Mi nombre es Tony López II TERMINADA

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Él parecía bastante confundido pero segundos después cayó en cuenta.

—¿Él lo sabe? ¿Cómo?

—Pues hemos tenido a personas siguiendonos este tiempo.

—Pero que te ha dicho? Que le dijiste?

—Eso no importa, mientras no arruine a mi familia ni a ti. —Tomé su mano

—Te amo —Me miró a los ojos

(...)

Tomé un pequeño descanso en el jardín de mi casa y después me fui a mi piscina. Dejé mi celular a un lado de la silla y me metí a nadar. Al estar bajo el agua se escuchó el móvil. Salí rápidamente.

—¿Hola?

—Estoy afuera de tu casa, estoy llegando a la sala. Desde aquí puedo verte.

Al mirar adentro de mi casa vi a Fernando de pie con una gran sonrisa en su rostro.
Colgué el teléfono y volví a meterme al agua.

—Existen los bikinis sabes hermosa.

—¿Qué hay de mal en mi blusa y short?

—Que se ve mal para mi

—No esperaba tu visita —arqueé mi ceja

—Vine a hablar contigo, así que sé buena chica y sal de ahí.

Lo miré desafiante.

—Bien

—Excelente, te ayudo a salir

—Yo puedo sola, gracias.

Me enrollé en mi toalla y empecé a pasarla por mi cabello.

—Dame cinco minutos y estoy en el comedor para hablar de lo que sea que te interese.

—Te espero allá

—Pide algo de beber, las víboras como tú también tienen sed─ solté una carcajada y me subí a cambiar

Al mirar mi teléfono estaba una notificación de los mensajes de ondreaz. Lo abrí, una foto mia hablando con Fer, parecía tomada desde la habitación de Tony. Me reí y solo deje un pequeño mensaje

"sólo hablaremos, no tienes que preocuparte"

Al bajar Fer estaba con una de las chicas de servicio ordenando algo de beber.

─Pensé que nunca bajarías

─De qué quieres hablar?

─En este momento las fotografías fueron enviadas a tus padres y no tardarán mucho en llegar así porque mejor no esperamos

─¿Por qué lo hiciste?─mi tonó de voz era más fuerte

─Cálmate, tú fuiste la que me engañó.

Por un par de minutos se hizo el silencio hasta que la puerta principal se abrió.Mis padres entraron buscándonos y cuando nuestros rostros se encontraron vinieron a mi dirección.

─Mamá déjam...─ Una bofetada se hizo presente en mi rostro, sentí el dolor al instante.

─Cállate, no quiero saber nada. Fernando, cuánto lo siento, no sabíamos nada de esto, ¿cancelaras la boda?

─De hecho señora Austin, lo he pensado bien, no la cancelaré pero tengo mis condiciones─ su sonrisa malevola sabía que algo no estaba bien

─Las que sean─ mi madre lo tomó por los hombros, mi padre ni si quiera me miraba.