por mi padre.

—¡TU Y YO NO HEMOS TERMINADO, MALDITA NIÑA MALNACIDA!— dio el primer golpe en mi espalda haciéndome caer, atrás miré a mi madre sangrando y con lágrimas en toda la cara.

—¡ya dejame!— fue la primera vez que le hablo así, ya si estaría muerta, solo apretó mis manos y ojos esperando el golpe, pero nunca llego gracias al sonido de su celular. Pero aún así, logró patearme y con eso fue como llegué a mi habitación, pero no quería dejar a mi mamá. —¡mamá!— grite llorando.

—¡cierra la maldita puerta!— grito asustada. Y eso hice. Con el corazón a todo palpitar y con dolor de cabeza.

~~~~~

Mi papá salió de la casa y con eso llegó el silencio relajante pero a la vez desgarrador.

—mamá...— dije abriendo la puerta y fui caminando hacia donde estaba ella, en el comedor —lo siento mucho— dije llorando.

—sh~ ya, ya~ ¿y si vamos a comer un helado?— dijo ella acariciando mi cabeza.

—¿cómo puedes decir eso después de todo?— dije limpiando mis lágrimas —tenemos que decirle a los policías—

—no es tan fácil de explicar, bebé— dijo ella con una sonrisa dolida.

—¿cómo no estas enojada con todo esto?— dije tomando su muñeca con suavidad. —Te puedes desquitar conmigo, pero por favor, deja de decir que todo estará bien cuando sabes que no es así—

—sería injusto, no tienes la culpa de nada, y las dos ya estamos sufriendo por lo mismo, pero ya todo pasará— dijo tomando de mi mano con suavidad —vamos a cambiarnos e ir por un helado—

Solo asentí y ella me besó la mejilla.

~~~~~

Ya estábamos cambiadas y cerca de una heladería, me molesta un poco el ambiente si soy sincera, estamos actuando como si nada pasará en casa, me dan tantas ganas de gritar.

Cuando entramos a la heladería reconocí a alguien, un compañero o amigo, no sabría como decirlo —¿oh? ¿Sumihiko-kun?—

—¿ah? ¡oh! T/N-chan, hola— dijo sonriendome con un helado de chocolate en mano.

—¿es un amigo tuyo, cariño?— dijo mi mamá con tono alegre.

—hicimos varios proyectos juntos en su casa— dije mirándola.

—ya veo~ un placer conocerte...—

—Kamado Sumihiko, un gusto también conocerla— dijo haciendo una reverencia.

—¿estás solo?— pregunté.

—nope, estoy con mi hermano y mis primos— apunto.

—eso es bueno— dije mirando a donde apuntó y al parecer su hermano me reconoció y le saludé alguien que mi madre.

—vamos a ordenarlo ahora, ya está anocheciendo, así que no regresen tan tarde a casa— dijo mi madre.

—hasta mañana, Sumihiko-Kun— dije con una pequeña sonrisa.

Mi madre y yo ordenamos pedimos nuestros helado y nos fuimos del lugar hacia un parque antes de ir a casa.

—no quiero volver a casa...— dije mirando al pasto.

—yo tampoco, pero es mejor allí que pasar la noche fuera, es peligroso—

—papá es peligroso— dije frunciendo el ceño.

—y sería mejor llegar antes que él, aunque el siempre llega muy tarde—

—no quiero más esto...— terminé mi helado.

Suspiro mamá —sabes que te protegeré— dijo levantando mi cabeza.

—¿y tu que?—

—... solo volvamos a casa— dijo tomándome de la mano para volver.

~~~~~

Llegamos al edificio y a nuestro apartamento, la puerta estaba abierta y eso nos dio miedo, nos adentramos y encontramos a papá fumando y... con sangre en los brazos.

—malditas, ¿qué se creen saliendo de la casa?— lo apago y nos volteó a ver.

Mi mamá me tomó del torso y retrocedió junto a mi, el miedo volvió mucho peor que antes, su mirada en nosotras era peor, demasiada a como antes.

Salimos de la casa y mamá cerró la puerta tras nosotras y corrimos escaleras abajo mientras que papá gritaba.

Yo estaba llorando, ¿ahora qué nos haría? ¿Sería aún peor? Ya no podía ni moverme del miedo, estaba paralizada.

No sabía cuánto habíamos corrido pero estábamos en un parque a más de 20 minutos de nuestro edificio. Caímos y fue cuando recobre la conciencia de lo que pasaba, miré a mi mamá llorando, la tomé de la muñeca.

—¡mamá, sigamos, por favor!—

—tu tienes que seguir sola, por favor sigue, yo no puedo— dijo ella mirando su tobillo.

—no te puedo dejar! Vamos, mamá, corre!— ya no podía con tanta presión.

—¡T/N!— grito mi mamá y me caye —trata de estar lejos de nosotros, por favor, así será más fácil para las dos—

—no, no, no no ,¡no! ¡NO!— dije alterada y llorando a más no poder. —no, mamá—

Ya escuchábamos sus gritos cerca, ay no...

—bebé...— me tomo de la mejilla y beso mi frente —corre y vete—

No podía hacer nada, siempre fue así, al menos quiero obedecer a mi mamá porque se que tiene que ser así.

Me di la vuelta y corrí lo más lejos, no sabía donde o por cual lugar, pero tenía que ser lejos.

===============

En el otro capítulo comenzará toda la historia, se los juro :"3

Jugando con el tiempo (Kimetsu No Yaiba y Tu) |CANCELADO|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora